¡Ay, Dios mío! La cosa está que arde, mi gente. Resulta que el Gobierno estaba pensando en llenarle el pompón a todos con inauguraciones de obras por acá y por allá justo en plena campaña. Pero claro, ahí anda el TSE metiendo orden, echándoles un buen coscorrón, porque parece que algunos no entendieron bien las reglas del juego.
Según nos cuentan, el Gobierno fue a preguntar al Tribunal cómo podían seguir festejando nuevas carreteras y escuelas durante la campaña electoral. Imaginen la sorpresa cuando les dijeron que sí pueden abrir cosas, pero que ni loco pueden transmitirlo por las plataformas del Estado. ¡Un pura charada si te pensabas ver al Presidente estrenando puente en vivo!
Y es que, como bien saben, desde que se llama a votar, las cosas cambian. El artículo 142 del Código Electoral, que es un verdadero diccionario de prohibiciones, dice que ya no se puede andar bombardeando a la población con propaganda gubernamental. Eso aplica hasta después de las votaciones, incluso si hay que ir a una segunda vuelta. ¡Imagínate tener que aguantar eso por más tiempo!
Pero ojo, que no todo es prohibición. Parece que la Presidencia puede seguir transmitiendo sus apariciones frente a los órganos de control. Así que, si quieren ver al Presidente sudando la gota gorda respondiendo preguntas difíciles, sintonícenlos en sus canales oficiales. Aunque, a decir verdad, yo prefiero verlo jugando billar en algún bar de Escazú… ¡con permiso de la redacción, por supuesto!
Lo que sí está clarísimo es que ninguna institución pública, ni siquiera el Ministerio de Hacienda, puede usar sus redes sociales para mostrar fotos o videos de las inauguraciones. Ni siquiera un clip corto del corte de cinta. ¡Nada de nada! Porque sino, estaría faltando a la neutralidad que exige la ley. ¡Que se guardan las cámaras y esperen a que termine la campaña, por favor!
Por otro lado, sí pueden hacer conferencias de prensa, siempre y cuando no usen las plataformas digitales para repartir fragmentos o imágenes de lo que digan. Entonces, ¿qué hacemos? ¿Nos quedamos esperando a que publiquen las transcripciones en la página web? ¡Qué desesperación! Parece que quieren que nos olvidemos de todo lo que están haciendo.
Y no crean que esto es solo para el Poder Ejecutivo. La restricción se extiende a TODAS las instituciones del gobierno, desde la CCSS hasta el INCOE. ¡Todos tienen que mantenerse quietecitos durante la campaña! Que no anden soltando información que pueda influir en el voto de la gente. ¡Eso sería un fajazo al proceso democrático!
En fin, vaya brete se han puesto con estas reglas. Ahora toca esperar a ver cómo se adapta el Gobierno a esta nueva realidad. ¿Será que van a renunciar a las inauguraciones por completo o van a buscarle la manera de promocionar sus logros sin romper las normas? Dicen por ahí que “el que quiere celeste, que le den morado”. ¿Ustedes creen que el Gobierno va a acatar al pie de la letra las indicaciones del TSE o vamos a ver alguna jugadita turbia? Déjenme sus opiniones en el foro, ¡quiero saber qué piensan ustedes sobre esta movida!
Según nos cuentan, el Gobierno fue a preguntar al Tribunal cómo podían seguir festejando nuevas carreteras y escuelas durante la campaña electoral. Imaginen la sorpresa cuando les dijeron que sí pueden abrir cosas, pero que ni loco pueden transmitirlo por las plataformas del Estado. ¡Un pura charada si te pensabas ver al Presidente estrenando puente en vivo!
Y es que, como bien saben, desde que se llama a votar, las cosas cambian. El artículo 142 del Código Electoral, que es un verdadero diccionario de prohibiciones, dice que ya no se puede andar bombardeando a la población con propaganda gubernamental. Eso aplica hasta después de las votaciones, incluso si hay que ir a una segunda vuelta. ¡Imagínate tener que aguantar eso por más tiempo!
Pero ojo, que no todo es prohibición. Parece que la Presidencia puede seguir transmitiendo sus apariciones frente a los órganos de control. Así que, si quieren ver al Presidente sudando la gota gorda respondiendo preguntas difíciles, sintonícenlos en sus canales oficiales. Aunque, a decir verdad, yo prefiero verlo jugando billar en algún bar de Escazú… ¡con permiso de la redacción, por supuesto!
Lo que sí está clarísimo es que ninguna institución pública, ni siquiera el Ministerio de Hacienda, puede usar sus redes sociales para mostrar fotos o videos de las inauguraciones. Ni siquiera un clip corto del corte de cinta. ¡Nada de nada! Porque sino, estaría faltando a la neutralidad que exige la ley. ¡Que se guardan las cámaras y esperen a que termine la campaña, por favor!
Por otro lado, sí pueden hacer conferencias de prensa, siempre y cuando no usen las plataformas digitales para repartir fragmentos o imágenes de lo que digan. Entonces, ¿qué hacemos? ¿Nos quedamos esperando a que publiquen las transcripciones en la página web? ¡Qué desesperación! Parece que quieren que nos olvidemos de todo lo que están haciendo.
Y no crean que esto es solo para el Poder Ejecutivo. La restricción se extiende a TODAS las instituciones del gobierno, desde la CCSS hasta el INCOE. ¡Todos tienen que mantenerse quietecitos durante la campaña! Que no anden soltando información que pueda influir en el voto de la gente. ¡Eso sería un fajazo al proceso democrático!
En fin, vaya brete se han puesto con estas reglas. Ahora toca esperar a ver cómo se adapta el Gobierno a esta nueva realidad. ¿Será que van a renunciar a las inauguraciones por completo o van a buscarle la manera de promocionar sus logros sin romper las normas? Dicen por ahí que “el que quiere celeste, que le den morado”. ¿Ustedes creen que el Gobierno va a acatar al pie de la letra las indicaciones del TSE o vamos a ver alguna jugadita turbia? Déjenme sus opiniones en el foro, ¡quiero saber qué piensan ustedes sobre esta movida!
