¡Ay, Dios mío! Esto sí que es tremendo. El Organismo de Investigación Judicial (OIJ) acaba de soltar la bomba: el Cartel del Caribe Sur, ese que le daba candela al negocio ilícito en nuestros mares, se vino abajo. Y no mami, esto no es cualquier cosita; dicen que es la operación más grande y compleja que ha visto Costa Rica desde tiempos inmemoriales. Parece sacado de una novela, pero es pura vida… aunque bien turbia.
Todo empezó con una tragedia macabra allá por el 2022 en Limón – un ajuste de cuentas donde ocho personas, incluyendo al tristemente célebre “Ratón” Hernández, terminaron perdiendo la vida. Ese día, los panas picados del narco empezaron a moverse diferente. Con la muerte de “Ratón”, entraron sus hermanos, Luis Manuel y Jordie Picado Grijalba, alias “Shock” y “Noni”, a tomar el control, consolidándose como líderes de lo que hoy conocemos como el Cartel del Caribe Sur. ¡Un brete el que armaron!
Después de casi cuatro años de pata arriba investigando, el OIJ desplegó una operación titánica este martes pasado. ¡Más de mil agentes judiciales! Realizaron 64 allanamientos repartidos por el país, desde Limón hasta San José. Se pusieron las pilas de una vez por todas, con el respaldo de la Oficina Especializada contra la Delincuencia Organizada (OECDO), pa' que no les quedara resquicio. ¡Eso es trabajar, maestros!
Y mire usted qué resultado: capturaron a 33 personas, congelaron cuentas bancarias por unos 200 millones de colones, decomisaron más de 97 millones en efectivo, 16 vehículos lujosos y propiedades que suman fácilmente más de dos mil millones de colones. ¡Qué carga! ¡Parece película de Hollywood!
Pero eso no es todo, chunches. Las autoridades encontraron un arsenal tecnológico impresionante: equipos satelitales Garmin, radios sofisticadas, GPS marítimos, teléfonos trucados… ¡todo pa' comunicarse y ubicar las avionetas y lanchas cargadas de droga! Estaban más avanzados que nosotros pa' rastrear a esos malos. Usaban códigos secretos pa' que ni los mosquitos los escucharan.
Este cartel no era broma, diay. Tenían conexiones con Colombia, Panamá, España, Francia, Inglaterra y hasta Estados Unidos. Eran como telarañas, llevando droga de un lado a otro. Según las investigaciones, se estima que están involucrados en más de 60 asesinatos cometidos en el país en los últimos años. ¡Qué sal! Eso sí que es un historial turbio.
Ahora, ambos líderes, “Shock” y “Noni”, ya están tras las rejas. “Shock” fue agarrado en Londres, en pleno aeropuerto Heathrow, gracias a una orden internacional. Y “Noni”, bueno, ahí en Curridabat, conduciendo un carro como si nada. ¡Menos mal que nos llegó la hora! Ambos dirigían la banda como si fuera un ejército, con gente encargada de las finanzas, el transporte, la seguridad y la distribución. Todo bien organizado, como buenos profesionales del delito.
Este caso, llamado “Traición”, representa un golpe durísimo para el crimen organizado en Costa Rica. No solo por la cantidad de gente que cayeron, sino porque lograron desmantelar por completo una red que había dominado el Caribe durante años. Pero me pregunto, ¿será suficiente este golpe para frenar definitivamente el tráfico de drogas en nuestras costas, o simplemente surgirá otro cartel más astuto y silencioso? ¿Creen que debemos invertir más recursos en programas sociales preventivos para evitar que jóvenes caigan en estas redes?
Todo empezó con una tragedia macabra allá por el 2022 en Limón – un ajuste de cuentas donde ocho personas, incluyendo al tristemente célebre “Ratón” Hernández, terminaron perdiendo la vida. Ese día, los panas picados del narco empezaron a moverse diferente. Con la muerte de “Ratón”, entraron sus hermanos, Luis Manuel y Jordie Picado Grijalba, alias “Shock” y “Noni”, a tomar el control, consolidándose como líderes de lo que hoy conocemos como el Cartel del Caribe Sur. ¡Un brete el que armaron!
Después de casi cuatro años de pata arriba investigando, el OIJ desplegó una operación titánica este martes pasado. ¡Más de mil agentes judiciales! Realizaron 64 allanamientos repartidos por el país, desde Limón hasta San José. Se pusieron las pilas de una vez por todas, con el respaldo de la Oficina Especializada contra la Delincuencia Organizada (OECDO), pa' que no les quedara resquicio. ¡Eso es trabajar, maestros!
Y mire usted qué resultado: capturaron a 33 personas, congelaron cuentas bancarias por unos 200 millones de colones, decomisaron más de 97 millones en efectivo, 16 vehículos lujosos y propiedades que suman fácilmente más de dos mil millones de colones. ¡Qué carga! ¡Parece película de Hollywood!
Pero eso no es todo, chunches. Las autoridades encontraron un arsenal tecnológico impresionante: equipos satelitales Garmin, radios sofisticadas, GPS marítimos, teléfonos trucados… ¡todo pa' comunicarse y ubicar las avionetas y lanchas cargadas de droga! Estaban más avanzados que nosotros pa' rastrear a esos malos. Usaban códigos secretos pa' que ni los mosquitos los escucharan.
Este cartel no era broma, diay. Tenían conexiones con Colombia, Panamá, España, Francia, Inglaterra y hasta Estados Unidos. Eran como telarañas, llevando droga de un lado a otro. Según las investigaciones, se estima que están involucrados en más de 60 asesinatos cometidos en el país en los últimos años. ¡Qué sal! Eso sí que es un historial turbio.
Ahora, ambos líderes, “Shock” y “Noni”, ya están tras las rejas. “Shock” fue agarrado en Londres, en pleno aeropuerto Heathrow, gracias a una orden internacional. Y “Noni”, bueno, ahí en Curridabat, conduciendo un carro como si nada. ¡Menos mal que nos llegó la hora! Ambos dirigían la banda como si fuera un ejército, con gente encargada de las finanzas, el transporte, la seguridad y la distribución. Todo bien organizado, como buenos profesionales del delito.
Este caso, llamado “Traición”, representa un golpe durísimo para el crimen organizado en Costa Rica. No solo por la cantidad de gente que cayeron, sino porque lograron desmantelar por completo una red que había dominado el Caribe durante años. Pero me pregunto, ¿será suficiente este golpe para frenar definitivamente el tráfico de drogas en nuestras costas, o simplemente surgirá otro cartel más astuto y silencioso? ¿Creen que debemos invertir más recursos en programas sociales preventivos para evitar que jóvenes caigan en estas redes?