¡Ay, Dios mío, qué susto nos llevamos este lunes! Un buen temblor sacudió la Zona Norte y Guanacaste, dejando a varios vecinos con el corazón en la boca y algunos chunches rotos. Según los datos oficiales, la onda sísmica tuvo una magnitud de 4,2 y dejó a medio país preguntándose si era cosa nuestra o si ya llegaba el final del mundo, ¡como dicen por ahí!
El Observatorio Vulcanológico y Sismológico de Costa Rica (Ovsicori) nos explicó que el temblor se registró alrededor de las 9:36 a.m., con un epicentro localizado unos 14 kilómetros al noreste de Tilarán, a una profundidad de ocho kilómetros. Eso quiere decir que pegaditas estuvimos, varas cosas pudieron haber pasado peor, pero bueno, estamos hablando de temblores, nunca son agradables.
Marino Protti, el sismólogo de confianza de Ovsicori, nos contó que los sensores captaron bien la fuerza del temblor, especialmente en Tilarán, Cañas, y Bagaces. Lo que más preocupó fueron los reportes de gente que vio caer cosas de sus casas y negocios. Imagínate el corrillo, ¡qué pinchadura tener que limpiar vidrios y recoger pedazos después de un susto así!
En Nuevo Arenal y Río Celeste, la cosa se puso fea. Dicen que algunas paredes agrietadas aparecieron, y varias tiendas tuvieron que cerrar temporalmente para hacerle un revisión a fondo. Además, el temblor se sintió hasta en lugares más lejanos como San Carlos, San Ramón y Liberia. ¡Un movidito tuvimos, diay!
Algunas personas comentaban que fue como cuando te dan un golpe en la espalda, de repente todo tiembla y sientes que vas a salir volando. Otros, más tranquilos, decían “tranquilo, que esto es normal en nuestro país”. Pero igual, todos estaban revisando si tenían algún daño en sus propiedades y preguntándose cuándo va a dejar de temblarnos.
Lo cierto es que Costa Rica está ubicada en una zona de alta actividad sísmica, así que estos temblores, aunque nos asusten, son parte de nuestra realidad. Expertos recuerdan la importancia de tener kits de emergencia preparados y conocer los protocolos de seguridad en caso de un terremoto mayor. Mejor prevenir que lamentar, como dice mi abuelita.
Y claro, no podían faltar las reacciones en redes sociales. Fotos de estantes vacíos, mensajes de preocupación y algunos memes haciendo referencia al temblor inundaron Facebook e Instagram. En fin, los ticos siempre encuentran la forma de reírse hasta de las situaciones más difíciles. Eso sí, entre bromas, muchos estaban agradecidos de estar sanos y salvos.
Ahora, la gran pregunta queda abierta en el Foro: ¿Ustedes sienten que los temblores han sido más frecuentes últimamente o simplemente es mi imaginación galopante? ¿Cómo se preparan ustedes y sus familias ante la posibilidad de un sismo mayor? Compartan sus experiencias y consejos, porque cuidarnos mutuamente es lo que nos hace costarricenses, ¡y eso es a cachete!
El Observatorio Vulcanológico y Sismológico de Costa Rica (Ovsicori) nos explicó que el temblor se registró alrededor de las 9:36 a.m., con un epicentro localizado unos 14 kilómetros al noreste de Tilarán, a una profundidad de ocho kilómetros. Eso quiere decir que pegaditas estuvimos, varas cosas pudieron haber pasado peor, pero bueno, estamos hablando de temblores, nunca son agradables.
Marino Protti, el sismólogo de confianza de Ovsicori, nos contó que los sensores captaron bien la fuerza del temblor, especialmente en Tilarán, Cañas, y Bagaces. Lo que más preocupó fueron los reportes de gente que vio caer cosas de sus casas y negocios. Imagínate el corrillo, ¡qué pinchadura tener que limpiar vidrios y recoger pedazos después de un susto así!
En Nuevo Arenal y Río Celeste, la cosa se puso fea. Dicen que algunas paredes agrietadas aparecieron, y varias tiendas tuvieron que cerrar temporalmente para hacerle un revisión a fondo. Además, el temblor se sintió hasta en lugares más lejanos como San Carlos, San Ramón y Liberia. ¡Un movidito tuvimos, diay!
Algunas personas comentaban que fue como cuando te dan un golpe en la espalda, de repente todo tiembla y sientes que vas a salir volando. Otros, más tranquilos, decían “tranquilo, que esto es normal en nuestro país”. Pero igual, todos estaban revisando si tenían algún daño en sus propiedades y preguntándose cuándo va a dejar de temblarnos.
Lo cierto es que Costa Rica está ubicada en una zona de alta actividad sísmica, así que estos temblores, aunque nos asusten, son parte de nuestra realidad. Expertos recuerdan la importancia de tener kits de emergencia preparados y conocer los protocolos de seguridad en caso de un terremoto mayor. Mejor prevenir que lamentar, como dice mi abuelita.
Y claro, no podían faltar las reacciones en redes sociales. Fotos de estantes vacíos, mensajes de preocupación y algunos memes haciendo referencia al temblor inundaron Facebook e Instagram. En fin, los ticos siempre encuentran la forma de reírse hasta de las situaciones más difíciles. Eso sí, entre bromas, muchos estaban agradecidos de estar sanos y salvos.
Ahora, la gran pregunta queda abierta en el Foro: ¿Ustedes sienten que los temblores han sido más frecuentes últimamente o simplemente es mi imaginación galopante? ¿Cómo se preparan ustedes y sus familias ante la posibilidad de un sismo mayor? Compartan sus experiencias y consejos, porque cuidarnos mutuamente es lo que nos hace costarricenses, ¡y eso es a cachete!
