¡Ay, Dios mío, qué pena! El clima nos anda jugando sucio otra vez. El Instituto Meteorológico Nacional (IMN) acaba de lanzar la alerta: el empuje frío número cinco ya está haciendo de las suyas y promete sacudirnos un buen bocado durante los próximos días. Prepárense, porque no pinta nada tranquilo, especialmente para quienes viven en zonas costeras y montañosas.
Según el IMN, este empuje frío intensificará los vientos alisios, esos vientos que normalmente sentimos como una brisa fresca, pero ahora vienen con ganas de arrancar techos. Las ráfagas podrían alcanzar velocidades de hasta 80 kilómetros por hora en el norte de Guanacaste y las zonas altas. ¡Imagínense eso! Un viento capaz de levantar un carro si le da la gana. Mejor asegurar bien las cosas, máes.
El Valle Central y el Pacífico Norte tampoco se salvarán de estos fuertes vientos, con rachas estimadas entre 30 y 50 km/h. Aunque no sean tan extremos como en Guanacaste, sí serán suficientes para incomodar y posiblemente causar algunos inconvenientes. Y ojo, señoras y señores, porque esto no es todo, todavía queda más… la Vara va a estar dura, amigos.
Si pensaban salir a disfrutar del sol en la playa, piénsenlo dos veces. En el Pacífico Sur, aunque el cielo esté nublado, podría haber chubascos aislados en las tardes. Pero la verdadera preocupación está en la Vertiente del Caribe, donde se esperan lluvias intermitentes durante todo el día. No digo que llueva a cántaros, pero sí prepárense para mojar las uvas, como dicen por acá. Ese brete del clima está poniendo a todos nerviosos.
Cartago y las montañas al norte del Valle Central también están en la mira de las lloviznas y las lluvias ligeras. Así que, si tienen planes de visitar esas zonas, lleven paraguas o impermeables. No queremos que nadie termine agarrado de la chinchorro buscando refugio bajo un árbol, ¿verdad? Además, con tanta humedad, mejor evitar cambios bruscos de temperatura para no resfriarse y pasarla mal.
Las autoridades recomiendan tomar precauciones, especialmente si viven cerca de ríos o quebradas, pues las lluvias pueden provocar inundaciones repentinas. Aseguren sus pertenencias, eviten circular por zonas de riesgo y manténganse informados sobre la evolución del clima. La prudencia nunca está de más, sobre todo cuando la naturaleza decide mostrar su lado más recio. Este tipo de situaciones nos recuerdan lo vulnerable que somos ante los fenómenos naturales y la importancia de prepararnos adecuadamente.
Por supuesto, esto afecta al turismo, un pilar importante de nuestra economía. Muchos visitantes planean actividades al aire libre, y tener que cancelar planes por el mal tiempo puede generar pérdidas económicas para hoteles, restaurantes y operadores turísticos. Esperemos que la situación mejore pronto para poder recuperar la calma y seguir disfrutando de nuestras bellezas naturales... aunque con cuidado, claro está. Que no se vayan al traste las vacaciones de nadie, diay!
En fin, parece que tendremos unos días movidos. Ahora les dejo una pregunta para pensar: ¿Cuál ha sido la peor experiencia que han tenido debido a un fenómeno climático extremo en Costa Rica? ¿Qué medidas creen que debemos tomar como país para estar mejor preparados frente a estos eventos cada vez más frecuentes?
Según el IMN, este empuje frío intensificará los vientos alisios, esos vientos que normalmente sentimos como una brisa fresca, pero ahora vienen con ganas de arrancar techos. Las ráfagas podrían alcanzar velocidades de hasta 80 kilómetros por hora en el norte de Guanacaste y las zonas altas. ¡Imagínense eso! Un viento capaz de levantar un carro si le da la gana. Mejor asegurar bien las cosas, máes.
El Valle Central y el Pacífico Norte tampoco se salvarán de estos fuertes vientos, con rachas estimadas entre 30 y 50 km/h. Aunque no sean tan extremos como en Guanacaste, sí serán suficientes para incomodar y posiblemente causar algunos inconvenientes. Y ojo, señoras y señores, porque esto no es todo, todavía queda más… la Vara va a estar dura, amigos.
Si pensaban salir a disfrutar del sol en la playa, piénsenlo dos veces. En el Pacífico Sur, aunque el cielo esté nublado, podría haber chubascos aislados en las tardes. Pero la verdadera preocupación está en la Vertiente del Caribe, donde se esperan lluvias intermitentes durante todo el día. No digo que llueva a cántaros, pero sí prepárense para mojar las uvas, como dicen por acá. Ese brete del clima está poniendo a todos nerviosos.
Cartago y las montañas al norte del Valle Central también están en la mira de las lloviznas y las lluvias ligeras. Así que, si tienen planes de visitar esas zonas, lleven paraguas o impermeables. No queremos que nadie termine agarrado de la chinchorro buscando refugio bajo un árbol, ¿verdad? Además, con tanta humedad, mejor evitar cambios bruscos de temperatura para no resfriarse y pasarla mal.
Las autoridades recomiendan tomar precauciones, especialmente si viven cerca de ríos o quebradas, pues las lluvias pueden provocar inundaciones repentinas. Aseguren sus pertenencias, eviten circular por zonas de riesgo y manténganse informados sobre la evolución del clima. La prudencia nunca está de más, sobre todo cuando la naturaleza decide mostrar su lado más recio. Este tipo de situaciones nos recuerdan lo vulnerable que somos ante los fenómenos naturales y la importancia de prepararnos adecuadamente.
Por supuesto, esto afecta al turismo, un pilar importante de nuestra economía. Muchos visitantes planean actividades al aire libre, y tener que cancelar planes por el mal tiempo puede generar pérdidas económicas para hoteles, restaurantes y operadores turísticos. Esperemos que la situación mejore pronto para poder recuperar la calma y seguir disfrutando de nuestras bellezas naturales... aunque con cuidado, claro está. Que no se vayan al traste las vacaciones de nadie, diay!
En fin, parece que tendremos unos días movidos. Ahora les dejo una pregunta para pensar: ¿Cuál ha sido la peor experiencia que han tenido debido a un fenómeno climático extremo en Costa Rica? ¿Qué medidas creen que debemos tomar como país para estar mejor preparados frente a estos eventos cada vez más frecuentes?
