Por ahí dicen que de recuerdos solo el pasado se debería de recordarlos, pero es tanta la decepción como la incapacidad que siento, que por ahí he andado recopilando información del por que de tanta la mención del mundial del 90, lo cual debemos de notar o antes y el después de ese mundial, veamos>
1990: Héroes e inmortales
Yo era apenas un niño de nueve años de edad cuando la Selección Nacional obtuvo su clasificación al Mundial de Italia 1990, un hecho sin precedentes en la historia futbolística del país; el competir con los mejores equipos del mundo era el sueño que todos los ticos anhelábamos, pero a la vez en el ambiente existía incertidumbre por lo que realmente podríamos demostrar en aquel reto extraordinario y desafiante.
Para ese momento, no entendía de esquemas ni tácticas de fútbol, pero crecí viendo jugar a Evaristo Coronado, Juan Cayasso, Gabelo Conejo, Claudio Jara, Hernán Médford, Alejandro González, Leonidas Flores y tantos otros que por espacio no menciono. Gracias a ellos hoy adoro el fútbol más que cualquier otra cosa; si usted tiene mi edad entenderá lo que le digo y si es de otras épocas y vio a jugadores como “Cuico” Bejanaro, “Catato” Cordero, Juan Ulloa, “Príncipe” Hernández, Leonel Hernández o Javier “Zurdo” Jiménez, también comprenderá mi sentir.
El proceso al Mundial fue tormentoso y difícil, pero a la vez era la primera ocasión en que la dirigencia nacional asumía el compromiso eliminatorio con tanta antelación. El primer paso fue nombrar al uruguayo exmundialista de 1974 Gustavo De Simone como técnico hacia finales de 1987; después de varios fogueos contra equipos como Municipal de Guatemala, Corea del Sur, Brondby de Dinamarca y otros tantos llegó la primera prueba frente a Panamá en 1988. Como siempre y al arranque de toda competencia hay expectación y emoción; sin embargo, la tarde del 17 de julio de 1988 fue gris para la afición nacional que tuvo que conformarse con un agridulce empate frente a los canaleros en Alajuela. Dos semanas después nos jugábamos el todo por el todo en el Estadio Revolución (actual Rommel Fernández), al final del juego un gol de Cayasso y otro de Médford mantenían nuestras ilusiones intactas.
Según el calendario de la CONCACAF nuestro siguiente adversario sería el hasta ese momento siempre respetado y temido cuadro mexicano; más el destino estuvo de nuestra parte cuando la FIFA decidió sancionar a los aztecas marginándolos de toda competencia internacional a nivel de selecciones por adulterar las fechas de nacimiento de jugadores de sus niveles inferiores durante un torneo menor. Así las cosas llegamos a la pentagonal que iniciamos en Guatemala con el pie izquierdo, perdiendo por la mínima diferencia; la caída hizo “rodar” la cabeza de De Simone quien sería substituido por el binomio integrado por Marvin Rodríguez y Antonio Moyano, ambos estrategas con reconocida experiencia en el medio.
Vino el segundo choque ante Guatemala, el cual se ganó, lo mismo que ante Estados Unidos, ambos juegos en casa. No obstante, la salida a San Louis Missouri en tierra gringa empañó nuestro ascenso debido a un nefasto y descarado arbitraje de un señor de apellido Martínez, quien sin ninguna razón de peso anuló un gol legítimo a Marchena. Perdimos un partido que como mínimo debimos haber empatado. Esa fue la última caída y también la última vez que el español Moyano Reyna se sentó en el banquillo ya que optó por renunciar y dejar como capitán del barco al señor Rodríguez, quien encaró el resto de la eliminatoria con gran suceso logrando clasificar a la Tricolor por primera vez a un mundial luego de choques de vértigo ante Trinidad y Tobago y frente a El Salvador en aquel recordado duelo del 16 de julio de 1989 con un gol agónico y postrimero de Pastor Fernández.
Después de las celebraciones vino el tiempo de la preparación. Al conocer que nuestros rivales serían Suecia, Escocia y Brasil se temía lo peor y la preocupación creció aún más, luego de resultados no muy halagadores en Estados Unidos ante Uruguay, Unión Soviética y Atlas de México a inicios de 1990. El presidente de la FEDEFUTBOL, Isaac Sasso, quien acababa de suceder en el cargo a Longino Soto, decidió relevar del banco a Marvin Rodríguez y contrató al serbio Velibor Milutinovic; técnico que llevó a México a cuartos de final en 1986.
El nuevo seleccionador tomó algunas decisiones incomprensibles para la prensa y la afición; entre ellas, excluir a piezas claves del proceso como Coronado, Enrique Díaz, Leoni Flores y Álvaro Solano. Ante el escepticismo “Bora” se llevó a sus jugadores a las montañas de Heredia para una concentración de varios días partiendo posteriormente hacia Estados Unidos y Europa donde, alejados de Costa Rica, tuvieran una preparación adecuada y óptima sin ninguna preocupación. Los tres meses de “Bora” al frente de la Sele no fueron fáciles; en los choques de fogueo abundaron las derrotas; más a la hora de la hora nuestros muchachos respondieron con orgullo, ambición y amor a la camiseta; puntos que resultaron claves del éxito para silenciar a los vikingos suecos y a las gaitas escocesas cayendo únicamente ante el “Scratch du Oro” por la mínima diferencia y avanzar de manera histórica a octavos de final donde posteriormente Checoslovaquia nos eliminó.
Fueron días de fiesta para el país entero. Nuestra pequeña nación ya no era reconocida solamente por tener un Premio Nóbel de la Paz y por no tener ejército sino también por su fútbol alegre, vistoso y lleno de coraje. Aquellos 22 jugadores y cuerpo técnico llenaron de orgullo a toda la afición y a los que éramos niños nos brindaron un verdadero ejemplo de sacrificio, humildad y espíritu de lucha.
¡Así se escribió la gesta y así la hemos revivido!
Labor Tica:
Eliminatoria:
Panamá 1-1 y 2-0 (Jara) (Cayasso, Médford)
Guatemala 0-1 y 2-1 (Flores, Coronado)
Estados Unidos 1-0 y 0-1 (Rhoden)
Trinidad y Tobago 1-1 y 1-0 (Coronado) (Cayasso)
El Salvador 4-2 y 1-0 (L. Flores 2, Hidalgo, Cayasso)
Copa Mundial:
Escocia 1-0 (Cayasso)
Brasil 0-1
Suecia 2-1 (Flóres, Médford)
Checoslovaquia 1-4 (González)
Jugadores del Proceso desde su inicio
En negrita los jugadores que llegaron al Mundial
Luis G. Conejo, Alejandro González, Marcos Rojas, Jorge A. Hidalgo, Hermidio Barrantes, Miguel Segura, Róger Flores, Enrique Díaz, Héctor Marchena, Mauricio Montero, Edwin Salazar, Benigno Guido, Germán Chavarría, Vladimir Quesada, Freddy Munguío, Alexander Sáenz, José C. Cháves, Marvin Obando, Martín Jiménez, Joaquín Guillén, Miguel Vargas, Marco T. Hidalgo, Ronald Marín, Luis R. Ledezma, Floyd Guthrie, Jorge Badilla, Alfredo Contreras, Tomás Segura, Jorge Chévez, Ricardo Chacón, Geovanny Jara, Rónald González, Alexis Camacho, José Chan, Alexandre Guimaraes, Juan Cayasso, Oscar Ramírez, Carlos M. Hidalgo, Álvaro Solano, Enrique Rivers, Franklin Williams, Luis Fernández, Roy Myers, Miguel Davis, Róger Gómez, Carlos Velásquez, Evaristo Coronado, Hernán Médford, Claudio Jara, Pastor Fernández, Leonidas Flores, Sivianny Rodríguez, Víctor Badilla, Luis Quirós, José Jaikel.
...si eso fue un poco de la historia de lo que se vivio en previo y los resultados del mundial de 1990...como vemos, que tenian esos man que los de ahora no se les ve?...si se ;ores amor por la camiseta, verguenza y sobre todo tatuada los colores de la bandera en lo mas intimo de su corazon, sera que los jugadores de ahora de la sele no vivieron esos tiempos , donde talvez su mayor sueÑo era jugar en la seleccion nacional, representarla con orgullo y verguenza, sera que a ruiz se le fue esa ilusion y sobre todo el coraje que nos an ense;ados jugadores ya mencionados, que les digo mis compa;eros del foro, y sin animo de afender, que hasta el mismp chunche o hasta el mismo menford se pondrian la camisa de la sele y lo harian mejor, aun con sus años encima, si señores por que estos man aman la camiseta sobre toda la cosa, DE ESTE TIPO DE JUGADORES ME SIENTO ORGULLOSO; como lo he dicho varias veces en algunos temas del foro; no importa perder si no es EN LA FORMA QUE SE PIERDE una costa rica desfigurada, sin aliento de ganador, sin espiritu, sin saber a lo que juegan, un equipo parecido a piezas de ajedrez tiradas en el suelo SIN NINGUNA IDENTIDAD...señores y amigos del foro sin mas decir, una ultima frase: me siento DESILUSIONADO
compañeros yo se que estamos por que se nos reviente el hígado, pero deja tu comentario, mas que un comentario un aporte sea este negativo o positivo
1990: Héroes e inmortales
Yo era apenas un niño de nueve años de edad cuando la Selección Nacional obtuvo su clasificación al Mundial de Italia 1990, un hecho sin precedentes en la historia futbolística del país; el competir con los mejores equipos del mundo era el sueño que todos los ticos anhelábamos, pero a la vez en el ambiente existía incertidumbre por lo que realmente podríamos demostrar en aquel reto extraordinario y desafiante.
Para ese momento, no entendía de esquemas ni tácticas de fútbol, pero crecí viendo jugar a Evaristo Coronado, Juan Cayasso, Gabelo Conejo, Claudio Jara, Hernán Médford, Alejandro González, Leonidas Flores y tantos otros que por espacio no menciono. Gracias a ellos hoy adoro el fútbol más que cualquier otra cosa; si usted tiene mi edad entenderá lo que le digo y si es de otras épocas y vio a jugadores como “Cuico” Bejanaro, “Catato” Cordero, Juan Ulloa, “Príncipe” Hernández, Leonel Hernández o Javier “Zurdo” Jiménez, también comprenderá mi sentir.
El proceso al Mundial fue tormentoso y difícil, pero a la vez era la primera ocasión en que la dirigencia nacional asumía el compromiso eliminatorio con tanta antelación. El primer paso fue nombrar al uruguayo exmundialista de 1974 Gustavo De Simone como técnico hacia finales de 1987; después de varios fogueos contra equipos como Municipal de Guatemala, Corea del Sur, Brondby de Dinamarca y otros tantos llegó la primera prueba frente a Panamá en 1988. Como siempre y al arranque de toda competencia hay expectación y emoción; sin embargo, la tarde del 17 de julio de 1988 fue gris para la afición nacional que tuvo que conformarse con un agridulce empate frente a los canaleros en Alajuela. Dos semanas después nos jugábamos el todo por el todo en el Estadio Revolución (actual Rommel Fernández), al final del juego un gol de Cayasso y otro de Médford mantenían nuestras ilusiones intactas.
Según el calendario de la CONCACAF nuestro siguiente adversario sería el hasta ese momento siempre respetado y temido cuadro mexicano; más el destino estuvo de nuestra parte cuando la FIFA decidió sancionar a los aztecas marginándolos de toda competencia internacional a nivel de selecciones por adulterar las fechas de nacimiento de jugadores de sus niveles inferiores durante un torneo menor. Así las cosas llegamos a la pentagonal que iniciamos en Guatemala con el pie izquierdo, perdiendo por la mínima diferencia; la caída hizo “rodar” la cabeza de De Simone quien sería substituido por el binomio integrado por Marvin Rodríguez y Antonio Moyano, ambos estrategas con reconocida experiencia en el medio.
Vino el segundo choque ante Guatemala, el cual se ganó, lo mismo que ante Estados Unidos, ambos juegos en casa. No obstante, la salida a San Louis Missouri en tierra gringa empañó nuestro ascenso debido a un nefasto y descarado arbitraje de un señor de apellido Martínez, quien sin ninguna razón de peso anuló un gol legítimo a Marchena. Perdimos un partido que como mínimo debimos haber empatado. Esa fue la última caída y también la última vez que el español Moyano Reyna se sentó en el banquillo ya que optó por renunciar y dejar como capitán del barco al señor Rodríguez, quien encaró el resto de la eliminatoria con gran suceso logrando clasificar a la Tricolor por primera vez a un mundial luego de choques de vértigo ante Trinidad y Tobago y frente a El Salvador en aquel recordado duelo del 16 de julio de 1989 con un gol agónico y postrimero de Pastor Fernández.
Después de las celebraciones vino el tiempo de la preparación. Al conocer que nuestros rivales serían Suecia, Escocia y Brasil se temía lo peor y la preocupación creció aún más, luego de resultados no muy halagadores en Estados Unidos ante Uruguay, Unión Soviética y Atlas de México a inicios de 1990. El presidente de la FEDEFUTBOL, Isaac Sasso, quien acababa de suceder en el cargo a Longino Soto, decidió relevar del banco a Marvin Rodríguez y contrató al serbio Velibor Milutinovic; técnico que llevó a México a cuartos de final en 1986.
El nuevo seleccionador tomó algunas decisiones incomprensibles para la prensa y la afición; entre ellas, excluir a piezas claves del proceso como Coronado, Enrique Díaz, Leoni Flores y Álvaro Solano. Ante el escepticismo “Bora” se llevó a sus jugadores a las montañas de Heredia para una concentración de varios días partiendo posteriormente hacia Estados Unidos y Europa donde, alejados de Costa Rica, tuvieran una preparación adecuada y óptima sin ninguna preocupación. Los tres meses de “Bora” al frente de la Sele no fueron fáciles; en los choques de fogueo abundaron las derrotas; más a la hora de la hora nuestros muchachos respondieron con orgullo, ambición y amor a la camiseta; puntos que resultaron claves del éxito para silenciar a los vikingos suecos y a las gaitas escocesas cayendo únicamente ante el “Scratch du Oro” por la mínima diferencia y avanzar de manera histórica a octavos de final donde posteriormente Checoslovaquia nos eliminó.
Fueron días de fiesta para el país entero. Nuestra pequeña nación ya no era reconocida solamente por tener un Premio Nóbel de la Paz y por no tener ejército sino también por su fútbol alegre, vistoso y lleno de coraje. Aquellos 22 jugadores y cuerpo técnico llenaron de orgullo a toda la afición y a los que éramos niños nos brindaron un verdadero ejemplo de sacrificio, humildad y espíritu de lucha.
¡Así se escribió la gesta y así la hemos revivido!
Labor Tica:
Eliminatoria:
Panamá 1-1 y 2-0 (Jara) (Cayasso, Médford)
Guatemala 0-1 y 2-1 (Flores, Coronado)
Estados Unidos 1-0 y 0-1 (Rhoden)
Trinidad y Tobago 1-1 y 1-0 (Coronado) (Cayasso)
El Salvador 4-2 y 1-0 (L. Flores 2, Hidalgo, Cayasso)
Copa Mundial:
Escocia 1-0 (Cayasso)
Brasil 0-1
Suecia 2-1 (Flóres, Médford)
Checoslovaquia 1-4 (González)
Jugadores del Proceso desde su inicio
En negrita los jugadores que llegaron al Mundial
Luis G. Conejo, Alejandro González, Marcos Rojas, Jorge A. Hidalgo, Hermidio Barrantes, Miguel Segura, Róger Flores, Enrique Díaz, Héctor Marchena, Mauricio Montero, Edwin Salazar, Benigno Guido, Germán Chavarría, Vladimir Quesada, Freddy Munguío, Alexander Sáenz, José C. Cháves, Marvin Obando, Martín Jiménez, Joaquín Guillén, Miguel Vargas, Marco T. Hidalgo, Ronald Marín, Luis R. Ledezma, Floyd Guthrie, Jorge Badilla, Alfredo Contreras, Tomás Segura, Jorge Chévez, Ricardo Chacón, Geovanny Jara, Rónald González, Alexis Camacho, José Chan, Alexandre Guimaraes, Juan Cayasso, Oscar Ramírez, Carlos M. Hidalgo, Álvaro Solano, Enrique Rivers, Franklin Williams, Luis Fernández, Roy Myers, Miguel Davis, Róger Gómez, Carlos Velásquez, Evaristo Coronado, Hernán Médford, Claudio Jara, Pastor Fernández, Leonidas Flores, Sivianny Rodríguez, Víctor Badilla, Luis Quirós, José Jaikel.
...si eso fue un poco de la historia de lo que se vivio en previo y los resultados del mundial de 1990...como vemos, que tenian esos man que los de ahora no se les ve?...si se ;ores amor por la camiseta, verguenza y sobre todo tatuada los colores de la bandera en lo mas intimo de su corazon, sera que los jugadores de ahora de la sele no vivieron esos tiempos , donde talvez su mayor sueÑo era jugar en la seleccion nacional, representarla con orgullo y verguenza, sera que a ruiz se le fue esa ilusion y sobre todo el coraje que nos an ense;ados jugadores ya mencionados, que les digo mis compa;eros del foro, y sin animo de afender, que hasta el mismp chunche o hasta el mismo menford se pondrian la camisa de la sele y lo harian mejor, aun con sus años encima, si señores por que estos man aman la camiseta sobre toda la cosa, DE ESTE TIPO DE JUGADORES ME SIENTO ORGULLOSO; como lo he dicho varias veces en algunos temas del foro; no importa perder si no es EN LA FORMA QUE SE PIERDE una costa rica desfigurada, sin aliento de ganador, sin espiritu, sin saber a lo que juegan, un equipo parecido a piezas de ajedrez tiradas en el suelo SIN NINGUNA IDENTIDAD...señores y amigos del foro sin mas decir, una ultima frase: me siento DESILUSIONADO

compañeros yo se que estamos por que se nos reviente el hígado, pero deja tu comentario, mas que un comentario un aporte sea este negativo o positivo