¡Ay, Dios mío, qué carga de cosas haciendo los muchachos de BAC! Parece que ya no basta con dar pasajes y préstamos, ahora quieren tocarle el corazón a la gente. La verdad, es interesante ver cómo las empresas se esfuerzan por ser más que números y balances contables, ¿verdad?
Según Laura Moreno, la vicepresidenta de relaciones corporativas, sostenibilidad y mercadeo del banco, la onda es crear “experiencias significativas”. No sé vos, pero a veces siento que el mundo financiero es todo muy frío y calculador. Entonces, si BAC quiere calentar un poquito la cosa, me parece chévere. Su plan es construir un “sentido compartido” con los clientes y otros actores clave. Eso sí suena ambicioso, diay.
Parece que detrás de esto hay un esfuerzo de Brand Lab de Estrategia y Negocios, esos mismos que andan por toda Centroamérica conectando marcas con gente a través de cuentos y videos. Son unos estrategas, te digo. Trabajan desde Guatemala hasta Panamá, ayudando a las empresas a posicionarse mejor. Aparentemente, tienen una plataforma de contenido estratégico para eso... una vara bien completa, vamos.
Ahora, la pregunta es, ¿qué significa realmente “una experiencia significativa”? ¿Un cupón de descuento extra? ¿Una tarjeta con diseños más bonitos? Supongo que es algo más profundo. Se trata de hacer sentir a la gente parte de algo más grande, de tener un propósito común. Y ahí entra la sostenibilidad, el liderazgo femenino… un brete de temas que tocan, mae. BAC se ha metido en aguas profundas, buscando conectar con valores más allá del dinero.
Esto viene en un momento interesante, porque la sociedad está cambiando. Ya no queremos solo servicios bancarios; queremos que las empresas tengan conciencia social y ambiental. Queremos saber que las instituciones donde depositamos nuestros ahorros están haciendo lo correcto, cuidando el planeta y apoyando a las comunidades. Si BAC le atina a esto, podría marcar una diferencia importante.
Además, se nota la influencia de ISEADE, esa escuela de negocios que forma líderes empresariales. Por lo que entiendo, les enseñan a pensar más allá de los beneficios económicos y a considerar el impacto social de las decisiones. Eso explica por qué BAC está apostando tanto por este cambio de enfoque, ¿no creen?
No sé ustedes, pero yo me pregunto si estas iniciativas realmente llegan a la gente común o si son solo estrategias de marketing sofisticadas. A veces siento que las empresas nos venden humo, ofreciéndonos soluciones mágicas que nunca funcionan. Pero bueno, esperemos que BAC demuestre que puede cambiar el juego y que está comprometido con un futuro mejor para todos nosotros. Porque, al final del día, todos queremos vivir en un país más justo y sostenible, ¿eh?
En fin, BAC está tratando de reinventarse, de pasar de ser un simple banco a una empresa con propósito. Es un paso valiente, aunque también arriesgado. Al final, dependerá de ellos demostrar que están dispuestos a cumplir lo que prometen. Ahora, dime tú, ¿crees que los bancos pueden realmente conectar con las emociones de la gente, o es simplemente una estrategia más para vender productos financieros?
	
		
			
		
		
	
				
			Según Laura Moreno, la vicepresidenta de relaciones corporativas, sostenibilidad y mercadeo del banco, la onda es crear “experiencias significativas”. No sé vos, pero a veces siento que el mundo financiero es todo muy frío y calculador. Entonces, si BAC quiere calentar un poquito la cosa, me parece chévere. Su plan es construir un “sentido compartido” con los clientes y otros actores clave. Eso sí suena ambicioso, diay.
Parece que detrás de esto hay un esfuerzo de Brand Lab de Estrategia y Negocios, esos mismos que andan por toda Centroamérica conectando marcas con gente a través de cuentos y videos. Son unos estrategas, te digo. Trabajan desde Guatemala hasta Panamá, ayudando a las empresas a posicionarse mejor. Aparentemente, tienen una plataforma de contenido estratégico para eso... una vara bien completa, vamos.
Ahora, la pregunta es, ¿qué significa realmente “una experiencia significativa”? ¿Un cupón de descuento extra? ¿Una tarjeta con diseños más bonitos? Supongo que es algo más profundo. Se trata de hacer sentir a la gente parte de algo más grande, de tener un propósito común. Y ahí entra la sostenibilidad, el liderazgo femenino… un brete de temas que tocan, mae. BAC se ha metido en aguas profundas, buscando conectar con valores más allá del dinero.
Esto viene en un momento interesante, porque la sociedad está cambiando. Ya no queremos solo servicios bancarios; queremos que las empresas tengan conciencia social y ambiental. Queremos saber que las instituciones donde depositamos nuestros ahorros están haciendo lo correcto, cuidando el planeta y apoyando a las comunidades. Si BAC le atina a esto, podría marcar una diferencia importante.
Además, se nota la influencia de ISEADE, esa escuela de negocios que forma líderes empresariales. Por lo que entiendo, les enseñan a pensar más allá de los beneficios económicos y a considerar el impacto social de las decisiones. Eso explica por qué BAC está apostando tanto por este cambio de enfoque, ¿no creen?
No sé ustedes, pero yo me pregunto si estas iniciativas realmente llegan a la gente común o si son solo estrategias de marketing sofisticadas. A veces siento que las empresas nos venden humo, ofreciéndonos soluciones mágicas que nunca funcionan. Pero bueno, esperemos que BAC demuestre que puede cambiar el juego y que está comprometido con un futuro mejor para todos nosotros. Porque, al final del día, todos queremos vivir en un país más justo y sostenible, ¿eh?
En fin, BAC está tratando de reinventarse, de pasar de ser un simple banco a una empresa con propósito. Es un paso valiente, aunque también arriesgado. Al final, dependerá de ellos demostrar que están dispuestos a cumplir lo que prometen. Ahora, dime tú, ¿crees que los bancos pueden realmente conectar con las emociones de la gente, o es simplemente una estrategia más para vender productos financieros?
 
	 
 
		 
  
 
		 
 
		 
 
		 
  
 
		 
 
		 
 
		 
 
		 
 
		 
 
		 
 
		