¡Ay, Dios mío! Resulta que Wall Street anda más cascarrabias que gallo en día de tormenta. Parece que los números redondos que venían mostrando las bolsas neoyorquinas empezaron a darles cositas, y ahora andan bajando, bajando... Un poquito sí, pero bajando, diay.
Según nos dicen los gringos, la bronca viene porque las empresas tecnológicas, esas que siempre estaban dando la vuelta al mundo en ganancias, están cotizando demasiado alto. Como si fueran la panacea de todos los males económicos. Pero, claro, también hay que echarle la culpa a esos jueguitos políticos con los aranceles que le dejó Donaldo ahí, porque ahora el Tribunal Supremo parece que anda revisándolos con lupa. Qué lío, ¿eh?
Aquí en Costa Rica, eso de que Wall Street baje puede sonar lejano, como la luna, pero no se crean que no nos pega. Cuando allá se mueven los mercados, nosotros sentimos el temblorcito, ¿cachai? Inviertiendo en bonos, en acciones… Todo está conectado, como la red de tuberías de AyA.
Y hablando de economía nacional, los créditos en colones y dólares han ido frenando su ritmo de crecimiento, y eso tampoco pinta muy bonito. A ver, no es que seamos defensores de irnos a endeudar hasta las cejas, pero si las empresas no tienen acceso fácil a financiamiento, cómo esperan crecer, mándale. Y peor aún, los agricultores ya están organizándose para marchar porque sienten que el gobierno los ha dejado solos, qué pena.
Donde Hacienda tampoco se queda atrás, buscando maneras de cambiar algunas leyes para que funcione mejor la Tribunal Contencioso Administrativo (Tribu-CR). Quién sabe, tal vez así evitamos que se vayan unos millones al traste en demandas judiciales innecesarias. ¡Ojalá, por favor!
Pero bueno, pa’ alegrarle el día, los comerciantes andan optimistas y creen que la temporada alta les va a traer un buen movimiento de billeteras. Dicen que esperan un crecimiento de alrededor del 5%, pero yo creo que si llueve mucho, eso podría verse afectado. Ya saben, el clima tico es impredecible como político en campaña.
Mientras tanto, el INEC nos da otro golpe certero a la realidad: más de 124 mil personas se fueron del mercado laboral. Eso sí es una vara bien dura de tragar, pues indica que la cosa está apretada y muchos compas están buscando brete. Las estadísticas nunca cuentan toda la historia, pero estas cifras no dejan lugar a muchas interpretaciones optimistas, vamos.
Con todo esto, ¿creen que Costa Rica podrá capear el temporal económico y mantener la calma en medio de tanta incertidumbre mundial? ¿O estamos encaminados a vivir momentos más 'salados' de lo esperado en los próximos meses? ¡Déjenme sus opiniones en el foro, quiero saber qué piensa la gente!”,
Según nos dicen los gringos, la bronca viene porque las empresas tecnológicas, esas que siempre estaban dando la vuelta al mundo en ganancias, están cotizando demasiado alto. Como si fueran la panacea de todos los males económicos. Pero, claro, también hay que echarle la culpa a esos jueguitos políticos con los aranceles que le dejó Donaldo ahí, porque ahora el Tribunal Supremo parece que anda revisándolos con lupa. Qué lío, ¿eh?
Aquí en Costa Rica, eso de que Wall Street baje puede sonar lejano, como la luna, pero no se crean que no nos pega. Cuando allá se mueven los mercados, nosotros sentimos el temblorcito, ¿cachai? Inviertiendo en bonos, en acciones… Todo está conectado, como la red de tuberías de AyA.
Y hablando de economía nacional, los créditos en colones y dólares han ido frenando su ritmo de crecimiento, y eso tampoco pinta muy bonito. A ver, no es que seamos defensores de irnos a endeudar hasta las cejas, pero si las empresas no tienen acceso fácil a financiamiento, cómo esperan crecer, mándale. Y peor aún, los agricultores ya están organizándose para marchar porque sienten que el gobierno los ha dejado solos, qué pena.
Donde Hacienda tampoco se queda atrás, buscando maneras de cambiar algunas leyes para que funcione mejor la Tribunal Contencioso Administrativo (Tribu-CR). Quién sabe, tal vez así evitamos que se vayan unos millones al traste en demandas judiciales innecesarias. ¡Ojalá, por favor!
Pero bueno, pa’ alegrarle el día, los comerciantes andan optimistas y creen que la temporada alta les va a traer un buen movimiento de billeteras. Dicen que esperan un crecimiento de alrededor del 5%, pero yo creo que si llueve mucho, eso podría verse afectado. Ya saben, el clima tico es impredecible como político en campaña.
Mientras tanto, el INEC nos da otro golpe certero a la realidad: más de 124 mil personas se fueron del mercado laboral. Eso sí es una vara bien dura de tragar, pues indica que la cosa está apretada y muchos compas están buscando brete. Las estadísticas nunca cuentan toda la historia, pero estas cifras no dejan lugar a muchas interpretaciones optimistas, vamos.
Con todo esto, ¿creen que Costa Rica podrá capear el temporal económico y mantener la calma en medio de tanta incertidumbre mundial? ¿O estamos encaminados a vivir momentos más 'salados' de lo esperado en los próximos meses? ¡Déjenme sus opiniones en el foro, quiero saber qué piensa la gente!”,