¡Manito arriba si te alegró esta noticia! Moody's, la agencia internacional, nos acaba de dar un buen golpe de realidad económica: subieron nuestra calificación de riesgo país de Ba3 a Ba2. Esto significa, vamos a traducirlo para los que andamos medio despistados, que somos vistos como un poquito menos riesgosos para invertir en nosotros. En resumen: ¡noticia tuanis!
Para entender bien qué significa esto, hay que recordar que hace unos años estábamos batallando pa' salir del agujero financiero. Estábamos agarrándole con pinzas a los gastos públicos, tratando de enderezar la vara y evitar que nos fuéramos al traste. Claro, no fue fácil, hubo mucho debate, muchas chinchorritas entre diputados y protestas en la calle… pero parece que, al final, el esfuerzo rindió sus frutos.
Según los expertos de Moody’s, el cambio en nuestra calificación se basa en tres pilares fundamentales: primero, el cumplimiento riguroso de los techos de gasto, lo cual demuestra que le estamos tomando la cosa en serio. Segundo, una mejor administración de la deuda pública, evitando esos pasivos que nos atormentaban. Y tercero, la solidez de nuestro crecimiento económico, que ha resistido hasta ahora los vaivenes de la economía mundial. Una muestra de que podemos sacarle provecho a pesar de las dificultades.
El ministro de Hacienda, Rudolf Lücke, no pudo disimular la alegría. Afirmó que esta mejora es un respaldo al compromiso del país con la disciplina fiscal y la buena gestión de la deuda. “Costa Rica avanza en la dirección correcta,” dijo, visiblemente contento. Reconoció también que aún queda mucho brete por delante, pero que los resultados obtenidos hasta ahora son alentadores. La verdad, mae, uno se siente orgulloso de ver cómo el esfuerzo de todos está dando resultados tangibles.
Pero ojo, que la cosa no es sentarnos a celebrar y descansar sobre nuestros laureles. Uno de los mayores desafíos que enfrentamos ahora mismo es conseguir financiamiento externo en mejores condiciones. Necesitamos plata fresca para seguir invirtiendo en proyectos importantes para el país: educación, salud, infraestructura... ¡la lista es larga! Por eso, Hacienda ya le está echando presión a la Asamblea Legislativa para que aprueben pronto la emisión de eurobonos. Son fundamentales para diversificar nuestras fuentes de financiamiento y dejar de depender tanto del mercado local, que a veces puede estar medio cargado.
Estos eurobonos, para los que no estén familiarizados, son básicamente bonos emitidos en euros y vendidos a inversionistas internacionales. Suelen tener plazos más largos y tasas de interés competitivas, lo cual nos permite obtener recursos a un costo menor. Además, ayudan a fortalecer nuestra credibilidad ante el mundo entero. Imaginen, ¡hasta podríamos financiar la construcción de una mega cancha de fútbol en Guadalupe con esa plata! Bueno, quizás exageré un poco, pero entienden la idea.
Ahora bien, no todo es color de rosa. Algunos economistas advierten que esta mejora en la calificación no es suficiente para solucionar todos nuestros problemas económicos. Señalan que todavía tenemos muchos retos pendientes, como la necesidad de aumentar la productividad, mejorar la eficiencia del sector público y reducir la desigualdad social. Y claro, la famosa reforma tributaria sigue siendo una espina clavada, porque nadie quiere pagar más impuestos, ni siquiera los políticos. Pero bueno, ahí va la vaina…
En fin, la noticia es positiva y da esperanza para el futuro. Sin embargo, debemos seguir trabajando duro para mantener la senda del desarrollo sostenible y asegurar un mejor futuro para las próximas generaciones. Entonces, les pregunto a ustedes, fanáticos del Foro: ¿creen que esta mejora en la calificación de riesgo país es un punto de inflexión para la economía costarricense o simplemente un respiro temporal en medio de una tormenta perfecta?
Para entender bien qué significa esto, hay que recordar que hace unos años estábamos batallando pa' salir del agujero financiero. Estábamos agarrándole con pinzas a los gastos públicos, tratando de enderezar la vara y evitar que nos fuéramos al traste. Claro, no fue fácil, hubo mucho debate, muchas chinchorritas entre diputados y protestas en la calle… pero parece que, al final, el esfuerzo rindió sus frutos.
Según los expertos de Moody’s, el cambio en nuestra calificación se basa en tres pilares fundamentales: primero, el cumplimiento riguroso de los techos de gasto, lo cual demuestra que le estamos tomando la cosa en serio. Segundo, una mejor administración de la deuda pública, evitando esos pasivos que nos atormentaban. Y tercero, la solidez de nuestro crecimiento económico, que ha resistido hasta ahora los vaivenes de la economía mundial. Una muestra de que podemos sacarle provecho a pesar de las dificultades.
El ministro de Hacienda, Rudolf Lücke, no pudo disimular la alegría. Afirmó que esta mejora es un respaldo al compromiso del país con la disciplina fiscal y la buena gestión de la deuda. “Costa Rica avanza en la dirección correcta,” dijo, visiblemente contento. Reconoció también que aún queda mucho brete por delante, pero que los resultados obtenidos hasta ahora son alentadores. La verdad, mae, uno se siente orgulloso de ver cómo el esfuerzo de todos está dando resultados tangibles.
Pero ojo, que la cosa no es sentarnos a celebrar y descansar sobre nuestros laureles. Uno de los mayores desafíos que enfrentamos ahora mismo es conseguir financiamiento externo en mejores condiciones. Necesitamos plata fresca para seguir invirtiendo en proyectos importantes para el país: educación, salud, infraestructura... ¡la lista es larga! Por eso, Hacienda ya le está echando presión a la Asamblea Legislativa para que aprueben pronto la emisión de eurobonos. Son fundamentales para diversificar nuestras fuentes de financiamiento y dejar de depender tanto del mercado local, que a veces puede estar medio cargado.
Estos eurobonos, para los que no estén familiarizados, son básicamente bonos emitidos en euros y vendidos a inversionistas internacionales. Suelen tener plazos más largos y tasas de interés competitivas, lo cual nos permite obtener recursos a un costo menor. Además, ayudan a fortalecer nuestra credibilidad ante el mundo entero. Imaginen, ¡hasta podríamos financiar la construcción de una mega cancha de fútbol en Guadalupe con esa plata! Bueno, quizás exageré un poco, pero entienden la idea.
Ahora bien, no todo es color de rosa. Algunos economistas advierten que esta mejora en la calificación no es suficiente para solucionar todos nuestros problemas económicos. Señalan que todavía tenemos muchos retos pendientes, como la necesidad de aumentar la productividad, mejorar la eficiencia del sector público y reducir la desigualdad social. Y claro, la famosa reforma tributaria sigue siendo una espina clavada, porque nadie quiere pagar más impuestos, ni siquiera los políticos. Pero bueno, ahí va la vaina…
En fin, la noticia es positiva y da esperanza para el futuro. Sin embargo, debemos seguir trabajando duro para mantener la senda del desarrollo sostenible y asegurar un mejor futuro para las próximas generaciones. Entonces, les pregunto a ustedes, fanáticos del Foro: ¿creen que esta mejora en la calificación de riesgo país es un punto de inflexión para la economía costarricense o simplemente un respiro temporal en medio de una tormenta perfecta?