Y entonces mientras se la metia y se la sacaba, lo cierto es que ella apretaba el nance lo más rico cada vez que la metia, al contrario de las inexpertas que lo hacen cuando uno la va sacando y la expulsan, por lo que se sentia de lo más rico.
Me vine de lo mas sabroso y baje, me pegue unos mordisquitos en las nalguitas y le acomode el cachetero de nuevo, yo estaba un poco sudado, por lo que ella se volvio y cogio unas toallitas de papel y me limpio la frente y me dijo, "ahora que ya paso esto espero tu discreción y que no dejes la iglesia, le haces muy bien a todos por acá...", yo la volvi a ver y le dije claro pastora y le pegue una apretada y tras unos segundos me dio una cachetada, me dijo comportate que ya va a terminar el sermon, regresa a tu silla y que se te note que eres un hijo de Jesucristo, frente en alto.
Y como niño hice caso volvi a mi silla y al pastor le quedaban como 10 minutos de sermon, ese día cuando finalizo me levante y le aplaudí como nunca le había aplaudido, definitivamente un varon de Dios...
Ya entonces todos se comenzaron a retirar, el pastor y la pastora en la salida comenzaban a despedirse de todos cuando entonces yo...
