Ay, mae, después de años de sudor frío, bocinas y paciencia que parecía café aguado, parece que la luz al final del túnel de Hatillos sí existe. El Ministerio de Obras Públicas y Transportes (MOPT), pa' darle soda al asunto, ya nos soltó la bomba: los trabajos que prometían hacer desaparecer los semáforos del anillo de Circunvalación van viento en popa. No vaya a ser que nos anden tomando el pelo como siempre, pero esta vez hay señales concretas de que podríamos ver la diferencia.
Como bien saben los que tenemos que enfrentar diariamente ese brete, la construcción de la Circunvalación ha sido una torta monumental. Desde el inicio, entre retrasos, cambios de planes y problemas económicos, pareciera que el proyecto iba camino a irse al traste. Pero bueno, gracias a Dios, ahora estamos viendo resultados tangibles, especialmente después de que abrieron el tramo norte en octubre del año pasado. Eso le dio un poquito de aire al tráfico, pero aún quedaban secciones críticas pendientes.
Actualmente, el personal del MOPT y el Consejo Nacional de Vialidad (Conavi) están poniendo toda la carne al asador en el sector sur. Se han enfocado en dos puntos clave, esos que más nos desesperan: la intersección de Hatillo 6 y el paso elevado que va a conectar Hatillo 8 con Hatillo 7. Imagínate, mae, poder pasar por ahí sin tener que frenar en cada semáforo… ¡eso sería qué chiva!
Según Pablo Camacho, el viceministro de Infraestructura del MOPT, las cosas andan avanzando diferente en cada frente. En uno de los lados, ya llevan un 42% de avance, mientras que en el otro, ¡han llegado al 80%! Eso, pa’ entenderse, significa que están bastante cerca de cumplir con lo que prometieron. “En febrero, esperamos poner en marcha el 100 por ciento de las obras de Hatillos 7-8”, declaró Camacho a Grupo Extra. Y añadió: “Para Hatillo, seguimos dando batalla, y queremos habilitar el tronco principal también para febrero”.
Aunque Camacho enfatizó que la inauguración inicial será parcial, dejó claro que el impacto en nuestra movilidad diaria será inmediato. Podremos rodar por la Circunvalación de forma continua, sin esas paradas molestas en los semáforos. Ay, mae, recemos porque así sea, porque eso significaría un respiro enorme para todos los que vamos rumbo al trabajo o regresamos a casa después de un día largo. Menos estrés y más tiempo para disfrutar del viaje, o al menos eso esperamos.
Pero la cosa no termina ahí. Además de estas mejoras en Hatillos, el Conavi también está trabajando en el puente del río María Aguilar, en la famosa “Y Griega”. Esta es una obra importante dentro del Programa de Emergencia para la Reconstrucción Integral y Resiliente de Infraestructura (Proeri). Según Camacho, ya terminaron la primera fase, que se realiza en etapas de tres meses, con cuatro fases en total. Para minimizar las molestias, mantienen dos carriles abiertos en cada dirección.
La inversión total para estas tres intervenciones asciende a casi 15 millones de dólares, lo que equivale a unos 7.467 millones de colones. Una suma considerable, sin duda, pero que si se invierte bien, podría transformar la movilidad en el Gran Área Metropolitana. El MOPT espera que todas estas obras estén completas para julio de 2026. Sería un alivio tremendo, aunque sabemos que todavía habrá obras complementarias y marginales que se harán después. Por ahora, celebremos estos avances, pues hemos esperado demasiado por esto.
Con todo este panorama, parece que finalmente podríamos estar viendo el fin de los peores dolores de cabeza de Hatillos. Por supuesto, siempre queda la duda de si realmente cumplirán con los plazos y si la calidad de la obra será la adecuada. Pero por ahora, vamos a mantener la esperanza y celebrar cada pequeño paso hacia un futuro con menos tráfico y menos estrés. Ahora te pregunto, considerando los históricos retrasos en proyectos similares, ¿crees que el MOPT logrará entregar estas obras en las fechas prometidas, o deberíamos prepararnos para otra ola de frustraciones?
Como bien saben los que tenemos que enfrentar diariamente ese brete, la construcción de la Circunvalación ha sido una torta monumental. Desde el inicio, entre retrasos, cambios de planes y problemas económicos, pareciera que el proyecto iba camino a irse al traste. Pero bueno, gracias a Dios, ahora estamos viendo resultados tangibles, especialmente después de que abrieron el tramo norte en octubre del año pasado. Eso le dio un poquito de aire al tráfico, pero aún quedaban secciones críticas pendientes.
Actualmente, el personal del MOPT y el Consejo Nacional de Vialidad (Conavi) están poniendo toda la carne al asador en el sector sur. Se han enfocado en dos puntos clave, esos que más nos desesperan: la intersección de Hatillo 6 y el paso elevado que va a conectar Hatillo 8 con Hatillo 7. Imagínate, mae, poder pasar por ahí sin tener que frenar en cada semáforo… ¡eso sería qué chiva!
Según Pablo Camacho, el viceministro de Infraestructura del MOPT, las cosas andan avanzando diferente en cada frente. En uno de los lados, ya llevan un 42% de avance, mientras que en el otro, ¡han llegado al 80%! Eso, pa’ entenderse, significa que están bastante cerca de cumplir con lo que prometieron. “En febrero, esperamos poner en marcha el 100 por ciento de las obras de Hatillos 7-8”, declaró Camacho a Grupo Extra. Y añadió: “Para Hatillo, seguimos dando batalla, y queremos habilitar el tronco principal también para febrero”.
Aunque Camacho enfatizó que la inauguración inicial será parcial, dejó claro que el impacto en nuestra movilidad diaria será inmediato. Podremos rodar por la Circunvalación de forma continua, sin esas paradas molestas en los semáforos. Ay, mae, recemos porque así sea, porque eso significaría un respiro enorme para todos los que vamos rumbo al trabajo o regresamos a casa después de un día largo. Menos estrés y más tiempo para disfrutar del viaje, o al menos eso esperamos.
Pero la cosa no termina ahí. Además de estas mejoras en Hatillos, el Conavi también está trabajando en el puente del río María Aguilar, en la famosa “Y Griega”. Esta es una obra importante dentro del Programa de Emergencia para la Reconstrucción Integral y Resiliente de Infraestructura (Proeri). Según Camacho, ya terminaron la primera fase, que se realiza en etapas de tres meses, con cuatro fases en total. Para minimizar las molestias, mantienen dos carriles abiertos en cada dirección.
La inversión total para estas tres intervenciones asciende a casi 15 millones de dólares, lo que equivale a unos 7.467 millones de colones. Una suma considerable, sin duda, pero que si se invierte bien, podría transformar la movilidad en el Gran Área Metropolitana. El MOPT espera que todas estas obras estén completas para julio de 2026. Sería un alivio tremendo, aunque sabemos que todavía habrá obras complementarias y marginales que se harán después. Por ahora, celebremos estos avances, pues hemos esperado demasiado por esto.
Con todo este panorama, parece que finalmente podríamos estar viendo el fin de los peores dolores de cabeza de Hatillos. Por supuesto, siempre queda la duda de si realmente cumplirán con los plazos y si la calidad de la obra será la adecuada. Pero por ahora, vamos a mantener la esperanza y celebrar cada pequeño paso hacia un futuro con menos tráfico y menos estrés. Ahora te pregunto, considerando los históricos retrasos en proyectos similares, ¿crees que el MOPT logrará entregar estas obras en las fechas prometidas, o deberíamos prepararnos para otra ola de frustraciones?
