Maes, acaba de salir la famosa Encuesta de Expectativas de Empleo de Manpower para el cierre del 2025 y, para serles honesta, me dejó con un sentimiento medio raro. Es como cuando uno va a la soda, pide un casado y le sirven un bistec buenísimo, pero el arroz está un toque masudo. Diay, ¿uno se queja o agradece? La vara es que el titular dice que un 35% de los empleadores planea contratar gente. A primera vista suena bien, ¿no? Más de un tercio de las empresas buscando personal es una señal de movimiento. El pero, y siempre hay un pero, es que ese número representa una frenadita de seis puntos comparado con el trimestre pasado. O sea, sí, el carro sigue andando, pero como que alguien le metió un poquito el freno.
Ahora, antes de que nos pongamos a llorar sobre la leche derramada, aquí viene la parte del bistec jugoso. A nivel mundial, Costa Rica sigue jugando en las grandes ligas. ¡Somos el cuarto país con mejores perspectivas de contratación en todo el planeta! ¡Qué nivel! No solo eso, sino que superamos el promedio global por 12 puntos. O sea, mientras en el resto del mundo la cosa puede estar más socada, aquí seguimos dando la talla y posicionándonos a cachete. Este dato es el que nos salva la tanda y demuestra que, a pesar de la pequeña desaceleración interna, el país sigue siendo un imán para la inversión y un lugar donde las empresas quieren crecer. No es vara, estar en el top 5 mundial de cualquier cosa positiva siempre será motivo para sacar pecho.
Y bueno, si nos metemos a ver quiénes son los que están jalando la carreta del brete, la película se pone todavía más interesante. Como ya es casi costumbre, los sectores de Ciencias de la Vida y Salud, y Finanzas y Bienes Raíces son los que mandan. Estos maes andan con expectativas de contratación del 47% y 46% respectivamente. Son, sin duda, unos cargas en la generación de empleo de calidad en el país. Si usted está en esas áreas o está pensando qué estudiar, ahí es. Claro, hasta los más cargas tuvieron su bajonazo comparado con el trimestre anterior, pero el crecimiento que han tenido en el último año es una salvajada. Es como si hubieran corrido una maratón y ahora solo estuvieran bajando el ritmo para tomar aire, pero siguen kilómetros por delante del resto.
La cosa también cambia dependiendo de dónde viva uno. Si andan buscando brete, parece que Alajuela es la tierra prometida con un 42% de intenciones de contratación. ¡Los mangos están con todo! Le siguen de cerca Cartago y Guanacaste, que también pintan bastante bien. Y otro detalle clave es el tamaño de la empresa: las compañías grandes (de 250 a 999 empleados) son las más optimistas y las que más planean expandir sus planillas. En cambio, las pymes, esas que son el verdadero motor del día a día de este país, están un poco más tímidas, con un 28%. Esto nos dice mucho sobre dónde se está concentrando el crecimiento y quiénes la están pulseando un poco más para salir adelante.
Entonces, ¿cuál es el resumen de todo este enredo de números? Que la situación del empleo en Costa Rica es una vara compleja. Por un lado, tenemos un puesto de honor a nivel mundial y sectores que son una locomotora. Por otro, una leve pero notable desaceleración que nos obliga a no dormirnos en los laureles. No es un escenario para entrar en pánico, pero tampoco para tirar cohetes y hacer fiesta. Es más bien un llamado a ponerle atención a las tendencias y a seguir pulseándola. Pero diay, ¿ustedes qué opinan? ¿Sienten ese optimismo en la calle o es puro cuento de encuesta? ¿Hay brete o está ruda la vara? ¡Los leo!
Ahora, antes de que nos pongamos a llorar sobre la leche derramada, aquí viene la parte del bistec jugoso. A nivel mundial, Costa Rica sigue jugando en las grandes ligas. ¡Somos el cuarto país con mejores perspectivas de contratación en todo el planeta! ¡Qué nivel! No solo eso, sino que superamos el promedio global por 12 puntos. O sea, mientras en el resto del mundo la cosa puede estar más socada, aquí seguimos dando la talla y posicionándonos a cachete. Este dato es el que nos salva la tanda y demuestra que, a pesar de la pequeña desaceleración interna, el país sigue siendo un imán para la inversión y un lugar donde las empresas quieren crecer. No es vara, estar en el top 5 mundial de cualquier cosa positiva siempre será motivo para sacar pecho.
Y bueno, si nos metemos a ver quiénes son los que están jalando la carreta del brete, la película se pone todavía más interesante. Como ya es casi costumbre, los sectores de Ciencias de la Vida y Salud, y Finanzas y Bienes Raíces son los que mandan. Estos maes andan con expectativas de contratación del 47% y 46% respectivamente. Son, sin duda, unos cargas en la generación de empleo de calidad en el país. Si usted está en esas áreas o está pensando qué estudiar, ahí es. Claro, hasta los más cargas tuvieron su bajonazo comparado con el trimestre anterior, pero el crecimiento que han tenido en el último año es una salvajada. Es como si hubieran corrido una maratón y ahora solo estuvieran bajando el ritmo para tomar aire, pero siguen kilómetros por delante del resto.
La cosa también cambia dependiendo de dónde viva uno. Si andan buscando brete, parece que Alajuela es la tierra prometida con un 42% de intenciones de contratación. ¡Los mangos están con todo! Le siguen de cerca Cartago y Guanacaste, que también pintan bastante bien. Y otro detalle clave es el tamaño de la empresa: las compañías grandes (de 250 a 999 empleados) son las más optimistas y las que más planean expandir sus planillas. En cambio, las pymes, esas que son el verdadero motor del día a día de este país, están un poco más tímidas, con un 28%. Esto nos dice mucho sobre dónde se está concentrando el crecimiento y quiénes la están pulseando un poco más para salir adelante.
Entonces, ¿cuál es el resumen de todo este enredo de números? Que la situación del empleo en Costa Rica es una vara compleja. Por un lado, tenemos un puesto de honor a nivel mundial y sectores que son una locomotora. Por otro, una leve pero notable desaceleración que nos obliga a no dormirnos en los laureles. No es un escenario para entrar en pánico, pero tampoco para tirar cohetes y hacer fiesta. Es más bien un llamado a ponerle atención a las tendencias y a seguir pulseándola. Pero diay, ¿ustedes qué opinan? ¿Sienten ese optimismo en la calle o es puro cuento de encuesta? ¿Hay brete o está ruda la vara? ¡Los leo!
