¡Aguante! Ya estamos casi en campaña y la Universidad de Costa Rica (UCR) le está poniendo pañuelos a los aspirantes a la Presidencia. El lunes 19 de enero, si quieren, van a tener un escenario pa' darse a conocer frente a los ciudadanos. Se dice que ya mandaron invitaciones a unas veinte personas que andan buscando el palco de Morazán, aunque todavía no hay confirmación oficial de quiénes se animarán a ir a sudar la gota gorda.
La verdad es que esto de los debates universitarios tiene una tradición bien larga por acá. Siempre ha sido un espacio importante pa’ que la gente pueda escuchar directamente a los candidatos y ver qué onda con sus propuestas. Esta vez, la cita está programada de 6:00 a 9:00 de la noche en el Aula Magna, un lugar emblemático de la UCR, así que prepárense para escuchar algunas verdades incómodas y quizás hasta alguna bronca interesante. Uno esperaría que los candidatos sean conscientes del privilegio de este espacio.
Ahora, parece que los temas centrales que van a tocar en este debate tienen que ver con cosas que nos tocan la vida a todos los ticos. Hablan de educación pública – y vaya que necesitamos darle una vuelta a eso –, seguridad social y la querida Caja Costarricense del Seguro Social, que anda con más problemas que un tamal sin masa, y por supuesto, seguridad ciudadana y cómo mantenernos tranquilos en nuestras casas y calles. Temas pesados, diay, pero necesarios.
Pa’ organizar todo esto, han pensado en tres bloques bien estructurados. Primero, van a abrir el micrófono a ciudadanos comunes y corrientes y también a académicos, para que hagan las preguntas difíciles y les saquen los colores a los candidatos. Luego, va a venir la parte más picante: confrontaciones cara a cara entre las diferentes duplas de candidatos. Imaginen el arroz con pollo que se va a armar ahí, con cada quien defendiendo sus ideas a capa y espada. Y para terminar, cada candidato tendrá su oportunidad de dar un discurso final y dejar claro por qué deberían ganarse nuestro voto.
Algunos recuerdan que UNA también tiene su programa electoral y hasta dividieron la papeleta en tres debates. Pero bueno, cada quién hace lo suyo. Lo importante es que haya espacio para que la gente participe y pueda formarse su propia opinión. La UCR, al menos, está tratando de hacerlo bien, insistiendo en que se trata de un ejercicio de igualdad de condiciones y libertad de expresión, aunque saben que siempre habrá gente que intente buscarle la quinta pata al gato.
Lo que me da curiosidad es la intención de la UCR de promover un “voto informado, consciente y responsable”. Suena lindo en el papel, pero la realidad es que muchos de nosotros votamos por costumbre o porque alguien nos convence en la calle. Será que este debate realmente servirá para cambiar eso, o será otra pérdida de tiempo?
Y hablando de transparencia, se espera que el debate tenga transmisión por los medios de comunicación de la UCR, para que todos aquellos que no puedan asistir personalmente tengan la oportunidad de seguirlo desde casa. Esto es crucial, porque no todos tenemos la posibilidad de ir al Aula Magna, y es importante que la información esté disponible para todos. Además, la UCR quiere que esto sea un espacio “para profundizar la discusión nacional sobre el Estado Social de Derecho”, lo que suena muy técnico, pero básicamente significa que quieren hablar de cómo mejorar nuestra sociedad y hacerla más justa para todos. ¡Qué tremenda vara!
En fin, la expectativa está ahí. Veremos si los candidatos aprovechan esta oportunidad para demostrar su valía y ofrecer propuestas reales que le sirvan a este país. Ahora dime, tú qué opinas: ¿crees que un debate universitario puede realmente influir en el voto de los costarricenses, o es simplemente un espectáculo más en medio de la campaña?
La verdad es que esto de los debates universitarios tiene una tradición bien larga por acá. Siempre ha sido un espacio importante pa’ que la gente pueda escuchar directamente a los candidatos y ver qué onda con sus propuestas. Esta vez, la cita está programada de 6:00 a 9:00 de la noche en el Aula Magna, un lugar emblemático de la UCR, así que prepárense para escuchar algunas verdades incómodas y quizás hasta alguna bronca interesante. Uno esperaría que los candidatos sean conscientes del privilegio de este espacio.
Ahora, parece que los temas centrales que van a tocar en este debate tienen que ver con cosas que nos tocan la vida a todos los ticos. Hablan de educación pública – y vaya que necesitamos darle una vuelta a eso –, seguridad social y la querida Caja Costarricense del Seguro Social, que anda con más problemas que un tamal sin masa, y por supuesto, seguridad ciudadana y cómo mantenernos tranquilos en nuestras casas y calles. Temas pesados, diay, pero necesarios.
Pa’ organizar todo esto, han pensado en tres bloques bien estructurados. Primero, van a abrir el micrófono a ciudadanos comunes y corrientes y también a académicos, para que hagan las preguntas difíciles y les saquen los colores a los candidatos. Luego, va a venir la parte más picante: confrontaciones cara a cara entre las diferentes duplas de candidatos. Imaginen el arroz con pollo que se va a armar ahí, con cada quien defendiendo sus ideas a capa y espada. Y para terminar, cada candidato tendrá su oportunidad de dar un discurso final y dejar claro por qué deberían ganarse nuestro voto.
Algunos recuerdan que UNA también tiene su programa electoral y hasta dividieron la papeleta en tres debates. Pero bueno, cada quién hace lo suyo. Lo importante es que haya espacio para que la gente participe y pueda formarse su propia opinión. La UCR, al menos, está tratando de hacerlo bien, insistiendo en que se trata de un ejercicio de igualdad de condiciones y libertad de expresión, aunque saben que siempre habrá gente que intente buscarle la quinta pata al gato.
Lo que me da curiosidad es la intención de la UCR de promover un “voto informado, consciente y responsable”. Suena lindo en el papel, pero la realidad es que muchos de nosotros votamos por costumbre o porque alguien nos convence en la calle. Será que este debate realmente servirá para cambiar eso, o será otra pérdida de tiempo?
Y hablando de transparencia, se espera que el debate tenga transmisión por los medios de comunicación de la UCR, para que todos aquellos que no puedan asistir personalmente tengan la oportunidad de seguirlo desde casa. Esto es crucial, porque no todos tenemos la posibilidad de ir al Aula Magna, y es importante que la información esté disponible para todos. Además, la UCR quiere que esto sea un espacio “para profundizar la discusión nacional sobre el Estado Social de Derecho”, lo que suena muy técnico, pero básicamente significa que quieren hablar de cómo mejorar nuestra sociedad y hacerla más justa para todos. ¡Qué tremenda vara!
En fin, la expectativa está ahí. Veremos si los candidatos aprovechan esta oportunidad para demostrar su valía y ofrecer propuestas reales que le sirvan a este país. Ahora dime, tú qué opinas: ¿crees que un debate universitario puede realmente influir en el voto de los costarricenses, o es simplemente un espectáculo más en medio de la campaña?
