Pues fíjate tú, así nomás. Ya van 50 días desde que el Consejo Nacional del Deporte mandó a investigar a la Federación Costarricense de Atletismo (Fecoa) por el gallito que vivieron con Diana Bogantes en Tokio. El mundo entero vio cómo nuestra corredora tuvo que fajarse con sus propios gastos en el mundial, y nosotros acá nos quedamos preguntándonos qué estafa es esta.
Para refrescarles la memoria, la jugada empezó porque salió a luz que Diana Bogantes, nuestra representante en la maratón de Tokio, tuvo que pagar sus propios boletos, hacer su propia camiseta y hasta cuidarse sola de la hidratación. Una torta, vamos. Se esperaba un poco más de apoyo de la federación, y eso tardó en llegar, causando un revuelo considerable, y razón suficiente para que el Consejo abriera esa investigación.
El Consejo Nacional del Deporte y la Recreación, allá por el 18 de septiembre, dio la instrucción a la Dirección Nacional, a través de la Unidad de Asesoría Legal del Icoder, para que investigaran a Fecoa y presentaran un informe. Se les puso un plazo de un mes, ¡y mira!, ahí estamos, medio noviembre y seguimos esperando resultados. Parece que se fueron al traste las cosas.
Cuando CR Hoy le preguntó al ministro Donald Rojas – que también anda chambeando como presidente del Consejo y director del Icoder – sobre esto, nos soltó que la Unidad había pedido más tiempo para terminar el informe. “El informe aún no está concluido, por lo que se le solicitó una prórroga al Consejo”, dijo él. ¡Prórroga! Pero, ¿cuánto más tiempo necesitan pa’ resolver esto?
Y es que la maraña se pone más densa si recordamos que Bogantes sí llegó a participar en el mundial. Terminó la maratón en 2 horas, 54 minutos y 2 segundos, quedando en el puesto número 55. No es un resultado espectacular, claro, pero al menos representó al país. Lo malo es que lo hizo bajo condiciones precarias, sintiéndose abandonada por quienes deberían haberla apoyado.
Para refrescarles la memoria, la jugada empezó porque salió a luz que Diana Bogantes, nuestra representante en la maratón de Tokio, tuvo que pagar sus propios boletos, hacer su propia camiseta y hasta cuidarse sola de la hidratación. Una torta, vamos. Se esperaba un poco más de apoyo de la federación, y eso tardó en llegar, causando un revuelo considerable, y razón suficiente para que el Consejo abriera esa investigación.
El Consejo Nacional del Deporte y la Recreación, allá por el 18 de septiembre, dio la instrucción a la Dirección Nacional, a través de la Unidad de Asesoría Legal del Icoder, para que investigaran a Fecoa y presentaran un informe. Se les puso un plazo de un mes, ¡y mira!, ahí estamos, medio noviembre y seguimos esperando resultados. Parece que se fueron al traste las cosas.
Cuando CR Hoy le preguntó al ministro Donald Rojas – que también anda chambeando como presidente del Consejo y director del Icoder – sobre esto, nos soltó que la Unidad había pedido más tiempo para terminar el informe. “El informe aún no está concluido, por lo que se le solicitó una prórroga al Consejo”, dijo él. ¡Prórroga! Pero, ¿cuánto más tiempo necesitan pa’ resolver esto?
Y es que la maraña se pone más densa si recordamos que Bogantes sí llegó a participar en el mundial. Terminó la maratón en 2 horas, 54 minutos y 2 segundos, quedando en el puesto número 55. No es un resultado espectacular, claro, pero al menos representó al país. Lo malo es que lo hizo bajo condiciones precarias, sintiéndose abandonada por quienes deberían haberla apoyado.
