textos de los primeros padres de la Iglesia sobre ello....
Aqui le pongo un resumen de corazones.org, quedo un poco largo pero creo que vale la pena lo leas para saber que se creia en la Iglesia primitiva;
Santa Perpetua, martirizada en el 203.
“Sin ninguna demora, en esa misma noche, esto se me mostró en una visión. Yo vi a Dinocrate saliendo de un lugar sombrío, donde estaban también otras personas, y él estaba reseco y muy sediento, con una apariencia sucia y pálida, con la herida de su rostro que tenía cuando había muerto. Dinocrate había sido mi hermano en la carne, hace siete años, quien murió de una terrible enfermedad…Pero yo confié que mi oración había ayudado a su sufrimiento, y oré por él cada día hasta que nosotros pasamos al campo de prisioneros…hice mi oración por mi hermano día y noche, gimiendo y lamentando para que me fuera concedido. Entonces, un día, estando todavía prisioneros esto se me mostró. Vi que el lugar que había observado previamente sombrío estaba ahora iluminado, y Dinocrate, con un cuerpo limpio y bien vestido, estaba buscando algo para refrescarse. Y donde había estado la herida, yo vi una cicatriz; y esa piscina que había visto antes, vi sus niveles descendidos hasta el ombligo del muchacho. Y uno extraía agua de la tina incesantemente, y cerca de la orilla había una copa llena de agua; y Dinocrate se acerco y empezó a beber de ella, y la copa no falló. Y cuando él estaba satisfecho, se fue del agua a jugar felizmente, como lo hacen los niños y entonces desperté. Entonces entendí que sido trasladado del lugar del castigo”
Abercio, compuso su propio epitafio antes de morir, finales del siglo II o comienzos del siglo III.
“Que cada uno que esté de acuerdo con esto y quien lo entienda ore por Abercio”
Los Hechos de Pablo y Tecla, escrito en el siglo II (año 160) narran la historia de una conversa que se convirtió al escuchar las predicaciones de San Pablo y luego de deshacer el compromiso con su novio se dedica a asistir a Pablo en la evangelización. Leemos allí una oración de intercesión para que una cristiana fallecida sea trasladada al lugar de los justos.
“Y después de la exhibición, Tryfaena nuevamente la recibe. Su hija Falconilla había muerto, y dijo a ella en sueños: Madre, tú deberías tener esta extranjera Tecla en mi lugar, para que ore por mí, y yo pueda ser transferido a el lugar de los justos”
En Los Stromata o Tapices (Στρωματεις) habla de la purificación por “fuego” que sufre el alma posterior a la muerte cuando no ha alcanzado la completa santidad.
“Los mayores tormentos son asignados al creyente porque la Justicia de Dios es buena y su bondad es justa y, estos castigos completan el curso de la expiación y purificación de cada uno”
“Pero nosotros decimos que el fuego santifica no la carne, sino las almas pecadoras; refiriéndose no al fuego vulgar sino al de la sabiduría, que penetra el alma que pasa por el fuego”
Se encuentran en los escritos de Tertuliano numerosas y claras referencias del purgatorio. Entre ellas podrían mencionarse
De anima (Sobre el alma) en donde habla de la purificación del alma después de la muerte. En
De carnis resurrectione llega al extremo de afirmar que solo los mártires van a vivir directamente a presencia de Dios. En
De monogamia (La monogamia) habla de cómo las oraciones por los difuntos pueden ayudarles, y en
De corona (La corona) menciona la costumbre de la Iglesia de celebrar la Eucaristía por el descanso eterno de los difuntos.
“ En una palabra, ya que por este calabozo que nos enseña el Evangelio entendemos el infierno, ya que “por esta deuda, que hay que pagar hasta el último maravedí,” comprendemos que es necesario purificarse en esos mismos lugares de las faltas más ligeras”
“Al dejar su cuerpo, nadie va inmediatamente a vivir a la presencia del Señor, excepto por la prerrogativa del martirio, pues entonces adquiere una morada en el paraíso, no en las regiones inferiores”
“Ciertamente, ella ruega por el alma de su marido. Pide que durante este intervalo él pueda hallar descanso y participar de la primera resurrección,. Ofrece cada año el sacrificio en el aniversario de su dormición”
“ Hacemos oblaciones por los difuntos en los días de aniversario de cada año”
San Cipriano,
“Una cosa es ser torturado con el largo sufrimiento por los pecados, para ser limpiado y completamente purgado por el fuego,
“…Ofrecemos por ellos sacrificios, como os acordáis, siempre que en la conmemoración anual celebramos los días de la pasión de los mártires.”
“…Víctor, puesto que contra la forma prescrita hace poco en el concilio por los sacerdotes, se ha atrevido a constituir tutor al presbítero Geminio Faustino, no hay por qué se haga entre vosotros la oblación por su muerte o se rece alguna oración por él en la Iglesia,.”
“Finalmente anotad también los días en que ellos mueren, para que podamos celebrar sus conmemoraciones entre las memorias de los mártires”
Origenes
Vea la cita de corintios que le puse anteriormente:
“Porque si sobre la base de Cristo, haz construido no sólo oro y plata sino piedras preciosas; sino también madera, caña o paja ¿qué es lo que esperas cuando el alma sea separada del cuerpo? ¿Entrarías al cielo con tu madera y caña y paja y de este modo manchar el reino de Dios? ¿O en razón de estos obstáculos podrías quedarte sin recibir premio por tu oro y plata y piedras preciosas? Ninguno de estos casos es justo. Queda entonces, que serás sometido al fuego que quemará los materiales livianos; para nuestro Dios, a aquellos que pueden comprender las cosas del cielo está llamado el fuego purificador
Lactancio hace referencia a la misma cita de corintios;
“Pero cuando él juzgue a los justos, él también los probará con fuego. Entonces aquellos cuyos pecados excedan en peso o número, se chamuscados por el fuego y quemados, pero aquellos a quienes la justicia y plena madurez de la virtud ha imbuido no percibirán ese fuego, porque ellos tienen algo de Dios en ellos mismos que repele y rechaza la violencia de la flama”
Efren de Siria solicita que oren por él y cita al libro de Macabeos;.
“acordaos de mí, hermanos. Los difuntos, en efecto, reciben ayuda gracias a la ofrenda que hacen los vivientes[…] Si tal como está escrito, los hombres de Matatías encargados del culto para el ejército, con las ofrendas, expiaron las culpas de aquellos que habían perecido y eran impíos por sus costumbres, cuánto más los sacerdotes de Cristo con sus santas ofrendas y sus oraciones expiarán los pecados de los difuntos”
Basilio el grande.
“Pienso que los valerosos atletas de Dios, los cuales durante toda su vida estuvieron frecuentemente en lucha contra enemigos invisibles, después de haber superado todos sus ataques al llegar al final de la vida serán examinados por el príncipe del siglo, a fin de que, si a consecuencia de las luchas, tienen algunas heridas o ciertas manchas o vestigios de pecado, sean detenidos; pero, si son hallados ilesos e incontaminados, como invictos y libres hallen el descanso junto a Cristo.”
Cirilo de Jerusalén.
“Recordamos también a todos los que ya durmieron”
Epitafio de Salamina.
“En cuanto a la recitación de los nombres de los difuntos, ¿qué puede haber que resulte más útil y que sea más oportuno y digno de alabanza, a fin de que los presentes se den cuenta de que los difuntos siguen viviendo y no han quedado reducidos a la nada, sino que siguen existiendo y viven junto al Señor”
Gregorio de Nisa.
“Cuando el renuncia a su cuerpo y la diferencia entre la virtud y el vicio es conocida, no puede acercarse a Dios hasta no haber purgado con fuego que limpia las manchas con las cuales su alma está infectada. Ese mismo fuego en otros cancelará la corrupción de materia y la propensión al mal”
Juan Crisostomo.
“No sin razón quedó determinado, mediante leyes establecidas por los apóstoles, que en la celebración de los sagrados e impresionantes misterios se haga memoria de los que ya han pasado de esta vida. Sabían, en efecto, que con ello los difuntos obtienen mucho fruto y consiguen gran provecho. Cuando todo el pueblo y los sacerdotes están con las manos extendidas y se está celebrando el santo sacrificio, ¿acaso Dios no se mostrará propicio con aquellos en favor de los cuales le imploramos? Se trata de aquellos que han muerto conservándose en la fe”
“Si los hijos de Job fueron purificados por el sacrificio de su padre, ¿por qué deberíamos dudar que cuando nosotros también ofrecemos por los que han partido, algún consuelo reciben?. Desde que Dios acostumbra conceder las peticiones de aquellos que piden por los demás… No nos cansemos de ayudar a los difuntos, ofreciendo en su nombre y orando por ellos”
Agustin de Hipona.
“Señor, no me arguyas en tu indignación. No me halle entre aquellos a quienes has de decir: id al fuego eterno que está preparado para el diablo y sus ángeles. Ni me corrijas en tu furor, sino purifícame en esta vida y vuélveme tal que ya no necesite de fuego corrector, atendiendo a los que han de salvarse, aunque, no obstante, como a través del fuego. ¿Por qué acontece esto si no es porque edifican aquí sobre el cimiento, leña, paja, heno? Si hubiesen edificado sobre el oro, plata, piedras preciosas, estarían libres de ambas clases de fuego, no sólo de aquel eterno, que ha de atormentar para siempre los impíos, sino también de aquel que corregirá a los que han de salvarse a través del fuego.”
.” Pero hay penas temporales que unos las padecen solamente en esta vida, otros después de la muerte y otros ahora y después.". De todas maneras, estas penas se sufren antes de aquel severísimo y definitivo juicio. “Mas no todos los que han de sufrir tras la muerte penas temporales caerán en las eternas“, que tendrán lugar después de juicio. Hará algunos, en efecto, a quienes se perdonará en el siglo futuro lo que no se les había perdonado en el presente; o sea, que no serán castigados con el suplicio eterno del siglo futuro, como hemos hablado más arriba”
“No se puede negar que las almas de los difuntos son aliviadas por la piedad de los parientes vivos, cuando se ofrece por ellas el sacrificio del Mediador o cuando se hacen limosnas en la Iglesia.”
“Leemos en los Libros de los Macabeos que fue ofrecido un sacrificio por los difuntos. Y, a pesar de que en ningún otro lugar del Antiguo Testamento se lee esto, no es poca la autoridad de la Iglesia universal que se refleja en esta costumbre, cuando, en las oraciones que el sacerdote ofrece al Señor, nuestro Dios, sobre el altar, tiene su momento especial la conmemoración de los difuntos”
Gregorio I Magno, ve en Mateo 12,32 una referencia implícita al purgatorio
“Tal como uno sale de este mundo, así se presenta al juicio. Pero se ha de creer que hay un fuego purificador para expiar las culpas leves antes del juicio. La razón para ello es que la Verdad afirma que si uno dice una blasfemia contra el Espíritu Santo, no se le perdonará ni en este siglo ni en el venidero. Con esta sentencia se da a entender que algunas culpas pueden perdonarse en este mundo y algunas en el otro, pues, lo que se niega respecto a unos, hay que comprender que se afirma en relación a otros. Sin embargo, tal como ya he dicho, se ha de creer que esto se refiere a pecados leves y de menor importancia.”