Bueno, pues mire usted, los gringos siempre andan inventando cosas nuevas, ¿verdad? Esta vez tocó la inteligencia artificial (IA), que parece que es la onda ahora. Uno de esos señores que le dieron un premio Nobel a la economía –donde ya se sabe, están bien inteligentes–, anda diciendo que esta vaina podría echarnos a todos a la calle. Imagínese eso, ¡a buscarle qué hacer pa’ comer!
El tipo, que se llama Peter Howitt y es canadiense, dice que aunque la IA tiene unas posibilidades increíbles, tenemos que ponerle candados, porque puede destruir trabajos a montón. Lo dijo en medio de toda una conversación sobre cómo estas tecnologías cambian el panorama económico y, claro, afectan a la bolsa de trabajo. Como si no tuviéramos suficientes problemas, ¿eh?
Ahora, resulta que este señor ha estado estudiando esto de la “destrucción creativa” con otro colega francés, Philippe Aghion. La idea es que cuando sale algo nuevo y mejor al mercado, las empresas que vendían lo viejo se quedan viendo las manos. Es como cuando llegó el celular y nadie usaba más los teléfonos fijos, ¡qué lata! Pero este hombre dice que todavía no saben exactamente cómo va a afectar todo esto.
Lo interesante es que compara esta situación con otras veces que la tecnología cambió el mundo. Dice que pasó con las telecomunicaciones en los ’90 y con la llegada de la electricidad y el vapor. En esas ocasiones, la tecnología terminó generando más empleos de los que destruyó, pero él no sabe si pasará igual con la IA. ¡Un poco de incertidumbre nunca viene mal, eh!
El señor Howitt, que ya tiene sus 79 añitos, afirma que estamos viviendo un momento histórico, como cuando se descubrieron cosas enormes para la humanidad. Ahora, la pregunta es cómo vamos a hacer para que la IA nos ayude en lugar de quitarnos el sustento. Él mismo dice que no tiene la respuesta, y eso da bastante que pensar, ¿no cree?
Y hablando de respuestas, recuerde que hace muchos años, cuando él y Aghion empezaron a investigar sobre la destrucción creativa, tardaron cinco años en convencer a alguien para que les publicara el artículo. Pero ellos sentían que estaban dando con algo importante. ¡Imagínate la perseverancia! Igual, dicen que aunque demore, lo cierto es que al final... se descubre qué se busca. En este caso, a ver cómo nos salvamos con esta IA.
En Costa Rica, la cosa se pone más apretada, porque muchos de nuestros trabajos dependen de sectores que podrían automatizarse fácilmente. Piénselo: call centers, turismo, incluso algunas áreas de servicios públicos. Si la IA puede hacer el trabajo de muchas personas, ¿qué hacemos nosotros? Necesitamos prepararnos, capacitar a la gente en nuevas habilidades y buscar formas creativas de adaptarnos a este nuevo escenario. De lo contrario, nos vamos a llevar una torta.
Así que ahí lo tienen, mis queridos compañeros del Foro. Un Nobel nos está alertando sobre el peligro de que la inteligencia artificial nos quite el trabajo. ¿Ustedes creen que deberíamos empezar a tomar clases de programación o aprender a cultivar plátanos orgánicos, por si acaso? Díganme, ¿cuál creen que es la estrategia más efectiva para enfrentar este desafío y asegurar nuestro futuro laboral en la era de la IA?
El tipo, que se llama Peter Howitt y es canadiense, dice que aunque la IA tiene unas posibilidades increíbles, tenemos que ponerle candados, porque puede destruir trabajos a montón. Lo dijo en medio de toda una conversación sobre cómo estas tecnologías cambian el panorama económico y, claro, afectan a la bolsa de trabajo. Como si no tuviéramos suficientes problemas, ¿eh?
Ahora, resulta que este señor ha estado estudiando esto de la “destrucción creativa” con otro colega francés, Philippe Aghion. La idea es que cuando sale algo nuevo y mejor al mercado, las empresas que vendían lo viejo se quedan viendo las manos. Es como cuando llegó el celular y nadie usaba más los teléfonos fijos, ¡qué lata! Pero este hombre dice que todavía no saben exactamente cómo va a afectar todo esto.
Lo interesante es que compara esta situación con otras veces que la tecnología cambió el mundo. Dice que pasó con las telecomunicaciones en los ’90 y con la llegada de la electricidad y el vapor. En esas ocasiones, la tecnología terminó generando más empleos de los que destruyó, pero él no sabe si pasará igual con la IA. ¡Un poco de incertidumbre nunca viene mal, eh!
El señor Howitt, que ya tiene sus 79 añitos, afirma que estamos viviendo un momento histórico, como cuando se descubrieron cosas enormes para la humanidad. Ahora, la pregunta es cómo vamos a hacer para que la IA nos ayude en lugar de quitarnos el sustento. Él mismo dice que no tiene la respuesta, y eso da bastante que pensar, ¿no cree?
Y hablando de respuestas, recuerde que hace muchos años, cuando él y Aghion empezaron a investigar sobre la destrucción creativa, tardaron cinco años en convencer a alguien para que les publicara el artículo. Pero ellos sentían que estaban dando con algo importante. ¡Imagínate la perseverancia! Igual, dicen que aunque demore, lo cierto es que al final... se descubre qué se busca. En este caso, a ver cómo nos salvamos con esta IA.
En Costa Rica, la cosa se pone más apretada, porque muchos de nuestros trabajos dependen de sectores que podrían automatizarse fácilmente. Piénselo: call centers, turismo, incluso algunas áreas de servicios públicos. Si la IA puede hacer el trabajo de muchas personas, ¿qué hacemos nosotros? Necesitamos prepararnos, capacitar a la gente en nuevas habilidades y buscar formas creativas de adaptarnos a este nuevo escenario. De lo contrario, nos vamos a llevar una torta.
Así que ahí lo tienen, mis queridos compañeros del Foro. Un Nobel nos está alertando sobre el peligro de que la inteligencia artificial nos quite el trabajo. ¿Ustedes creen que deberíamos empezar a tomar clases de programación o aprender a cultivar plátanos orgánicos, por si acaso? Díganme, ¿cuál creen que es la estrategia más efectiva para enfrentar este desafío y asegurar nuestro futuro laboral en la era de la IA?
