¡Ay, mi Dios! Resulta que Estados Unidos está celebrando una bajada histórica en el número de detenciones de migrantes en su frontera sur. Según el Departamento de Seguridad Nacional, apenas registraron 237.565 detenciones en el último año fiscal. ¿Y saben qué? Esa cifra no se veía desde… ¡1970! Sí, señores, vamos retrocediendo en el tiempo como si estuviéramos viendo viejas películas de Alvarado.
Para ponerle un poco de contexto, esto significa que estamos hablando de un 87% menos de gente que cruzando en comparación con los últimos cuatro años fiscales, donde el promedio se disparaba a casi dos millones. Imaginen la diferencia, diay. Parece que, de repente, la frontera se ha vuelto un paseo dominical… o eso dicen por Washington, claro. Antes era 'la crisis fronteriza', ahora es 'frontera segura'. ¡Cambios de bocado!
Ahora bien, resulta que gran parte de esta aparente calma se dio durante los últimos meses del gobierno de Biden, entre octubre de 2024 y enero de 2025. De ahí que el DHS esté soltando pecho y diciendo que le dieron vuelta a la tortilla. Pero ojo, porque ahora llegó Trump otra vez al mando y ya anda con otro rollo, prometiendo redadas y deportaciones a lo grande. ¡Ya verán qué sale de eso, chunches!
La Secretaria de Seguridad Nacional, Kristi Noem, no se anduvo con rodeos y declaró que tienen “la frontera más segura en la historia de Estados Unidos”. Lo dijo con tal seguridad que casi me creo que estoy soñando. Rematan que ahora llevan cinco meses sin soltar a nadie en la frontera suroeste, una diferencia abismal con los 9.144 retenciones que habían en septiembre de 2024. ¡Una locura, fiu!
Pero, ¿por qué tanto cambio? Bueno, recordemos que antes, bajo gobiernos anteriores, los retenidos eran dejados libres a cambio de que se presentaran posteriormente ante las autoridades para resolver su situación migratoria. Como ya sabemos, muchos de esos compas nunca volvían a aparecer. Ahí radicaba la crítica, diay. Por eso ahora están cerrando el gallito y poniendo trabas a diestra y siniestra.
Los números hablan por sí solos: el promedio diario de detenciones ha caído de 5.110 durante la gestión anterior a apenas 279 en la actualidad. ¡Un cambio brutal! Esto quiere decir que la diferencia es del 95%. Uno piensa, ¿será que finalmente encontraron la fórmula mágica? O será que la cosa se puso tan fea que la gente simplemente decidió buscar otras rutas?
Sin embargo, hay que analizar esto con cautela. Estos resultados podrían ser temporales, influenciados por factores económicos y políticos que aún desconocemos. Además, la política migratoria siempre ha sido un tema espinoso y susceptible a cambios repentinos, especialmente en tiempos electorales. Veremos cómo reacciona el resto del mundo ante estas nuevas medidas, porque esto no afecta solo a Estados Unidos, sino a toda Latinoamérica, bretes.
En fin, parece que la cosa está cambiando en la frontera sur de Estados Unidos, aunque todavía queda mucho por ver. Con todos estos cambios y sorpresas, me pregunto: ¿cree usted que esta reducción en las detenciones es sostenible a largo plazo, o es solo un espejismo antes de una nueva ola migratoria? ¡Déjenme sus opiniones en los comentarios, quiero saber qué piensa el pueblo!
Para ponerle un poco de contexto, esto significa que estamos hablando de un 87% menos de gente que cruzando en comparación con los últimos cuatro años fiscales, donde el promedio se disparaba a casi dos millones. Imaginen la diferencia, diay. Parece que, de repente, la frontera se ha vuelto un paseo dominical… o eso dicen por Washington, claro. Antes era 'la crisis fronteriza', ahora es 'frontera segura'. ¡Cambios de bocado!
Ahora bien, resulta que gran parte de esta aparente calma se dio durante los últimos meses del gobierno de Biden, entre octubre de 2024 y enero de 2025. De ahí que el DHS esté soltando pecho y diciendo que le dieron vuelta a la tortilla. Pero ojo, porque ahora llegó Trump otra vez al mando y ya anda con otro rollo, prometiendo redadas y deportaciones a lo grande. ¡Ya verán qué sale de eso, chunches!
La Secretaria de Seguridad Nacional, Kristi Noem, no se anduvo con rodeos y declaró que tienen “la frontera más segura en la historia de Estados Unidos”. Lo dijo con tal seguridad que casi me creo que estoy soñando. Rematan que ahora llevan cinco meses sin soltar a nadie en la frontera suroeste, una diferencia abismal con los 9.144 retenciones que habían en septiembre de 2024. ¡Una locura, fiu!
Pero, ¿por qué tanto cambio? Bueno, recordemos que antes, bajo gobiernos anteriores, los retenidos eran dejados libres a cambio de que se presentaran posteriormente ante las autoridades para resolver su situación migratoria. Como ya sabemos, muchos de esos compas nunca volvían a aparecer. Ahí radicaba la crítica, diay. Por eso ahora están cerrando el gallito y poniendo trabas a diestra y siniestra.
Los números hablan por sí solos: el promedio diario de detenciones ha caído de 5.110 durante la gestión anterior a apenas 279 en la actualidad. ¡Un cambio brutal! Esto quiere decir que la diferencia es del 95%. Uno piensa, ¿será que finalmente encontraron la fórmula mágica? O será que la cosa se puso tan fea que la gente simplemente decidió buscar otras rutas?
Sin embargo, hay que analizar esto con cautela. Estos resultados podrían ser temporales, influenciados por factores económicos y políticos que aún desconocemos. Además, la política migratoria siempre ha sido un tema espinoso y susceptible a cambios repentinos, especialmente en tiempos electorales. Veremos cómo reacciona el resto del mundo ante estas nuevas medidas, porque esto no afecta solo a Estados Unidos, sino a toda Latinoamérica, bretes.
En fin, parece que la cosa está cambiando en la frontera sur de Estados Unidos, aunque todavía queda mucho por ver. Con todos estos cambios y sorpresas, me pregunto: ¿cree usted que esta reducción en las detenciones es sostenible a largo plazo, o es solo un espejismo antes de una nueva ola migratoria? ¡Déjenme sus opiniones en los comentarios, quiero saber qué piensa el pueblo!