¡Ay, Dios mío! ¿Se imaginan la bronca que hay en el Colegio de Abogados y Abogadas? Resulta que el proceso electoral está más turbio que café corrido, lleno de perfiles falsos y cuentas manejadas por gente que parece sacada de una novela. Aquí en ‘Foro de Costa Rica’ estamos echándole lupa a este mamotreto porque esto ya va más allá de una simple campaña; parece una guerra digital.
Según nuestra investigación, y sí, nos costó un brete conseguir toda la data, varias agrupaciones están usando tácticas poco honorables para influir en la elección. Principalmente, se apunta a Integra Iuris, un grupo nuevo que se animó a meterse en la arena y desafiar el reinado de Innovación, que llevan quince años agarrados al poder con garras de tigrillo. Pero ojo, la cosa no es tan sencilla como parece.
Lo que encontramos es alarmante: hordas de 'troles' en Facebook, TikTok y otras redes sociales atacando, deformando y sacando de contexto cualquier cosa que diga Integra Iuris. Estos personajes, muchos con nombres sospechosos –‘La Lechuza’, ‘Innovacionsomostodos’, hasta uno que se hace llamar ‘El abogado facho que se cree del pueblo’– parecen tener una misión clara: hundir a la oposición a toda costa. Por si fuera poco, algunos andan usando fotos ajenas y logotipos del Colegio sin permiso, ¡una verdadera falta de respeto!
Y eso no es todo, mi pana. Parece que alguien anda jugando con inteligencia artificial para crear perfiles falsos con caras inventadas, publicar mensajes automatizados y hasta manipular imágenes. El Tribunal Electoral ya había advertido sobre estos riesgos, pero parece que nadie hizo caso. ¡Qué pena!, porque esto debilita la credibilidad de todo el proceso y pone en tela de juicio la ética de nuestros abogados.
Mientras tanto, Innovación, el grupo oficialista, anda tranquilito, sin recibir ataques directos ni crear perfiles fantasma. Esto levanta sospechas, ¿eh? Parece que tienen todos los recursos para mantener el control, tanto dentro como fuera del Colegio. Han preferido limitarse a mostrar fotos de gente que nadie conoce y evitar presentar un plan concreto, dejando a sus votantes con más preguntas que respuestas. ¡Eso sí que es jugar sucio!
Esta situación es preocupante porque pone en riesgo la integridad del proceso electoral. Un colegio profesional, donde se supone que impera la ética y el buen criterio, no debería estar envuelto en este tipo de controversias. Se espera que los abogados sean ejemplo de conducta y respeto, pero parece que algunas personas prefieren optar por el camino fácil de la manipulación y la desinformación. Ya vamos viendo cómo se manejan las cosas por estos lados.
Es importante recordar que la democracia no se construye con bots y perfiles falsos, sino con debates honestos, propuestas sólidas y respeto mutuo. Este escándalo debería servir como una llamada de atención para todas las partes involucradas y para la sociedad en general. Tenemos que exigir transparencia y rendición de cuentas, para que este tipo de situaciones no se repitan en el futuro. Ojalá estemos equivocados, pero la onda no pinta muy bien.
Con todo este panorama, me pregunto: ¿Hasta dónde están dispuestos a llegar algunos para aferrarse al poder en el Colegio de Abogados? ¿Deberían implementarse medidas más estrictas para regular el uso de redes sociales y la inteligencia artificial en procesos electorales profesionales?
Según nuestra investigación, y sí, nos costó un brete conseguir toda la data, varias agrupaciones están usando tácticas poco honorables para influir en la elección. Principalmente, se apunta a Integra Iuris, un grupo nuevo que se animó a meterse en la arena y desafiar el reinado de Innovación, que llevan quince años agarrados al poder con garras de tigrillo. Pero ojo, la cosa no es tan sencilla como parece.
Lo que encontramos es alarmante: hordas de 'troles' en Facebook, TikTok y otras redes sociales atacando, deformando y sacando de contexto cualquier cosa que diga Integra Iuris. Estos personajes, muchos con nombres sospechosos –‘La Lechuza’, ‘Innovacionsomostodos’, hasta uno que se hace llamar ‘El abogado facho que se cree del pueblo’– parecen tener una misión clara: hundir a la oposición a toda costa. Por si fuera poco, algunos andan usando fotos ajenas y logotipos del Colegio sin permiso, ¡una verdadera falta de respeto!
Y eso no es todo, mi pana. Parece que alguien anda jugando con inteligencia artificial para crear perfiles falsos con caras inventadas, publicar mensajes automatizados y hasta manipular imágenes. El Tribunal Electoral ya había advertido sobre estos riesgos, pero parece que nadie hizo caso. ¡Qué pena!, porque esto debilita la credibilidad de todo el proceso y pone en tela de juicio la ética de nuestros abogados.
Mientras tanto, Innovación, el grupo oficialista, anda tranquilito, sin recibir ataques directos ni crear perfiles fantasma. Esto levanta sospechas, ¿eh? Parece que tienen todos los recursos para mantener el control, tanto dentro como fuera del Colegio. Han preferido limitarse a mostrar fotos de gente que nadie conoce y evitar presentar un plan concreto, dejando a sus votantes con más preguntas que respuestas. ¡Eso sí que es jugar sucio!
Esta situación es preocupante porque pone en riesgo la integridad del proceso electoral. Un colegio profesional, donde se supone que impera la ética y el buen criterio, no debería estar envuelto en este tipo de controversias. Se espera que los abogados sean ejemplo de conducta y respeto, pero parece que algunas personas prefieren optar por el camino fácil de la manipulación y la desinformación. Ya vamos viendo cómo se manejan las cosas por estos lados.
Es importante recordar que la democracia no se construye con bots y perfiles falsos, sino con debates honestos, propuestas sólidas y respeto mutuo. Este escándalo debería servir como una llamada de atención para todas las partes involucradas y para la sociedad en general. Tenemos que exigir transparencia y rendición de cuentas, para que este tipo de situaciones no se repitan en el futuro. Ojalá estemos equivocados, pero la onda no pinta muy bien.
Con todo este panorama, me pregunto: ¿Hasta dónde están dispuestos a llegar algunos para aferrarse al poder en el Colegio de Abogados? ¿Deberían implementarse medidas más estrictas para regular el uso de redes sociales y la inteligencia artificial en procesos electorales profesionales?
