Es triste que personas con cualidades especiales estén en la calle por haber dado un mal paso en su vida.
Hace unos 15 años tal vez, yo iba de la escuela para mi casa con un primo y recuerdo que en una parada de buses nos topamos con un indigente de unos 60 años que nos pidió dinero.
Nosotros le dimos la plata y como chiquillos que éramos y que no sabíamos los peligros que corríamos nos quedamos hablando con él un rato, lo que nos sorprendió fue lo culto que era ese señor, conocía un montón de cosas de todo, geografía mundial, historia, etc. Nadie se imaginaría por sus fachas que una persona de esas conociera tanto.
Al final nos contó que fue profesor en una universidad estatal por varios años y que debido al licor llegó a caer en el abismo.
Así como él hay muchos más, que por una adicción estúpida terminaron en el fondo, que desgraciadamente no tuvieron la suerte de Ted Williams y murieron solos y en el olvido.