¡Ay, Dios mío! Aquí seguimos con el mismo rollo, chavos. El Presidente Rodrigo Chaves, fiel a su estilo directo – algunos dirían estridente – soltó una descarga tremenda durante la graduación del programa BEE en Puntarenas. No precisamente habló de los avances educativos o de las oportunidades laborales, no, señor. Lo que tocó fue la cuestión de su inmunidad levantada y mandó unas indirectas bien picantes a los magistrados y diputados que dieron luz verde a eso.
La ceremonia, que parecía destinada a celebrar el esfuerzo de los jóvenes graduados del Bachillerato para la Empleabilidad y el Emprendimiento, terminó siendo otro escenario donde el Presidente Chaves reafirma su postura confrontacional. En medio de discursos sobre superación personal y desarrollo profesional, no faltó la oportunidad de criticar duramente a aquellos que considera sus detractores políticos, calificándolos de querer impedir el progreso del país.
“Cada vez que se tomaron vacaciones o pidieron permiso en sus trabajos para estudiar, hicieron patria,” recalcó Chaves con énfasis. Esa frase, creo yo, resume bastante bien la visión del Presidente: el verdadero patriotas son los que se esfuerzan día a día, no los que se dedican a perseguir causas políticas. De hecho, llegó a decir que nadie más que ellos había impulsado este logro, lo cual, bueno, ahí queda la miel sobre labios para unos y espinas clavadas para otros.
Y claro, no podía faltar la metáfora del “garbancito”. Ya saben, su famoso término despectivo para referirse a sus opositores. Con esa analogía, aseguró que ahora el futuro de Costa Rica está en las manos del “pueblo trabajador” y no de esos supuestos sabios que intentan frenar el avance de la nación. Ese tono combativo es característico de él, y aunque algunos lo ven como una muestra de fortaleza, otros lo consideran poco presidencial.
Pero vamos, dejando a un lado el fervor político, hay que reconocer que el programa BEE ha sido una iniciativa importante para brindar alternativas a jóvenes que quizás no tienen acceso a la educación superior tradicional. Ofrece habilidades prácticas y herramientas para emprender, y eso, definitivamente, es positivo para el país. Aunque, a veces, me pregunto si toda esta controversia alrededor de la figura del Presidente no opaca un poco los logros reales.
Chaves también aprovechó la ocasión para destacar que el título obtenido por los graduandos no es solo un papel bonito, sino una llave para abrir puertas al empleo digno y al emprendimiento. Dijo que representa un paso hacia un país más educado y menos dependiente de los “poderosos”, lo cual suena muy bien en teoría, pero en la práctica, siempre hay obstáculos que superar. Uno nunca sabe qué tan fácil será encontrar trabajo decente con ese título, ¿verdad?
La verdad, todo esto me da la impresión de que estamos viendo un juego de ajedrez político a gran escala. Movimientos estratégicos, ataques verbales y jugadas maestras para mantenerse en el poder. Pero mientras tanto, la gente común sigue tratando de sobrevivir, buscando oportunidades para salir adelante y construir un futuro mejor para sus familias. Y ahí radica la verdadera batalla, ¿no creen?
Con todo esto, me pregunto: ¿Hasta dónde llegará esta polarización política en Costa Rica? ¿Lograremos trascender las diferencias ideológicas para trabajar juntos en beneficio del país, o seguiremos atrapados en este ciclo de acusaciones y enfrentamientos? ¡Díganme qué piensan en el foro!
La ceremonia, que parecía destinada a celebrar el esfuerzo de los jóvenes graduados del Bachillerato para la Empleabilidad y el Emprendimiento, terminó siendo otro escenario donde el Presidente Chaves reafirma su postura confrontacional. En medio de discursos sobre superación personal y desarrollo profesional, no faltó la oportunidad de criticar duramente a aquellos que considera sus detractores políticos, calificándolos de querer impedir el progreso del país.
“Cada vez que se tomaron vacaciones o pidieron permiso en sus trabajos para estudiar, hicieron patria,” recalcó Chaves con énfasis. Esa frase, creo yo, resume bastante bien la visión del Presidente: el verdadero patriotas son los que se esfuerzan día a día, no los que se dedican a perseguir causas políticas. De hecho, llegó a decir que nadie más que ellos había impulsado este logro, lo cual, bueno, ahí queda la miel sobre labios para unos y espinas clavadas para otros.
Y claro, no podía faltar la metáfora del “garbancito”. Ya saben, su famoso término despectivo para referirse a sus opositores. Con esa analogía, aseguró que ahora el futuro de Costa Rica está en las manos del “pueblo trabajador” y no de esos supuestos sabios que intentan frenar el avance de la nación. Ese tono combativo es característico de él, y aunque algunos lo ven como una muestra de fortaleza, otros lo consideran poco presidencial.
Pero vamos, dejando a un lado el fervor político, hay que reconocer que el programa BEE ha sido una iniciativa importante para brindar alternativas a jóvenes que quizás no tienen acceso a la educación superior tradicional. Ofrece habilidades prácticas y herramientas para emprender, y eso, definitivamente, es positivo para el país. Aunque, a veces, me pregunto si toda esta controversia alrededor de la figura del Presidente no opaca un poco los logros reales.
Chaves también aprovechó la ocasión para destacar que el título obtenido por los graduandos no es solo un papel bonito, sino una llave para abrir puertas al empleo digno y al emprendimiento. Dijo que representa un paso hacia un país más educado y menos dependiente de los “poderosos”, lo cual suena muy bien en teoría, pero en la práctica, siempre hay obstáculos que superar. Uno nunca sabe qué tan fácil será encontrar trabajo decente con ese título, ¿verdad?
La verdad, todo esto me da la impresión de que estamos viendo un juego de ajedrez político a gran escala. Movimientos estratégicos, ataques verbales y jugadas maestras para mantenerse en el poder. Pero mientras tanto, la gente común sigue tratando de sobrevivir, buscando oportunidades para salir adelante y construir un futuro mejor para sus familias. Y ahí radica la verdadera batalla, ¿no creen?
Con todo esto, me pregunto: ¿Hasta dónde llegará esta polarización política en Costa Rica? ¿Lograremos trascender las diferencias ideológicas para trabajar juntos en beneficio del país, o seguiremos atrapados en este ciclo de acusaciones y enfrentamientos? ¡Díganme qué piensan en el foro!