¡Ay, Dios mío, qué rollo! El Presidente Chaves le dio con todo y decreto ayer, cambiando la jugada del aborto terapéutico. Parece que quiere dejar claro cuál es su postura, y vaya que es clara: casi nada de margen para las mujeres.
La norma técnica que estaba vigente desde 2019, impulsada por el gobierno de Alvarado, permitía el aborto si la ‘salud’ de la paciente estaba en riesgo, usando la definición amplia de la OMS. Eso abría puertas a muchas situaciones, pero ahora, parece que quieren ponerle candado a todo. Con este nuevo decreto, la única opción es que la vida de la madre corra peligro real y evidente.
Vamos por partes, porque esto es un brete. Antes, si una mujer tenía problemas de salud graves, podía acceder al aborto terapéutico. Ahora, el único camino es demostrar que está a punto de morir. ¡Imagínate el proceso! Un papeleo eterno, evaluaciones médicas exhaustivas… Todo para asegurar que sí, la mamá está en peligro de muerte. Esto va a complicarle la vida a muchísimas mujeres, especialmente aquellas que viven en zonas rurales o que tienen menos acceso a servicios médicos de calidad.
El Presidente Chaves, como siempre, salió a dar su discurso, diciendo que cumplió una promesa de campaña. Pero vaya que se demoró, decía que los abogados le recomendaron esperar para ver si la Corte Interamericana de Derechos Humanos no les armaba otro lío. ¡Parece que todos andan buscando excusas para evitar tomar decisiones difíciles!
Y ahí radica el problema, mae. Porque aunque diga que actuó con “paciencia y prudencia”, muchos ven esto como una medida ideológica que atenta contra los derechos reproductivos de las mujeres. No es cuestión de estar a favor o en contra del aborto, sino de entender que existen situaciones complejas que requieren soluciones flexibles y humanas.
Muchos expertos ya han salido a criticar esta decisión, argumentando que restringir tanto el acceso al aborto terapéutico pone en riesgo la salud e incluso la vida de las mujeres. Dicen que podría haber complicaciones médicas graves, abortos clandestinos, y un aumento en la mortalidad materna. ¡Qué sal! Una situación terrible.
Pero no todo es negativo, por supuesto. Hay grupos conservadores que celebran esta medida, alegando que protegen la vida desde la concepción. Ellos ven esto como una victoria para sus principios religiosos y morales. Pero, ¿realmente están pensando en las consecuencias reales para las mujeres?
En fin, esta polémica promete dar mucho de qué hablar. Se avecinan debates acalorados, movilizaciones sociales, y seguramente alguna demanda judicial. ¡Esto está que arde! Entonces, dime, ¿crees que esta medida es necesaria para proteger la vida o limita injustamente los derechos de las mujeres costarricenses? ¡Déjanos tus opiniones en los comentarios, queremos saber qué piensas tú!
La norma técnica que estaba vigente desde 2019, impulsada por el gobierno de Alvarado, permitía el aborto si la ‘salud’ de la paciente estaba en riesgo, usando la definición amplia de la OMS. Eso abría puertas a muchas situaciones, pero ahora, parece que quieren ponerle candado a todo. Con este nuevo decreto, la única opción es que la vida de la madre corra peligro real y evidente.
Vamos por partes, porque esto es un brete. Antes, si una mujer tenía problemas de salud graves, podía acceder al aborto terapéutico. Ahora, el único camino es demostrar que está a punto de morir. ¡Imagínate el proceso! Un papeleo eterno, evaluaciones médicas exhaustivas… Todo para asegurar que sí, la mamá está en peligro de muerte. Esto va a complicarle la vida a muchísimas mujeres, especialmente aquellas que viven en zonas rurales o que tienen menos acceso a servicios médicos de calidad.
El Presidente Chaves, como siempre, salió a dar su discurso, diciendo que cumplió una promesa de campaña. Pero vaya que se demoró, decía que los abogados le recomendaron esperar para ver si la Corte Interamericana de Derechos Humanos no les armaba otro lío. ¡Parece que todos andan buscando excusas para evitar tomar decisiones difíciles!
Y ahí radica el problema, mae. Porque aunque diga que actuó con “paciencia y prudencia”, muchos ven esto como una medida ideológica que atenta contra los derechos reproductivos de las mujeres. No es cuestión de estar a favor o en contra del aborto, sino de entender que existen situaciones complejas que requieren soluciones flexibles y humanas.
Muchos expertos ya han salido a criticar esta decisión, argumentando que restringir tanto el acceso al aborto terapéutico pone en riesgo la salud e incluso la vida de las mujeres. Dicen que podría haber complicaciones médicas graves, abortos clandestinos, y un aumento en la mortalidad materna. ¡Qué sal! Una situación terrible.
Pero no todo es negativo, por supuesto. Hay grupos conservadores que celebran esta medida, alegando que protegen la vida desde la concepción. Ellos ven esto como una victoria para sus principios religiosos y morales. Pero, ¿realmente están pensando en las consecuencias reales para las mujeres?
En fin, esta polémica promete dar mucho de qué hablar. Se avecinan debates acalorados, movilizaciones sociales, y seguramente alguna demanda judicial. ¡Esto está que arde! Entonces, dime, ¿crees que esta medida es necesaria para proteger la vida o limita injustamente los derechos de las mujeres costarricenses? ¡Déjanos tus opiniones en los comentarios, queremos saber qué piensas tú!
