¡Ay, Dios mío! Pues parece que el asunto del 5G en Costa Rica va a tomarle más tiempo del esperado. El ICE, esos chinos, tuvieron que posponer el cierre de la licitación pública para desarrollar la red, ¡qué lata! Después de tanto preámbulo y esperando a ver qué proveedor iba a dar la vuelta a la manzana, terminamos con otra fecha reprogramada. Ahora, los interesados tienen hasta el 7 de octubre para mandar sus propuestas, toda una eternidad para unos negocios así.
Como si fuera cuento, resulta que la Contraloría General de la República, esos que siempre andan buscando hombreras, le metió hielo al asunto con seis objeciones al pliego de condiciones. Según ellos, había cositas que no cuadraban, como plazos poco claros y cláusulas raras sobre protección contra ataques cibernéticos. ¡Un brete lo que quieren analizar! Uno esperaría que entiendan de tecnología, pero bueno, ahí está la plata y siempre hay alguien mirando por encima del hombro.
Las empresas, claro, no tardaron en poner el lloro. Decían que el plazo era demasiado corto para preparar unas ofertas decentes, especialmente teniendo en cuenta todas esas exigencias técnicas. Así que, entre quejas y súplicas, lograron convencer al ICE de ampliar el período. ¡Menos mal que el ICE se puso medio macizo y les hizo caso! Al final, Huawei, AFN Global y ONE Way fueron quienes vieron sus alegatos atendidos parcialmente, mientras que otras, como Sisap, Ericsson y Coasin, quedaron con cara de limón.
Y ni hablar del tecnicismo, ¿eh? Hablan de escenarios LTE, LTE + NR y NR... ¡Me mareo yo! Parece que están hablando en chino, aunque algunos de los proveedores sean precisamente de China. Entre regulación de estándares de ciberseguridad e independencia de partidas, uno se queda pensando si esto realmente beneficia al consumidor tico o solo llena los bolsillos de unos cuantos allegados. ¡Qué vara!
Según el comunicado de la Contraloría, los señalamientos de las empresas no tenían “sustento” o su discusión no era “válida en este momento”. Eso suena a echarle la culpa a cualquiera para evitar admitir un error. Pero bueno, dicen que ya la pelota está en el tejado del ICE, que ahora ellos deben seguir adelante con el proceso sin interferencia de la Contraloría. ¡Más responsabilidad para ellos!
Esto nos deja pensando en cómo va a afectar este retraso al desarrollo del país. El 5G es crucial para impulsar la innovación, mejorar la conectividad y facilitar el acceso a servicios digitales. Pero si seguimos arrastrando los pies con estas idas y vueltas burocráticas, vamos a quedar rezagados frente a otros países de la región. ¡Parece un capítulo de novela!
Muchos se preguntan si el problema radica en la falta de transparencia en el proceso de licitación, o si simplemente hay intereses creados detrás de la oposición a ciertas empresas. Algunos murmuran que hay presiones externas influyendo en las decisiones, pero eso ya es harina de otro molino. Lo cierto es que la ciudadanía merece saber quién está manejando las riendas de este importante proyecto y cuáles son los verdaderos motivos detrás de este freno constante. ¡Una pena tener que lidiar con tanta maraña!
En fin, parece que la historia del 5G en Costa Rica seguirá dando tela para cortar por un buen rato. Con tantas trabas y demoras, uno ya no sabe cuándo finalmente tendremos internet ultrarrápido en todos lados. ¿Ustedes creen que este nuevo plazo servirá para agilizar el proceso o seguiremos viendo más contratiempos en el camino? ¡Déjenme sus opiniones en los comentarios, maes!
Como si fuera cuento, resulta que la Contraloría General de la República, esos que siempre andan buscando hombreras, le metió hielo al asunto con seis objeciones al pliego de condiciones. Según ellos, había cositas que no cuadraban, como plazos poco claros y cláusulas raras sobre protección contra ataques cibernéticos. ¡Un brete lo que quieren analizar! Uno esperaría que entiendan de tecnología, pero bueno, ahí está la plata y siempre hay alguien mirando por encima del hombro.
Las empresas, claro, no tardaron en poner el lloro. Decían que el plazo era demasiado corto para preparar unas ofertas decentes, especialmente teniendo en cuenta todas esas exigencias técnicas. Así que, entre quejas y súplicas, lograron convencer al ICE de ampliar el período. ¡Menos mal que el ICE se puso medio macizo y les hizo caso! Al final, Huawei, AFN Global y ONE Way fueron quienes vieron sus alegatos atendidos parcialmente, mientras que otras, como Sisap, Ericsson y Coasin, quedaron con cara de limón.
Y ni hablar del tecnicismo, ¿eh? Hablan de escenarios LTE, LTE + NR y NR... ¡Me mareo yo! Parece que están hablando en chino, aunque algunos de los proveedores sean precisamente de China. Entre regulación de estándares de ciberseguridad e independencia de partidas, uno se queda pensando si esto realmente beneficia al consumidor tico o solo llena los bolsillos de unos cuantos allegados. ¡Qué vara!
Según el comunicado de la Contraloría, los señalamientos de las empresas no tenían “sustento” o su discusión no era “válida en este momento”. Eso suena a echarle la culpa a cualquiera para evitar admitir un error. Pero bueno, dicen que ya la pelota está en el tejado del ICE, que ahora ellos deben seguir adelante con el proceso sin interferencia de la Contraloría. ¡Más responsabilidad para ellos!
Esto nos deja pensando en cómo va a afectar este retraso al desarrollo del país. El 5G es crucial para impulsar la innovación, mejorar la conectividad y facilitar el acceso a servicios digitales. Pero si seguimos arrastrando los pies con estas idas y vueltas burocráticas, vamos a quedar rezagados frente a otros países de la región. ¡Parece un capítulo de novela!
Muchos se preguntan si el problema radica en la falta de transparencia en el proceso de licitación, o si simplemente hay intereses creados detrás de la oposición a ciertas empresas. Algunos murmuran que hay presiones externas influyendo en las decisiones, pero eso ya es harina de otro molino. Lo cierto es que la ciudadanía merece saber quién está manejando las riendas de este importante proyecto y cuáles son los verdaderos motivos detrás de este freno constante. ¡Una pena tener que lidiar con tanta maraña!
En fin, parece que la historia del 5G en Costa Rica seguirá dando tela para cortar por un buen rato. Con tantas trabas y demoras, uno ya no sabe cuándo finalmente tendremos internet ultrarrápido en todos lados. ¿Ustedes creen que este nuevo plazo servirá para agilizar el proceso o seguiremos viendo más contratiempos en el camino? ¡Déjenme sus opiniones en los comentarios, maes!
