¡Quiiiiiiibo, pura vida, mi gente del Foro! Aquí les va la data fresca: resulta que todos esos electrodomésticos viejos que tenemos guardados en la bodega, esos celulares rotos que juramos arreglar 'algún día'… pues podrían estar llenos de cosas valiosas, sí señor. No me digan que no se imaginaban esto, ¡qué carga!
La movida es que, aprovechando el Día Internacional del RAEE (Residuos de Aparatos Eléctricos y Electrónicos), la campaña RAEE-tón 2025 nos está llamando la atención sobre los materiales críticos que hay dentro de estos aparatos. Estamos hablando de metales raros y tierras raras, esas cositas que hacen posible toda la tecnología moderna. Imaginen tener un montón de iPhones viejos y sacarles componentes para hacer nuevos smartphones… suena a ciencia ficción, pero ya lo andan haciendo, diay.
Costa Rica está medio atrasada en este brete. Actualmente, apenas estamos recuperando el 8,6% de estos residuos, ¡qué despiche! Pero bueno, siempre hay margen de mejora. Lo bueno es que tenemos casi 400 puntos de recolección autorizados por todo el país, así que no hay excusas para seguir tirando estas cosas a la basura. Además, varias municipalidades están organizando campañas especiales, así que pónganse a buscar información en sus zonas.
Ricardo Morales, de la Unidad de Salud Ambiental del Ministerio de Salud, nos explica que “este octubre, convocamos a la ciudadanía a mirar los dispositivos olvidados en casa con nuevos ojos: lo que muchas veces consideramos ‘desechos’, pueden contener minerales que impulsan el desarrollo tecnológico sostenible”. En otras palabras, pues, que podríamos estar contribuyendo a un futuro más verde si simplemente nos molestáramos en llevar nuestros RAEE al lugar correcto.
Entonces, ¿qué podemos llevar a esos puntos de recolección? Pues prácticamente cualquier cosa electrónica que ya no usemos: desde la nevera vieja hasta el celular agrietado. También aceptan equipos de audio y video, computadoras, laptops, impresoras… básicamente, todo lo que funciona con electricidad y ya quedó obsoleto. Solo estén atentos porque algunos lugares podrían pedir coordinación previa para los electrodomésticos grandes, así que infórmense bien antes de ir corriendo con la lavadora rota.
Lo más importante es que revisemos bien cajones, bodegas y cuartos de almacenamiento. Limpiemos los aparatos, borremos toda la información personal que tengan (fotos, contraseñas, etc.) y listos para entregarlos. Pueden encontrar el mapa de recolección de RAEE en internet, en el link que les dejo aquí abajo. Es súper fácil, mi gente. Y para las empresas, colegios y organizaciones que quieran ayudar, también pueden inscribirse como puntos de acopio. ¡A sumar esfuerzos, chunches!
Esta iniciativa no solo ayuda a cuidar el medio ambiente, sino que también puede fortalecer nuestra economía. Al recuperar estos materiales, reducimos la necesidad de extraerlos de la tierra, lo cual genera un impacto ambiental menor y disminuye nuestra dependencia de otros países. Además, impulsa la economía circular, creando empleos y oportunidades para empresas locales dedicadas al reciclaje y la recuperación de materiales.
Ahora sí, vamos directo al grano: ¿Ustedes tienen alguna pila de RAEE acumulándose en casa? ¿Qué tan conscientes son del valor de los minerales que contienen estos aparatos? Y lo más importante... ¿Se animan a participar en la campaña RAEE-tón 2025 y darle una segunda oportunidad a esos aparatos viejos? ¡Déjenme sus opiniones en los comentarios! A ver qué dicen mis compas del foro sobre este tema… ¿ya le pusieron las pilas?
La movida es que, aprovechando el Día Internacional del RAEE (Residuos de Aparatos Eléctricos y Electrónicos), la campaña RAEE-tón 2025 nos está llamando la atención sobre los materiales críticos que hay dentro de estos aparatos. Estamos hablando de metales raros y tierras raras, esas cositas que hacen posible toda la tecnología moderna. Imaginen tener un montón de iPhones viejos y sacarles componentes para hacer nuevos smartphones… suena a ciencia ficción, pero ya lo andan haciendo, diay.
Costa Rica está medio atrasada en este brete. Actualmente, apenas estamos recuperando el 8,6% de estos residuos, ¡qué despiche! Pero bueno, siempre hay margen de mejora. Lo bueno es que tenemos casi 400 puntos de recolección autorizados por todo el país, así que no hay excusas para seguir tirando estas cosas a la basura. Además, varias municipalidades están organizando campañas especiales, así que pónganse a buscar información en sus zonas.
Ricardo Morales, de la Unidad de Salud Ambiental del Ministerio de Salud, nos explica que “este octubre, convocamos a la ciudadanía a mirar los dispositivos olvidados en casa con nuevos ojos: lo que muchas veces consideramos ‘desechos’, pueden contener minerales que impulsan el desarrollo tecnológico sostenible”. En otras palabras, pues, que podríamos estar contribuyendo a un futuro más verde si simplemente nos molestáramos en llevar nuestros RAEE al lugar correcto.
Entonces, ¿qué podemos llevar a esos puntos de recolección? Pues prácticamente cualquier cosa electrónica que ya no usemos: desde la nevera vieja hasta el celular agrietado. También aceptan equipos de audio y video, computadoras, laptops, impresoras… básicamente, todo lo que funciona con electricidad y ya quedó obsoleto. Solo estén atentos porque algunos lugares podrían pedir coordinación previa para los electrodomésticos grandes, así que infórmense bien antes de ir corriendo con la lavadora rota.
Lo más importante es que revisemos bien cajones, bodegas y cuartos de almacenamiento. Limpiemos los aparatos, borremos toda la información personal que tengan (fotos, contraseñas, etc.) y listos para entregarlos. Pueden encontrar el mapa de recolección de RAEE en internet, en el link que les dejo aquí abajo. Es súper fácil, mi gente. Y para las empresas, colegios y organizaciones que quieran ayudar, también pueden inscribirse como puntos de acopio. ¡A sumar esfuerzos, chunches!
Esta iniciativa no solo ayuda a cuidar el medio ambiente, sino que también puede fortalecer nuestra economía. Al recuperar estos materiales, reducimos la necesidad de extraerlos de la tierra, lo cual genera un impacto ambiental menor y disminuye nuestra dependencia de otros países. Además, impulsa la economía circular, creando empleos y oportunidades para empresas locales dedicadas al reciclaje y la recuperación de materiales.
Ahora sí, vamos directo al grano: ¿Ustedes tienen alguna pila de RAEE acumulándose en casa? ¿Qué tan conscientes son del valor de los minerales que contienen estos aparatos? Y lo más importante... ¿Se animan a participar en la campaña RAEE-tón 2025 y darle una segunda oportunidad a esos aparatos viejos? ¡Déjenme sus opiniones en los comentarios! A ver qué dicen mis compas del foro sobre este tema… ¿ya le pusieron las pilas?