Hace poco tuve la oportunidad de hacer teletrabajo y resulta que tengo un amigo con el que frecuentemente cojo, que estaba cerca. Él estaba trabajando, pero puede salir y hacer otras varas, porque el trabajo se lo permiten. La vara es que yo desde temprano le empecé a mandar mensajes, diciéndole que que quería verlo y demás. Le tiraba indirectas como que me tenía que bañar y que necesitaba que me ayudara, él me decía que no le dijera esas cosas, porque se moría de ganas por ir, yo le contestaba venga, nada pierde. Luego de varios mensajes el mae me puso, será que voy 5 min y obvio ni lerda ni perezosa le dije que sí. Esos días andaba mis hormonas/deseos a full, además él me encanta, por lo que podríamos coger siempre y yo no pondría ninguna objeción.
Me fui a bañar, aproveché para depilarme, me eché perfume para oler rico y me puse un vestido y un cachetero de encaje. Al rato llegó, entramos al cuarto, hablamos un par de minutos mientras nos besabamos, yo le toqué el pene sobre la ropa y el mae estaba súper erecto. Yo deseaba sentarme encima de él, con mis piernas a su alrededor pero andaba con ropa formal y no iba a arrugarle todo.
Seguidamente, me empezó a tocar las nalgas por debajo del vestido, me tocó suavemente encima de mi calzón y poco a poco me fue metiendo sus dedos entre éste para acariciar mi vulva, obviamente ya estaba toda mojada. Le empecé a desabrochar la faja y el pantalón, mientras lo seguía besando.
Él se quitó la camisa, quedó en camiseta con su pantalón y bóxer en sus tobillos. Ambos estábamos en horario laboral y si lo llamaban tenía que jalar. Luego me quitó el calzón y me subió el vestido.
Yo estaba de pie y de espaldas a él, se agachó y me chupó mi vulva y mi culo, yo puse mis brazos sobre la cama, quedé levemente en posición de 4 para ayudarle. Luego se levantó, me quitó el vestido, chupó mis pezones que estaban bien paraditos, me dio vuelta y me penetró. Los dos estábamos de pie, sin embargo a veces me apoyaba sobre mi cama. Me esbestía fuertemente.
Estuvo rico porque me abrazaba, me tocaba los pechos y mi clitoris, mientras me embestia. A veces me agarraba de las caderas o de mis hombros para poder penetrarme profundamente.
Desgraciadamente, me llamaron de la oficina, no quise contestar la primer llamada, pero siguieron insistiendo y contesté. Él paró para darme chance de terminar de hablar, sin embargo no la sacó, así que yo seguí moviendome, no sé eso me excitaba más, obvio tenía que evitar los gemidos y que mi voz no sonara agitada. Él continuó cogiendome pero más suave para que no sonara tanto.
Finalmente corté y volvió a cogerme muy duro, sonaba mucho. Yo no estaba sola en la casa, pero a mí no me importó ni le dije a él porque sé que hubiera evitado hacer bulla. Luego empecé a tocarme mi clítoris y los dos nos vinimos al mismo tiempo. Se regó dentro de mí. Fue rápido pero riquísimo.
Me fui a bañar, aproveché para depilarme, me eché perfume para oler rico y me puse un vestido y un cachetero de encaje. Al rato llegó, entramos al cuarto, hablamos un par de minutos mientras nos besabamos, yo le toqué el pene sobre la ropa y el mae estaba súper erecto. Yo deseaba sentarme encima de él, con mis piernas a su alrededor pero andaba con ropa formal y no iba a arrugarle todo.
Seguidamente, me empezó a tocar las nalgas por debajo del vestido, me tocó suavemente encima de mi calzón y poco a poco me fue metiendo sus dedos entre éste para acariciar mi vulva, obviamente ya estaba toda mojada. Le empecé a desabrochar la faja y el pantalón, mientras lo seguía besando.
Él se quitó la camisa, quedó en camiseta con su pantalón y bóxer en sus tobillos. Ambos estábamos en horario laboral y si lo llamaban tenía que jalar. Luego me quitó el calzón y me subió el vestido.
Yo estaba de pie y de espaldas a él, se agachó y me chupó mi vulva y mi culo, yo puse mis brazos sobre la cama, quedé levemente en posición de 4 para ayudarle. Luego se levantó, me quitó el vestido, chupó mis pezones que estaban bien paraditos, me dio vuelta y me penetró. Los dos estábamos de pie, sin embargo a veces me apoyaba sobre mi cama. Me esbestía fuertemente.
Estuvo rico porque me abrazaba, me tocaba los pechos y mi clitoris, mientras me embestia. A veces me agarraba de las caderas o de mis hombros para poder penetrarme profundamente.
Desgraciadamente, me llamaron de la oficina, no quise contestar la primer llamada, pero siguieron insistiendo y contesté. Él paró para darme chance de terminar de hablar, sin embargo no la sacó, así que yo seguí moviendome, no sé eso me excitaba más, obvio tenía que evitar los gemidos y que mi voz no sonara agitada. Él continuó cogiendome pero más suave para que no sonara tanto.
Finalmente corté y volvió a cogerme muy duro, sonaba mucho. Yo no estaba sola en la casa, pero a mí no me importó ni le dije a él porque sé que hubiera evitado hacer bulla. Luego empecé a tocarme mi clítoris y los dos nos vinimos al mismo tiempo. Se regó dentro de mí. Fue rápido pero riquísimo.