¡Ay, Dios mío! Después de años de espera y unos cuantos baches en el camino, parece que al fin vamos a poder disfrutar del Cine Variedades como se debe. Esta joya arquitectónica del centro de San José, que dejó de brillar hace mucho tiempo, está recibiendo una restauración a toda máquina que promete devolverle el glamour de antaño. Ya me imagino los jóvenes sacándose selfies frente a la fachada recién pintada; ¡qué chiva!
Para los que no estén enterados, el Cine Variedades tiene una historia larguísima. Fue inaugurado allá por 1890, época en la que San José era un pueblito con pretensiones. Imagínense las películas mudas, la gente vestida elegante… ¡Un brete! Ha sido escenario de muchísimas cosas a lo largo de los años, desde estrenos cinematográficos hasta espectáculos de variedades, como dice su nombre. Pero, como tantas otras cosas bonitas, cayó en desgracia y terminó abandonado, sufriendo el desgaste del tiempo y algunas vandalias, qué sal.
Ahora, gracias a una inversión considerable –más de 275 millones de colones en estas primeras etapas–, el Variedades está resurgiendo de entre las ruinas. Han terminado las dos primeras fases de la restauración, enfocándose principalmente en la recuperación de la fachada. El Ministro de Cultura y Juventud, Don Jorge Rodríguez, anda contento porque asegura que el proyecto va viento en popa. Se habla incluso de que la inversión final, incluyendo la renovación del interior y los equipos, podría superar mil trescientos millones de colones. ¡Una vara tremenda!
Pero ojo, esto no es solo pintar paredes. Se busca recuperar el espíritu original del lugar, respetando la arquitectura histórica pero adaptándolo a las necesidades actuales. El Centro de Cine estará a cargo de la gestión del espacio, así que podemos esperar ver conciertos de artistas nacionales, ciclos de cine independiente y actividades culturales variopintas. El objetivo, según el Ministro, es “empoderar al sector cultural” y convertir el Variedades en un punto de encuentro para creadores y público. Suena bien, ¿verdad?
Y hablando de futuro, también hay planes para modernizar el equipamiento técnico, instalando sistemas de sonido e iluminación de última generación. Esto permitirá ofrecer experiencias audiovisuales de alta calidad, atrayendo tanto a productores como a espectadores. Además, quieren hacer énfasis en la accesibilidad, garantizando que personas con discapacidad puedan disfrutar plenamente del espacio. ¡Eso sí que es progresista!
El Ministro Rodríguez no dudó en recalcar la importancia de cuidar este patrimonio nacional. Con justa razón advirtió que, tras tantos esfuerzos y recursos invertidos, sería lamentable que el Variedades volviera a ser víctima de actos vandálicos. Dijo textualmente: “Hacemos un llamado a la protección de nuestro patrimonio, para evitar que nuevamente sea vandalizado, es de todos y debemos cuidarlo.” Totalmente cierto, maes. Hay que estar pendientes y denunciar cualquier irregularidad.
Personalmente, me emociona mucho que se esté rescatando este ícono de la cultura costarricense. Recuerdo haber ido al Variedades de niño, aunque ya estaba bastante deteriorado. Era un lugar mágico, lleno de historias y recuerdos. Verlo revivir es como si se despertara un pedazo de nuestra identidad. Aunque algunos dicen que la cultura no da para comer, yo creo que es fundamental para construir una sociedad más rica y desarrollada. Y el Variedades, sin duda alguna, será un motor importante para impulsar la creatividad y el talento local. Ya quiero ir a ver una película a ese lugar, a darle con todo!
Con todo este entusiasmo, me pregunto: ¿Cómo crees tú que el resurgimiento del Cine Variedades impactará en la escena cultural de San José y en la valoración de nuestro patrimonio histórico? ¡Déjanos tus opiniones en el foro!
Para los que no estén enterados, el Cine Variedades tiene una historia larguísima. Fue inaugurado allá por 1890, época en la que San José era un pueblito con pretensiones. Imagínense las películas mudas, la gente vestida elegante… ¡Un brete! Ha sido escenario de muchísimas cosas a lo largo de los años, desde estrenos cinematográficos hasta espectáculos de variedades, como dice su nombre. Pero, como tantas otras cosas bonitas, cayó en desgracia y terminó abandonado, sufriendo el desgaste del tiempo y algunas vandalias, qué sal.
Ahora, gracias a una inversión considerable –más de 275 millones de colones en estas primeras etapas–, el Variedades está resurgiendo de entre las ruinas. Han terminado las dos primeras fases de la restauración, enfocándose principalmente en la recuperación de la fachada. El Ministro de Cultura y Juventud, Don Jorge Rodríguez, anda contento porque asegura que el proyecto va viento en popa. Se habla incluso de que la inversión final, incluyendo la renovación del interior y los equipos, podría superar mil trescientos millones de colones. ¡Una vara tremenda!
Pero ojo, esto no es solo pintar paredes. Se busca recuperar el espíritu original del lugar, respetando la arquitectura histórica pero adaptándolo a las necesidades actuales. El Centro de Cine estará a cargo de la gestión del espacio, así que podemos esperar ver conciertos de artistas nacionales, ciclos de cine independiente y actividades culturales variopintas. El objetivo, según el Ministro, es “empoderar al sector cultural” y convertir el Variedades en un punto de encuentro para creadores y público. Suena bien, ¿verdad?
Y hablando de futuro, también hay planes para modernizar el equipamiento técnico, instalando sistemas de sonido e iluminación de última generación. Esto permitirá ofrecer experiencias audiovisuales de alta calidad, atrayendo tanto a productores como a espectadores. Además, quieren hacer énfasis en la accesibilidad, garantizando que personas con discapacidad puedan disfrutar plenamente del espacio. ¡Eso sí que es progresista!
El Ministro Rodríguez no dudó en recalcar la importancia de cuidar este patrimonio nacional. Con justa razón advirtió que, tras tantos esfuerzos y recursos invertidos, sería lamentable que el Variedades volviera a ser víctima de actos vandálicos. Dijo textualmente: “Hacemos un llamado a la protección de nuestro patrimonio, para evitar que nuevamente sea vandalizado, es de todos y debemos cuidarlo.” Totalmente cierto, maes. Hay que estar pendientes y denunciar cualquier irregularidad.
Personalmente, me emociona mucho que se esté rescatando este ícono de la cultura costarricense. Recuerdo haber ido al Variedades de niño, aunque ya estaba bastante deteriorado. Era un lugar mágico, lleno de historias y recuerdos. Verlo revivir es como si se despertara un pedazo de nuestra identidad. Aunque algunos dicen que la cultura no da para comer, yo creo que es fundamental para construir una sociedad más rica y desarrollada. Y el Variedades, sin duda alguna, será un motor importante para impulsar la creatividad y el talento local. Ya quiero ir a ver una película a ese lugar, a darle con todo!
Con todo este entusiasmo, me pregunto: ¿Cómo crees tú que el resurgimiento del Cine Variedades impactará en la escena cultural de San José y en la valoración de nuestro patrimonio histórico? ¡Déjanos tus opiniones en el foro!