¡Ay, Dios mío! Ya empezó el chaparrón, raza. El Instituto Meteorológico Nacional (IMN) nos soltó la bomba este lunes: aguaceros pesadísimos y tormentas eléctricas se vienen con ganas al Pacífico Sur. A ver si nos preparamos bien porque esto parece que no va a ser broma.
Según los expertos del IMN, la combinación de la Zona de Convergencia Intertropical –esa señora siempre trae sorpresas– y las altas temperaturas de la mañana han creado el ambiente perfecto para que se formen nubes cargadas y descarguen a cántaros. Esto significa que, aunque no llueva a mares en todas partes, sí hay que estar atentos porque en algunos sectores puede caer agua como baldes, mánganlo.
"Se pronostican aguaceros dispersos acompañados de tormenta eléctrica, con probabilidad de lluvias de fuerte intensidad en lugares puntuales del Pacífico Sur", rezaba el comunicado oficial del IMN. Suena serio, ¿verdad? Más aún considerando que ya estamos viendo las consecuencias de lluvias anteriores en varias comunidades. Hay que ponerle atención, parce.
Y ni hablar del tema de los suelos. El IMN también nos recordó que la zona sur todavía anda empapada, con niveles de saturación que van desde el 80% hasta casi el 95%. Esto quiere decir que la tierra ya no puede absorber más agua y cualquier lluvia extra podría provocar inundaciones y deslizamientos. ¡Uy, qué preocupación!
En especial, las zonas montañosas de Pérez Zeledón, Golfito, Puerto Jiménez, Osa, Corredores y Coto Brus están en la mira. Ahí es donde el peligro es mayor, así que si vives por esos lados, redobla la precaución. Revisa techos, asegura objetos que puedan volar con el viento y mantente informado de las alertas meteorológicas. No vaya a ser que te agarre desprevenido el diluvio.
Pero bueno, no todo es malo, ¿eh? Para otras partes del país, el panorama es un poco más tranquilo. En la montaña del Pacífico Central y cerca de las costas, se esperan algunas lloviznas aisladas. Al norte y oeste del Valle Central, y en las montañas de la Zona Norte, pueden caer algunas gotitas rápidas con tormenta ocasional. Aunque, fíjate, el IMN dice que podrían acumularse entre 15 y 40 milímetros de lluvia en seis horas, e incluso llegar hasta los 65 milímetros en el Pacífico Sur. ¡Eso ya es bastante, diay!
Lo que sí preocupa es el estado de las alcantarillas. Parece que muchas todavía están colgadas por las lluvias pasadas y cualquier aguacero intenso podría causar taponamientos e inundaciones locales. Así que, si vives en una zona propensa a estos problemas, ten a mano un chunche para quitar hojas y basura que obstruyan el paso del agua. ¡Mejor prevenir que lamentar, como dicen por ahí!
Ahora, dígame vos, ¿qué medidas piensa tomar para proteger su hogar y su familia ante este temporal? ¿Cree que las autoridades deberían hacer más para mejorar la infraestructura de drenaje en las zonas vulnerables del país? Comparta sus ideas y experiencias en los comentarios, vamos a construir una comunidad informada y resiliente para enfrentar estos desafíos climáticos... ¡y a cuidarnos unos a otros!
Según los expertos del IMN, la combinación de la Zona de Convergencia Intertropical –esa señora siempre trae sorpresas– y las altas temperaturas de la mañana han creado el ambiente perfecto para que se formen nubes cargadas y descarguen a cántaros. Esto significa que, aunque no llueva a mares en todas partes, sí hay que estar atentos porque en algunos sectores puede caer agua como baldes, mánganlo.
"Se pronostican aguaceros dispersos acompañados de tormenta eléctrica, con probabilidad de lluvias de fuerte intensidad en lugares puntuales del Pacífico Sur", rezaba el comunicado oficial del IMN. Suena serio, ¿verdad? Más aún considerando que ya estamos viendo las consecuencias de lluvias anteriores en varias comunidades. Hay que ponerle atención, parce.
Y ni hablar del tema de los suelos. El IMN también nos recordó que la zona sur todavía anda empapada, con niveles de saturación que van desde el 80% hasta casi el 95%. Esto quiere decir que la tierra ya no puede absorber más agua y cualquier lluvia extra podría provocar inundaciones y deslizamientos. ¡Uy, qué preocupación!
En especial, las zonas montañosas de Pérez Zeledón, Golfito, Puerto Jiménez, Osa, Corredores y Coto Brus están en la mira. Ahí es donde el peligro es mayor, así que si vives por esos lados, redobla la precaución. Revisa techos, asegura objetos que puedan volar con el viento y mantente informado de las alertas meteorológicas. No vaya a ser que te agarre desprevenido el diluvio.
Pero bueno, no todo es malo, ¿eh? Para otras partes del país, el panorama es un poco más tranquilo. En la montaña del Pacífico Central y cerca de las costas, se esperan algunas lloviznas aisladas. Al norte y oeste del Valle Central, y en las montañas de la Zona Norte, pueden caer algunas gotitas rápidas con tormenta ocasional. Aunque, fíjate, el IMN dice que podrían acumularse entre 15 y 40 milímetros de lluvia en seis horas, e incluso llegar hasta los 65 milímetros en el Pacífico Sur. ¡Eso ya es bastante, diay!
Lo que sí preocupa es el estado de las alcantarillas. Parece que muchas todavía están colgadas por las lluvias pasadas y cualquier aguacero intenso podría causar taponamientos e inundaciones locales. Así que, si vives en una zona propensa a estos problemas, ten a mano un chunche para quitar hojas y basura que obstruyan el paso del agua. ¡Mejor prevenir que lamentar, como dicen por ahí!
Ahora, dígame vos, ¿qué medidas piensa tomar para proteger su hogar y su familia ante este temporal? ¿Cree que las autoridades deberían hacer más para mejorar la infraestructura de drenaje en las zonas vulnerables del país? Comparta sus ideas y experiencias en los comentarios, vamos a construir una comunidad informada y resiliente para enfrentar estos desafíos climáticos... ¡y a cuidarnos unos a otros!