Pues verán. Mi primer golpe en los huevos fue a los 13 o 14 años si no recuerdo mal. Fue jugando a fútbol y impidiendo que entrara un balón en la portería. Fue un balonazo en los huevos que me dejó en el suelo un buen rato. Y encima el balón acabo entrando. También he recibido golpes en los huevos en otras ocasiones; como el último, un rodillazo en los huevos.