¡Ay, pata! Qué lío se armó en el medio político. Resulta que la Doña Laura Fernández, candidata de Pueblo Soberano, anda diciendo que el Presidente Chaves estaría dispuesto a meterle mano a su gobierno el año 2026, y el propio Rodri salió a negar todo, negando con fervor, vamos. En una conferencia de prensa, se mostró bastante harto de que usen su nombre para propósitos electorales, dando a entender que ya no puede ni respirar tranquilo sin que alguien quiera colgarle una vara a él.
El mandatario, visiblemente fastidiado con las preguntas, lanzó unas frases como sacadas de un manual de diplomacia, asegurando que ni siquiera han tenido una plática en privado sobre el tema. Dijo que varios candidatos andan buscando hacerlo partícipe de sus proyectos, aunque recalcó que no hay ningún acuerdo concreto con nadie, ni siquiera si le ofrecieran un trabajito jugoso. Vamos, que no le interesa andar metiéndose en esas broncas por ahora. Declaró que no iba a mencionar a todos los diecinueve, porque ya no tenían tiempo... ¡qué excusa!
Pero la verdad, el asunto huele a 'chinchorro'. Porque no es la primera vez que Fernández se acerca al oficialismo. Desde que dejó el cargo de Ministra de Planificación y Presidencia, se ha vuelto bastante constante en aparecer en eventos gubernamentales, como si estuviera tratando de pegarle al barco del Presidente. Uno hasta piensa que se le puede estar jalando una torta intentando parecer cercana a las fuentes del poder.
Recordemos que allá por el 20 de septiembre, Fernández mandó un comunicado donde expresaba su intención de contar con Chaves como Ministro de la Presidencia y coordinador de la continuidad. ¡Directo al grano! Y no solo eso, sino que ha aprovechado todas las oportunidades para estar presente en giras presidenciales, como aquella ida a Puntarenas donde Rocío Ramírez le soltó la bronca por usar recursos públicos para su campaña. ¡Qué momento!
La señora Fernández no precisamente ha sido discreta. Ha asistido a actos que originalmente no estaban en la agenda de Chaves, llegando incluso a compartir abrazos y momentos agradables con el Presidente. Uno recuerda ese abrazo en el Grand Gala Parade de Limón, ¡hasta pareció que eran compinches viejos!
Y no olvidémonos del rol del Partido Pueblo Soberano. Su líder, Martín Contreras, ya le dio el espaldarazo a Fernández como la candidata ideal para mantener el gobierno actual. Todo indica que hay una estrategia muy definida detrás de estas apariciones públicas, aunque el Presidente se resista a admitirlo abiertamente. Parece que Pueblo Soberano está buscando una forma de amarrar a Chaves a su proyecto político, aunque él esté haciendo cara bonita.
Algunos analistas políticos sugieren que la insistencia de Fernández podría deberse a la necesidad de legitimar su candidatura, aprovechándose del capital político que aún posee el Presidente. Otros aseguran que Chaves podría estar jugando un juego estratégico, permitiendo que Fernández se acerque para luego distanciarse y demostrar su independencia. La verdad, es un brete tratar de descifrar qué pasa por la cabeza de estos polígrafos.
Ahora bien, dejando de lado las especulaciones, me pregunto: ¿cree usted que la insistencia de Laura Fernández en acercarse al Presidente Chaves es una estrategia política legítima, o simplemente una muestra de desesperación por obtener popularidad? ¿Debería el Presidente ser más transparente con sus intenciones o seguir manteniendo la calma y negándolo todo?
El mandatario, visiblemente fastidiado con las preguntas, lanzó unas frases como sacadas de un manual de diplomacia, asegurando que ni siquiera han tenido una plática en privado sobre el tema. Dijo que varios candidatos andan buscando hacerlo partícipe de sus proyectos, aunque recalcó que no hay ningún acuerdo concreto con nadie, ni siquiera si le ofrecieran un trabajito jugoso. Vamos, que no le interesa andar metiéndose en esas broncas por ahora. Declaró que no iba a mencionar a todos los diecinueve, porque ya no tenían tiempo... ¡qué excusa!
Pero la verdad, el asunto huele a 'chinchorro'. Porque no es la primera vez que Fernández se acerca al oficialismo. Desde que dejó el cargo de Ministra de Planificación y Presidencia, se ha vuelto bastante constante en aparecer en eventos gubernamentales, como si estuviera tratando de pegarle al barco del Presidente. Uno hasta piensa que se le puede estar jalando una torta intentando parecer cercana a las fuentes del poder.
Recordemos que allá por el 20 de septiembre, Fernández mandó un comunicado donde expresaba su intención de contar con Chaves como Ministro de la Presidencia y coordinador de la continuidad. ¡Directo al grano! Y no solo eso, sino que ha aprovechado todas las oportunidades para estar presente en giras presidenciales, como aquella ida a Puntarenas donde Rocío Ramírez le soltó la bronca por usar recursos públicos para su campaña. ¡Qué momento!
La señora Fernández no precisamente ha sido discreta. Ha asistido a actos que originalmente no estaban en la agenda de Chaves, llegando incluso a compartir abrazos y momentos agradables con el Presidente. Uno recuerda ese abrazo en el Grand Gala Parade de Limón, ¡hasta pareció que eran compinches viejos!
Y no olvidémonos del rol del Partido Pueblo Soberano. Su líder, Martín Contreras, ya le dio el espaldarazo a Fernández como la candidata ideal para mantener el gobierno actual. Todo indica que hay una estrategia muy definida detrás de estas apariciones públicas, aunque el Presidente se resista a admitirlo abiertamente. Parece que Pueblo Soberano está buscando una forma de amarrar a Chaves a su proyecto político, aunque él esté haciendo cara bonita.
Algunos analistas políticos sugieren que la insistencia de Fernández podría deberse a la necesidad de legitimar su candidatura, aprovechándose del capital político que aún posee el Presidente. Otros aseguran que Chaves podría estar jugando un juego estratégico, permitiendo que Fernández se acerque para luego distanciarse y demostrar su independencia. La verdad, es un brete tratar de descifrar qué pasa por la cabeza de estos polígrafos.
Ahora bien, dejando de lado las especulaciones, me pregunto: ¿cree usted que la insistencia de Laura Fernández en acercarse al Presidente Chaves es una estrategia política legítima, o simplemente una muestra de desesperación por obtener popularidad? ¿Debería el Presidente ser más transparente con sus intenciones o seguir manteniendo la calma y negándolo todo?