¡Ay, Dios mío, qué bronca! Parece que el negocio hotelero en Costa Rica va caminando sobre cáscaras de huevo. La Cámara Costarricense de Hoteles (CCH) soltó la bomba ayer, diciendo que estamos perdiendo terreno rapidito frente a otros países turísticos porque el tipo de cambio está más bajo que mi sueldo de estudiante. Ya saben, esos dólares valiendo menos que el pan duro.
La CCH le echa eco a Canatur, quienes ya llevaban tiempo advirtiendo sobre esto, así que parece que el mensaje sí llegó, aunque un poquito tarde. Flora Ayub, la jefa de la CCH, nos explicó que no es solo el tipo de cambio, sino una combinación de cosas que nos tienen pegados en el brete. Digamos que estamos recibiendo una patada en cada esquina.
“Estamos hablando del valor del colón, claro, pero también de cómo han subido los costos de todo: electricidad, agua, hasta el arroz para el desayuno de los turistas. Y ni hablar de la seguridad… ahí sí tenemos un problema serio. La gente no quiere venir si piensa que van a terminar con la cartera cortada o peor,” nos dijo Ayub con cara de pocos amigos. Con razón, ¡qué carga!
Y no es solamente eso, señores. Las alertas de viaje que andan dando algunos países extranjeros tampoco ayudan, ¿eh? Eso espanta a los turistas como si les hubieran puesto chile en la comida. Imagínate, te estás preparando para unas vacaciones soñadas y de repente te dicen ‘mejor no vayas, allá hay peligro’. ¡Un diay!
Además, seguimos arrastrando problemas de infraestructura. Rutas llenas de baches que dan miedo, proyectos inconclusos que parecen no tener fecha de término... Un turista que viene a disfrutar de la naturaleza no quiere pasarme horas sacudido en un bus como si estuviera en un terremoto. Necesitamos mejorar estas cosas YA, por favor. Porque si no, nos vamos al traste.
Para ponerle un poco de contexto numérico, el promedio ponderado del dólar bajó a ¢488,06 este jueves. Aunque suena bonito en papel, los hoteleros aseguran que esto no compensa el alza en los precios de los servicios y las cargas sociales que enfrentan. De hecho, muchos pequeños negocios están viendo sus ganancias reducirse a tal punto que están pensando en cerrar las puertas. ¡Qué torta!
El sector hotelero, como bien sabemos, es vital para muchísimas comunidades. No solo da empleos, sino que impulsa otros negocios locales: restaurantes, tiendas de artesanías, transporte... Si el turismo se hunde, toda la economía se resiente. Estamos hablando de familias enteras que dependen de este ingreso para sobrevivir. Así que esto no es un juego, es cuestión de vida o muerte para muchos.
En fin, la situación pinta complicada, pero aún hay esperanza. Lo importante es que los responsables tomen cartas en el asunto y empiecen a trabajar en soluciones urgentes. Pero me pregunto, ¿creen ustedes que el gobierno está haciendo lo suficiente para apoyar al sector turístico y asegurar que Costa Rica siga siendo un destino atractivo para los viajeros? Dejen sus opiniones en el foro, ¡queremos saber qué piensan!
La CCH le echa eco a Canatur, quienes ya llevaban tiempo advirtiendo sobre esto, así que parece que el mensaje sí llegó, aunque un poquito tarde. Flora Ayub, la jefa de la CCH, nos explicó que no es solo el tipo de cambio, sino una combinación de cosas que nos tienen pegados en el brete. Digamos que estamos recibiendo una patada en cada esquina.
“Estamos hablando del valor del colón, claro, pero también de cómo han subido los costos de todo: electricidad, agua, hasta el arroz para el desayuno de los turistas. Y ni hablar de la seguridad… ahí sí tenemos un problema serio. La gente no quiere venir si piensa que van a terminar con la cartera cortada o peor,” nos dijo Ayub con cara de pocos amigos. Con razón, ¡qué carga!
Y no es solamente eso, señores. Las alertas de viaje que andan dando algunos países extranjeros tampoco ayudan, ¿eh? Eso espanta a los turistas como si les hubieran puesto chile en la comida. Imagínate, te estás preparando para unas vacaciones soñadas y de repente te dicen ‘mejor no vayas, allá hay peligro’. ¡Un diay!
Además, seguimos arrastrando problemas de infraestructura. Rutas llenas de baches que dan miedo, proyectos inconclusos que parecen no tener fecha de término... Un turista que viene a disfrutar de la naturaleza no quiere pasarme horas sacudido en un bus como si estuviera en un terremoto. Necesitamos mejorar estas cosas YA, por favor. Porque si no, nos vamos al traste.
Para ponerle un poco de contexto numérico, el promedio ponderado del dólar bajó a ¢488,06 este jueves. Aunque suena bonito en papel, los hoteleros aseguran que esto no compensa el alza en los precios de los servicios y las cargas sociales que enfrentan. De hecho, muchos pequeños negocios están viendo sus ganancias reducirse a tal punto que están pensando en cerrar las puertas. ¡Qué torta!
El sector hotelero, como bien sabemos, es vital para muchísimas comunidades. No solo da empleos, sino que impulsa otros negocios locales: restaurantes, tiendas de artesanías, transporte... Si el turismo se hunde, toda la economía se resiente. Estamos hablando de familias enteras que dependen de este ingreso para sobrevivir. Así que esto no es un juego, es cuestión de vida o muerte para muchos.
En fin, la situación pinta complicada, pero aún hay esperanza. Lo importante es que los responsables tomen cartas en el asunto y empiecen a trabajar en soluciones urgentes. Pero me pregunto, ¿creen ustedes que el gobierno está haciendo lo suficiente para apoyar al sector turístico y asegurar que Costa Rica siga siendo un destino atractivo para los viajeros? Dejen sus opiniones en el foro, ¡queremos saber qué piensan!