¡Dey, pura vida! La cosa está que arde por acá, porque Procomer, con ayuda del Ministerio de Trabajo y el Comex, se puso las pilas para echarle un empujón a esos compañeros de Intel que van a quedar sin brete. Después del anuncio de que la producción se va pa’ Malasia y Vietnam, todos estábamos pensando qué iba a pasar con los casi 800 trabajadores, pero parece que alguien sí le puso corazón al asunto.
Como ya saben, Intel decidió mover sus operaciones a tierras asiáticas, dejando a un buen montón de gente acá en Costa Rica buscando nuevo trabajo. No es ninguna novedad que esto le pega duro al bolsillo de las familias y a la economía del país, así que la iniciativa de Procomer viene con toda. Según nos cuentan desde la institución, esto es para asegurar que estos profesionales, que tienen un conocimiento técnico bien bacán, puedan encontrar rápidamente otro lugar donde aplicar sus habilidades y seguir aportando al crecimiento nacional.
La primera feria de empleo que hicieron fue un éxito rotundo. Más de veinte empresas de los sectores de manufactura e industria médica se presentaron ofreciendo oportunidades laborales. ¡Imagínense la movida! Había ofertas para todos los gustos y niveles de experiencia. Además, no solo se quedaron en presentar vacantes, sino que también armaron talleres súper interesantes sobre emprendedurismo y cómo mejorar la empleabilidad en este mercado que anda medio loco. Diay, hasta les dieron charlas introductorias para los que no estaban familiarizados con la industria médica, ¡eso sí que es ponerle atención!
Laura López, la gerente general de Procomer, soltó unas verdades: “Intel ha formado a profesionales altamente calificados, con conocimientos técnicos y experiencia que aportan un gran valor al país. Este espacio busca facilitar su recolocación y, al mismo tiempo, permitir que ese talento continúe contribuyendo con el desarrollo de las empresas que operan en Costa Rica”. No me hagan bolas, si eso suena a que realmente quieren ayudar a estos trabajadores a salir adelante y demostrarle a Intel que acá tenemos gente preparada para cualquier cosa.
Andrés Romero, el ministro de Trabajo, también se sumó a la conversación: “Estamos facilitando la transición de las personas afectadas por el cierre de estas operaciones y promovemos su inserción laboral a través de esta acción concreta, de manera que estas personas puedan movilizarse laboralmente dentro del sector de manufactura.” Parece que el gobierno también quiere meterle empeño y hacer que estos ex empleados de Intel no se queden varados en la calle, ¡qué bueno!
Además de las entrevistas entre empresas y candidatos, pusieron a prueba el nivel de inglés de los interesados. Y sí, señores, se habilitaron espacios privados para que pudieran presentar sus perfiles de forma más personalizada. Eso es clave para que los reclutadores vean bien las habilidades de cada persona y encuentren el encaje perfecto. Se nota que Procomer se esforzó para que todo salga a pedirle a Diosito.
Lo mejor de todo es que no se quedan ahí, ¡nope! Ya tienen planeada una segunda edición de la feria para febrero del 2026. Así que todavía habrá oportunidad para que más empresas se sumen y ofrezcan nuevas posiciones. Esto demuestra que están comprometidos a largo plazo con la recolocación de estos trabajadores y a fortalecer el sector productivo del país. Vamos, que le están poniendo toda la carne al asador para que nadie se quede con las manos vacías.
En fin, parece que la cosa podría terminar bien para estos trabajadores de Intel. Aunque la situación inicial daba qué pensar, las acciones de Procomer y el Gobierno demuestran que se están tomando la responsabilidad en serio. Pero díganme, ¿creen que estas ferias de empleo son suficientes para garantizar la recolocación efectiva de todos los afectados, o se necesita implementar medidas más audaces para apoyar a estos compañeros?
Como ya saben, Intel decidió mover sus operaciones a tierras asiáticas, dejando a un buen montón de gente acá en Costa Rica buscando nuevo trabajo. No es ninguna novedad que esto le pega duro al bolsillo de las familias y a la economía del país, así que la iniciativa de Procomer viene con toda. Según nos cuentan desde la institución, esto es para asegurar que estos profesionales, que tienen un conocimiento técnico bien bacán, puedan encontrar rápidamente otro lugar donde aplicar sus habilidades y seguir aportando al crecimiento nacional.
La primera feria de empleo que hicieron fue un éxito rotundo. Más de veinte empresas de los sectores de manufactura e industria médica se presentaron ofreciendo oportunidades laborales. ¡Imagínense la movida! Había ofertas para todos los gustos y niveles de experiencia. Además, no solo se quedaron en presentar vacantes, sino que también armaron talleres súper interesantes sobre emprendedurismo y cómo mejorar la empleabilidad en este mercado que anda medio loco. Diay, hasta les dieron charlas introductorias para los que no estaban familiarizados con la industria médica, ¡eso sí que es ponerle atención!
Laura López, la gerente general de Procomer, soltó unas verdades: “Intel ha formado a profesionales altamente calificados, con conocimientos técnicos y experiencia que aportan un gran valor al país. Este espacio busca facilitar su recolocación y, al mismo tiempo, permitir que ese talento continúe contribuyendo con el desarrollo de las empresas que operan en Costa Rica”. No me hagan bolas, si eso suena a que realmente quieren ayudar a estos trabajadores a salir adelante y demostrarle a Intel que acá tenemos gente preparada para cualquier cosa.
Andrés Romero, el ministro de Trabajo, también se sumó a la conversación: “Estamos facilitando la transición de las personas afectadas por el cierre de estas operaciones y promovemos su inserción laboral a través de esta acción concreta, de manera que estas personas puedan movilizarse laboralmente dentro del sector de manufactura.” Parece que el gobierno también quiere meterle empeño y hacer que estos ex empleados de Intel no se queden varados en la calle, ¡qué bueno!
Además de las entrevistas entre empresas y candidatos, pusieron a prueba el nivel de inglés de los interesados. Y sí, señores, se habilitaron espacios privados para que pudieran presentar sus perfiles de forma más personalizada. Eso es clave para que los reclutadores vean bien las habilidades de cada persona y encuentren el encaje perfecto. Se nota que Procomer se esforzó para que todo salga a pedirle a Diosito.
Lo mejor de todo es que no se quedan ahí, ¡nope! Ya tienen planeada una segunda edición de la feria para febrero del 2026. Así que todavía habrá oportunidad para que más empresas se sumen y ofrezcan nuevas posiciones. Esto demuestra que están comprometidos a largo plazo con la recolocación de estos trabajadores y a fortalecer el sector productivo del país. Vamos, que le están poniendo toda la carne al asador para que nadie se quede con las manos vacías.
En fin, parece que la cosa podría terminar bien para estos trabajadores de Intel. Aunque la situación inicial daba qué pensar, las acciones de Procomer y el Gobierno demuestran que se están tomando la responsabilidad en serio. Pero díganme, ¿creen que estas ferias de empleo son suficientes para garantizar la recolocación efectiva de todos los afectados, o se necesita implementar medidas más audaces para apoyar a estos compañeros?
