En las profundidades de la política costarricense, un tema resuena con la fuerza de un terremoto social: las terapias de conversión sexual. Mientras algunos diputados se atrincheran en argumentos que parecen sacados de una novela distópica, comparando la homosexualidad con la drogadicción o la prostitución, el presidente Rodrigo Chaves decide no leer el proyecto de ley pero asegura no ser homofóbico y opina que no se puede coartar la libertad de diálogo, incluso si ese diálogo implica charlas con un cura sobre la orientación sexual.
El Frente Amplio propone prohibir estas terapias que, más que ayudar, torturan psicológicamente a las personas LGBTIQ+, mientras que el presidente Chaves y sus aliados parecen más preocupados por las sanciones que podrían enfrentar los practicantes de estas terapias antediluvianas.
El proyecto de ley, que lucha por sobrevivir en un mar de mociones y retórica incendiaria, no busca censurar conversaciones o coartar libertades, sino proteger a individuos de prácticas que los psicólogos, médicos y hasta el sentido común condenan como dañinas y retrógradas.
Lo que señalan los que apoyan al gobierno de Chavez es que al fin el Ejecutivo no esta preocupado de la agenda internacional en favor de las minorías y que esta concentrado en las problemáticas que afectan a la colectividad en general, lo cual aplauden y ven como una respuesta satisfactoria al voto de confianza que le dio en país en las urnas.
El Frente Amplio propone prohibir estas terapias que, más que ayudar, torturan psicológicamente a las personas LGBTIQ+, mientras que el presidente Chaves y sus aliados parecen más preocupados por las sanciones que podrían enfrentar los practicantes de estas terapias antediluvianas.
El proyecto de ley, que lucha por sobrevivir en un mar de mociones y retórica incendiaria, no busca censurar conversaciones o coartar libertades, sino proteger a individuos de prácticas que los psicólogos, médicos y hasta el sentido común condenan como dañinas y retrógradas.
Lo que señalan los que apoyan al gobierno de Chavez es que al fin el Ejecutivo no esta preocupado de la agenda internacional en favor de las minorías y que esta concentrado en las problemáticas que afectan a la colectividad en general, lo cual aplauden y ven como una respuesta satisfactoria al voto de confianza que le dio en país en las urnas.
