¡Ay, Dios mío! La cruda nos cayó a todos estos días. Resulta que falleció don Carlos Robles Ortiz, papá del diputa Carlos Andrés Robles Obando, dejando un vacío enorme en Punta Arenas y, claro, en toda la familia. La noticia llegó como un balde de agua fría, ya saben cómo son estas cosas, te agarra desprevenido.
Don Carlos era conocido en Quepos y alrededores como un hombre sencillo, trabajador y muy querido por todos. No era político ni nada de eso, pero siempre estuvo presente en actividades comunitarias y apoyando a su hijo en su carrera política. Dicen que era el alma de la familia, el que mantenía unido al grupo, el consejero sabio que siempre tenía una palabra de aliento.
Y colorín colorado, ¡qué palo! Porque resulta que además de ser figura paterna ejemplar, don Carlos era un fanático del Herediano. Un seguidor hasta la médula, iba a todos los juegos que podía y siempre estaba defendiendo al equipo con uñas y dientes. La directiva del club le mandó sus condolencias y reconocieron su gran pasión por los rojiamarillos, diciendo que su espíritu siempre estará presente en el estadio Rosabal Cordero. ¡Imagínate, hasta en el cielo andará gritando goles!
Las muestras de cariño y apoyo hacia la familia Robles han sido muchísimas. La municipalidad de Quepos emitió un comunicado oficial expresando su profundo pesar y resaltando la importancia de don Carlos como vecino y contribuyente a la comunidad. También llegaron mensajes de amigos, familiares y conocidos de todas partes del país, demostrando el impacto positivo que tuvo en la vida de tantas personas.
Pero esto no termina ahí, ¿eh? Porque la investigación del caso de los cuerpos encontrados en Quepos sigue dando de qué hablar. Ya encontraron los restos de la pareja extranjera que había desaparecido hace unos meses y el OIJ está trabajando a marchas forzadas para identificar a los responsables de este macabro crimen. ¡Qué tremenda barbaridad! Parece sacado de película, pero es tristemente cierto.
Ahora bien, hablando de otra vaina, el tema del Canal 7 y el nuevo decreto del gobierno de Chaves sigue generando polémica. Muchos se preguntan si la estación quedará sin señal y cuál será el futuro de la televisión pública en Costa Rica. Hay rumores de que se están buscando alternativas, pero aún no hay nada concreto. ¡A ver qué sale de esta, porque la cosa está tensa!
Además, la Sala IV le pegó duro al Estado por la violencia en la cárcel de Pococí, después de la riña que dejó a varios reos heridos. Esto demuestra que la seguridad dentro de las cárceles sigue siendo un problema grave y que se necesitan medidas urgentes para garantizar la integridad de los internos y evitar futuras tragedias. ¡Eso sí es un brete!, porque mantener esas cárceles bajo control es un desafío enorme.
En fin, vaya semana intensa la que hemos tenido. Entre el fallecimiento de don Carlos, la investigación de los cuerpos encontrados, el tema del Canal 7 y la situación en la cárcel de Pococí, parece que nunca tenemos un respiro. Pero bueno, así es la vida, llena de altibajos. Ahora me pregunto, ¿cree usted que la respuesta del Estado ante la violencia en las cárceles será suficiente para prevenir futuros incidentes y proteger a la población?
Don Carlos era conocido en Quepos y alrededores como un hombre sencillo, trabajador y muy querido por todos. No era político ni nada de eso, pero siempre estuvo presente en actividades comunitarias y apoyando a su hijo en su carrera política. Dicen que era el alma de la familia, el que mantenía unido al grupo, el consejero sabio que siempre tenía una palabra de aliento.
Y colorín colorado, ¡qué palo! Porque resulta que además de ser figura paterna ejemplar, don Carlos era un fanático del Herediano. Un seguidor hasta la médula, iba a todos los juegos que podía y siempre estaba defendiendo al equipo con uñas y dientes. La directiva del club le mandó sus condolencias y reconocieron su gran pasión por los rojiamarillos, diciendo que su espíritu siempre estará presente en el estadio Rosabal Cordero. ¡Imagínate, hasta en el cielo andará gritando goles!
Las muestras de cariño y apoyo hacia la familia Robles han sido muchísimas. La municipalidad de Quepos emitió un comunicado oficial expresando su profundo pesar y resaltando la importancia de don Carlos como vecino y contribuyente a la comunidad. También llegaron mensajes de amigos, familiares y conocidos de todas partes del país, demostrando el impacto positivo que tuvo en la vida de tantas personas.
Pero esto no termina ahí, ¿eh? Porque la investigación del caso de los cuerpos encontrados en Quepos sigue dando de qué hablar. Ya encontraron los restos de la pareja extranjera que había desaparecido hace unos meses y el OIJ está trabajando a marchas forzadas para identificar a los responsables de este macabro crimen. ¡Qué tremenda barbaridad! Parece sacado de película, pero es tristemente cierto.
Ahora bien, hablando de otra vaina, el tema del Canal 7 y el nuevo decreto del gobierno de Chaves sigue generando polémica. Muchos se preguntan si la estación quedará sin señal y cuál será el futuro de la televisión pública en Costa Rica. Hay rumores de que se están buscando alternativas, pero aún no hay nada concreto. ¡A ver qué sale de esta, porque la cosa está tensa!
Además, la Sala IV le pegó duro al Estado por la violencia en la cárcel de Pococí, después de la riña que dejó a varios reos heridos. Esto demuestra que la seguridad dentro de las cárceles sigue siendo un problema grave y que se necesitan medidas urgentes para garantizar la integridad de los internos y evitar futuras tragedias. ¡Eso sí es un brete!, porque mantener esas cárceles bajo control es un desafío enorme.
En fin, vaya semana intensa la que hemos tenido. Entre el fallecimiento de don Carlos, la investigación de los cuerpos encontrados, el tema del Canal 7 y la situación en la cárcel de Pococí, parece que nunca tenemos un respiro. Pero bueno, así es la vida, llena de altibajos. Ahora me pregunto, ¿cree usted que la respuesta del Estado ante la violencia en las cárceles será suficiente para prevenir futuros incidentes y proteger a la población?