¡Aguante la bronca, pura vida! Resulta que este lunes 3 de noviembre arrancó oficialmente el cobro del marchamo 2026 y la gente ya anda echando el correa, aunque algunos todavía andan pegándose unos sustos al ver cuánto les toca pagar. Según datos frescos del INS, unas 1.832 personas ya le metieron mano a sus bolsillos para regularizar la situación. Eso sí, hablando de números, a pesar de que más de 800.000 personas ya revisaron cuánto les sale la cuentas, el porcentaje de quienes realmente pagaron sigue siendo bajito, menor al 0.1%, vaya.
Ahora bien, si nos ponemos a revisar los precios, la cosa se pone interesante. Parece que tener un Ferrari modelo 2018 en Costa Rica te obliga a sacar unos colones que ni siquiera imaginas: ¡¢7.192.439! Sí, así nomás. ¿Se imaginan la diferencia? Es como casi cien veces más que el marchamo de un Mitsubishi ‘89, que apenas llega a los ¢73.706. Ahí hay un brete de disparidad, mae. De verdad, eso te hace pensar qué onda con los carros de lujo en nuestro país…
Pero la vaina no termina ahí, porque resulta que aún hay vehículos circulando por acá que tienen más años que yo. Hablando de antigüedad, tenemos un Hudson Super Six del lejano 1919, que todavía está pagando marchamo, aunque sea una módica suma de ¢74.726. Ese carro ya es parte de la historia nacional, ¡pura reliquia! Uno se pregunta cómo habrá sobrevivido tantos años... Seguro que tiene sus propios secretos y anécdotas guardadas, diay.
Para los que estén pensando en dónde ir a pagar este chunche, el INS ha puesto todas las facilidades. Pueden hacerlo online a través de www.grupoins.com o usando la app INS Móvil. También pueden llamar al 800 TELEINS (800-835-34-67) o buscar alguno de los 2.242 puntos de cobro repartidos por todo el país. Además, siempre está la opción de visitar las oficinas centrales del INS, sus sucursales y los puntos de servicio. Así que, no hay excusas, ¡a regularizar la vara!
Lo curioso es que, pese a toda esta información accesible, todavía hay gente que se queda con el pie atrás. Algunos dicen que los precios están muy altos y que el gobierno debería hacer algo al respecto. Otros simplemente prefieren esperar a última hora, sabiendo que corren el riesgo de tener que pagar recargos. Pero bueno, cada quien con su criterio, ¿no?
Y no olvidemos mencionar que este año el INS está sacando adelante alrededor de 1.943.000 millones de derechos de circulación. Una cifra considerable que demuestra la importancia del marchamo para las finanzas públicas. Con esos fondos, se puede financiar proyectos sociales, mejorar la infraestructura vial y brindar mejores servicios a la población. Así que, al final del día, pagar el marchamo es también contribuir al desarrollo del país, aunque a veces duela un poquito en el bolsillo, qué carga!
En fin, parece que este año el tema del marchamo seguirá generando conversación y polémica. Como siempre, la gente tendrá mucho que decir y opinar al respecto. Algunos estarán satisfechos con los precios, mientras que otros se sentirán estafados. Lo importante es mantener la calma y recordar que el marchamo es una obligación legal que todos debemos cumplir. Después de todo, nadie quiere meterse en problemas con el tránsito, ¡eso estaría salado!
Con todo esto dicho, me pregunto: ¿Creen ustedes que los precios del marchamo deberían ajustarse según el valor real de los vehículos, o es justo que los dueños de autos deportivos paguen tanto? ¡Déjenme sus opiniones en los comentarios! Vamos a echar raíces y debatir sobre este tema que afecta a todos los costarricenses, vamos a ver qué dice la greca!
Ahora bien, si nos ponemos a revisar los precios, la cosa se pone interesante. Parece que tener un Ferrari modelo 2018 en Costa Rica te obliga a sacar unos colones que ni siquiera imaginas: ¡¢7.192.439! Sí, así nomás. ¿Se imaginan la diferencia? Es como casi cien veces más que el marchamo de un Mitsubishi ‘89, que apenas llega a los ¢73.706. Ahí hay un brete de disparidad, mae. De verdad, eso te hace pensar qué onda con los carros de lujo en nuestro país…
Pero la vaina no termina ahí, porque resulta que aún hay vehículos circulando por acá que tienen más años que yo. Hablando de antigüedad, tenemos un Hudson Super Six del lejano 1919, que todavía está pagando marchamo, aunque sea una módica suma de ¢74.726. Ese carro ya es parte de la historia nacional, ¡pura reliquia! Uno se pregunta cómo habrá sobrevivido tantos años... Seguro que tiene sus propios secretos y anécdotas guardadas, diay.
Para los que estén pensando en dónde ir a pagar este chunche, el INS ha puesto todas las facilidades. Pueden hacerlo online a través de www.grupoins.com o usando la app INS Móvil. También pueden llamar al 800 TELEINS (800-835-34-67) o buscar alguno de los 2.242 puntos de cobro repartidos por todo el país. Además, siempre está la opción de visitar las oficinas centrales del INS, sus sucursales y los puntos de servicio. Así que, no hay excusas, ¡a regularizar la vara!
Lo curioso es que, pese a toda esta información accesible, todavía hay gente que se queda con el pie atrás. Algunos dicen que los precios están muy altos y que el gobierno debería hacer algo al respecto. Otros simplemente prefieren esperar a última hora, sabiendo que corren el riesgo de tener que pagar recargos. Pero bueno, cada quien con su criterio, ¿no?
Y no olvidemos mencionar que este año el INS está sacando adelante alrededor de 1.943.000 millones de derechos de circulación. Una cifra considerable que demuestra la importancia del marchamo para las finanzas públicas. Con esos fondos, se puede financiar proyectos sociales, mejorar la infraestructura vial y brindar mejores servicios a la población. Así que, al final del día, pagar el marchamo es también contribuir al desarrollo del país, aunque a veces duela un poquito en el bolsillo, qué carga!
En fin, parece que este año el tema del marchamo seguirá generando conversación y polémica. Como siempre, la gente tendrá mucho que decir y opinar al respecto. Algunos estarán satisfechos con los precios, mientras que otros se sentirán estafados. Lo importante es mantener la calma y recordar que el marchamo es una obligación legal que todos debemos cumplir. Después de todo, nadie quiere meterse en problemas con el tránsito, ¡eso estaría salado!
Con todo esto dicho, me pregunto: ¿Creen ustedes que los precios del marchamo deberían ajustarse según el valor real de los vehículos, o es justo que los dueños de autos deportivos paguen tanto? ¡Déjenme sus opiniones en los comentarios! Vamos a echar raíces y debatir sobre este tema que afecta a todos los costarricenses, vamos a ver qué dice la greca!
