¡Ay, Dios mío! Pues resulta que un estudio nuevo, hecho de chiripa entre el Idespo y la U, nos cayó como balde de agua fría. Parece que a la gente le está picando el mosquito de la inteligencia artificial. No hablamos de miedo irracional tipo película de terror, sino de una preocupación genuina, una inquietud de que esto se vaya de las manos, ¿me entienden?
La investigación, que recogió datos entre el 14 y el 24 de mayo pasao', con un nivel de confianza del 95% y un margen de error pequeño –casi un lujo–, reveló que un 87% de nosotros cree que la IA necesita regulación urgente. Y ojo, que no es solo el abuelito preocupado; los hombres de más de cincuenta y las mujeres entre 26 y 35 también están sacándose de onda con esta movida.
Pero aquí viene la parada interesante: cuando te preguntan directamente cuánto confías en la IA, la respuesta más común es… ¡meh! Un cuarto de los encuestados está en la vereda media, ni muy a favor, ni muy en contra. Tenemos unos pocos súper confiados (5.25%, vamos, casi nadie), y otros que le huyen como al peste (17.7%). Parece que estamos jugando en la cuerda floja, viendo cómo evoluciona el asunto.
Y para qué usamos la IA, si ya estamos hablando de eso? Bueno, pa’ la mayoría, es pa' tener un asistente virtual o un chatbot que te conteste cualquier tontería. Después, algunos la usan en aplicaciones específicas, otras en redes sociales, pero nomás un puñado la emplea para pensar o crear textos, ¡vaya que sí! Eso demuestra que todavía estamos lejos de ver a los robots escribiendo novelas galácticas, afortunadamente.
Lo que sí quedó claro es que la ciencia y la tecnología tienen una influencia grandota en nuestras vidas, una vara donde estamos metidos hasta el cuello. Casi todos (67%) sienten que la ciencia es una herramienta pa' solucionar los problemas diarios, y un 91.5% está de acuerdo en que mejora nuestra calidad de vida. ¡Imagínate!, parece que hemos domesticado a la ciencia, o eso creemos...
Sin embargo, ahí viene el lunar: la mayoría de las mujeres (79.2%) y un buen porcentaje de los hombres (78.1%) creen que deberíamos tener cuidado con estas tecnologías. Y no es solamente por precaución; tememos que la IA cambie nuestros valores, que nos convierta en seres cibernéticos sin alma. Un 7.5% dice que sí, que esto nos cambiará totalmente, aunque sea poquito a poco. Uno se queda pensando si pronto estaremos discutiendo si es correcto comer carne sintética, ¿eh?
En cuanto a si la ciencia se guía por principios éticos, la mayoría está de acuerdo, más o menos. Alrededor del 62.3% piensa que sí, y tres cuartas partes creen que la investigación científica busca el beneficio de todos. Pero, bueno, sabemos que la realidad a veces es diferente, diay. La encuesta también detectó que la gente está un tanto neutral sobre cómo la ciencia afecta al mundo, pero hay optimistas también (17.2%). Y sorprendentemente, muchos ticos tenemos interés en el tema, ¡aunque a veces no sepamos ni qué significa “algoritmo”! La mayoría relaciona la innovación con 'novedades tecnológicas' y 'cosas nuevas', cosas simples, pero que reflejan la curiosidad que tenemos los chinos.
Así que, con todo esto en mente, ¿qué les parece? ¿Les preocupa tanto la IA como a la mayoría de los encuestados, o creen que es exagerado? ¿Creen que la inteligencia artificial eventualmente terminará afectando nuestro sentido de lo bueno y lo malo? ¿Deberíamos ponerle más frenos a esta tecnología o confiar en que la humanidad sabrá manejarla? ¡Déjenme sus opiniones en el foro!
La investigación, que recogió datos entre el 14 y el 24 de mayo pasao', con un nivel de confianza del 95% y un margen de error pequeño –casi un lujo–, reveló que un 87% de nosotros cree que la IA necesita regulación urgente. Y ojo, que no es solo el abuelito preocupado; los hombres de más de cincuenta y las mujeres entre 26 y 35 también están sacándose de onda con esta movida.
Pero aquí viene la parada interesante: cuando te preguntan directamente cuánto confías en la IA, la respuesta más común es… ¡meh! Un cuarto de los encuestados está en la vereda media, ni muy a favor, ni muy en contra. Tenemos unos pocos súper confiados (5.25%, vamos, casi nadie), y otros que le huyen como al peste (17.7%). Parece que estamos jugando en la cuerda floja, viendo cómo evoluciona el asunto.
Y para qué usamos la IA, si ya estamos hablando de eso? Bueno, pa’ la mayoría, es pa' tener un asistente virtual o un chatbot que te conteste cualquier tontería. Después, algunos la usan en aplicaciones específicas, otras en redes sociales, pero nomás un puñado la emplea para pensar o crear textos, ¡vaya que sí! Eso demuestra que todavía estamos lejos de ver a los robots escribiendo novelas galácticas, afortunadamente.
Lo que sí quedó claro es que la ciencia y la tecnología tienen una influencia grandota en nuestras vidas, una vara donde estamos metidos hasta el cuello. Casi todos (67%) sienten que la ciencia es una herramienta pa' solucionar los problemas diarios, y un 91.5% está de acuerdo en que mejora nuestra calidad de vida. ¡Imagínate!, parece que hemos domesticado a la ciencia, o eso creemos...
Sin embargo, ahí viene el lunar: la mayoría de las mujeres (79.2%) y un buen porcentaje de los hombres (78.1%) creen que deberíamos tener cuidado con estas tecnologías. Y no es solamente por precaución; tememos que la IA cambie nuestros valores, que nos convierta en seres cibernéticos sin alma. Un 7.5% dice que sí, que esto nos cambiará totalmente, aunque sea poquito a poco. Uno se queda pensando si pronto estaremos discutiendo si es correcto comer carne sintética, ¿eh?
En cuanto a si la ciencia se guía por principios éticos, la mayoría está de acuerdo, más o menos. Alrededor del 62.3% piensa que sí, y tres cuartas partes creen que la investigación científica busca el beneficio de todos. Pero, bueno, sabemos que la realidad a veces es diferente, diay. La encuesta también detectó que la gente está un tanto neutral sobre cómo la ciencia afecta al mundo, pero hay optimistas también (17.2%). Y sorprendentemente, muchos ticos tenemos interés en el tema, ¡aunque a veces no sepamos ni qué significa “algoritmo”! La mayoría relaciona la innovación con 'novedades tecnológicas' y 'cosas nuevas', cosas simples, pero que reflejan la curiosidad que tenemos los chinos.
Así que, con todo esto en mente, ¿qué les parece? ¿Les preocupa tanto la IA como a la mayoría de los encuestados, o creen que es exagerado? ¿Creen que la inteligencia artificial eventualmente terminará afectando nuestro sentido de lo bueno y lo malo? ¿Deberíamos ponerle más frenos a esta tecnología o confiar en que la humanidad sabrá manejarla? ¡Déjenme sus opiniones en el foro!