¡Aguántense todos! Ya casi estamos en época de votar y resulta que las papeletas para las elecciones del próximo año ya están encaminadas. Según el TSE, estarán prontas y listas antes de que nos demos cuenta, lo cual es bastante rápido teniendo en cuenta la cantidad de papeleta que toca imprimir. Se vienen unas elecciones interesantes, diay.
Como bien saben, estas elecciones son cruciales para definir quién va a dirigirnos durante los próximos cuatro años, tanto en la figura del Presidente como en la conformación de la Asamblea Legislativa. El Tribunal Supremo de Elecciones ha estado trabajando a toda máquina para asegurar que todo esté listo y funcionando de maravilla el día de las urnas, incluyendo la producción masiva de estos documentos tan importantes para nuestra democracia.
Y hablando de papeletas, los números son impresionantes. ¡Casi cuatro millones! Tenemos 3.731.788 papeletas destinadas para la elección presidencial, tamaño oficio y en blanca, preparadas para que marquemos con la cruz quien creemos que nos puede sacar adelante. Además, hay 3.664.518 papeletas para la elección de diputados, en celeste y tamaño carta, donde cada provincia tiene sus propios diseños particulares, incluyendo a los partidos locales que también quieren meterle mano. Esa pequeña diferencia en el número total es gracias a los compatriotas que viven afuera y solamente pueden ejercer su derecho al voto para elegir al Presidente; ahí no entra la opción de diputado.
Lo curioso es cómo se organizaron para hacer esto. Resulta que le dieron el brete al Sistema de Compras Públicas – SICOP, un contrato valorado en $1.758.788. No sé ustedes, pero yo me pregunto qué tanta eficiencia hubo realmente en esa licitación, aunque bueno, eso es otra vara. Lo importante es que el proceso de impresión anda a toda marcha, de lunes a viernes 12 horas, y los sábados hasta laburan 10 horas, todo bajo la atenta mirada del TSE y de la Fuerza Pública para evitar cualquier “despiche” que quieran intentar. Así que tranquilos, que no andan jugando con nosotros.
Pero vamos al grano, ¿cuánto es 3.7 millones de votantes? Pues, son muchísimos, lo que demuestra que todavía hay fe en el sistema democrático. Recordemos que Costa Rica irá a las urnas el 1 de febrero, donde definiremos 60 cargos: un Presidente, dos Vicepresidentes y 57 diputados. Y ojo, porque si ninguno de los candidatos a la presidencia logra alcanzar el 40% de los votos en primera vuelta, tendremos que ir a un balotaje. Eso sí sería interesante, ver cómo se ponen las cosas luego.
Siendo honestos, los cantones más poblados, San José y Alajuela, siempre dominan el panorama, seguidos por Desamparados, Cartago y San Carlos. Por otro lado, tenemos esos rinconcitos más apartados como Monteverde, Hojancha, San Mateo, Turrubares y Dota, que aunque tengan poca gente, también merecen ser escuchados. Y ni hablemos del voto en el extranjero, que este año suma 67.270 personas registradas, siendo Estados Unidos el país que más compatriotas votantes concentra. Ahí, efectivamente, se juega un papel importante.
La verdad es que este proceso es una muestra de la organización que podemos tener como país. Lograr imprimir y distribuir tantas papeletas en tiempo récord no es tarea fácil, y que el TSE esté encima vigilando todo es tranquilizador. Aunque claro, siempre queda el comentario de que se podría haber hecho más eficiente, más barato... ¡pero eso ya es otra historia! Lo importante es que estamos listos para participar activamente en la construcción de nuestro futuro.
Ahora dime, mi querido lector, ¿cree usted que este año veremos un balotaje para elegir al próximo Presidente? Y más allá del candidato individual, ¿qué considera que es lo más importante que debemos buscar en nuestros representantes?
Como bien saben, estas elecciones son cruciales para definir quién va a dirigirnos durante los próximos cuatro años, tanto en la figura del Presidente como en la conformación de la Asamblea Legislativa. El Tribunal Supremo de Elecciones ha estado trabajando a toda máquina para asegurar que todo esté listo y funcionando de maravilla el día de las urnas, incluyendo la producción masiva de estos documentos tan importantes para nuestra democracia.
Y hablando de papeletas, los números son impresionantes. ¡Casi cuatro millones! Tenemos 3.731.788 papeletas destinadas para la elección presidencial, tamaño oficio y en blanca, preparadas para que marquemos con la cruz quien creemos que nos puede sacar adelante. Además, hay 3.664.518 papeletas para la elección de diputados, en celeste y tamaño carta, donde cada provincia tiene sus propios diseños particulares, incluyendo a los partidos locales que también quieren meterle mano. Esa pequeña diferencia en el número total es gracias a los compatriotas que viven afuera y solamente pueden ejercer su derecho al voto para elegir al Presidente; ahí no entra la opción de diputado.
Lo curioso es cómo se organizaron para hacer esto. Resulta que le dieron el brete al Sistema de Compras Públicas – SICOP, un contrato valorado en $1.758.788. No sé ustedes, pero yo me pregunto qué tanta eficiencia hubo realmente en esa licitación, aunque bueno, eso es otra vara. Lo importante es que el proceso de impresión anda a toda marcha, de lunes a viernes 12 horas, y los sábados hasta laburan 10 horas, todo bajo la atenta mirada del TSE y de la Fuerza Pública para evitar cualquier “despiche” que quieran intentar. Así que tranquilos, que no andan jugando con nosotros.
Pero vamos al grano, ¿cuánto es 3.7 millones de votantes? Pues, son muchísimos, lo que demuestra que todavía hay fe en el sistema democrático. Recordemos que Costa Rica irá a las urnas el 1 de febrero, donde definiremos 60 cargos: un Presidente, dos Vicepresidentes y 57 diputados. Y ojo, porque si ninguno de los candidatos a la presidencia logra alcanzar el 40% de los votos en primera vuelta, tendremos que ir a un balotaje. Eso sí sería interesante, ver cómo se ponen las cosas luego.
Siendo honestos, los cantones más poblados, San José y Alajuela, siempre dominan el panorama, seguidos por Desamparados, Cartago y San Carlos. Por otro lado, tenemos esos rinconcitos más apartados como Monteverde, Hojancha, San Mateo, Turrubares y Dota, que aunque tengan poca gente, también merecen ser escuchados. Y ni hablemos del voto en el extranjero, que este año suma 67.270 personas registradas, siendo Estados Unidos el país que más compatriotas votantes concentra. Ahí, efectivamente, se juega un papel importante.
La verdad es que este proceso es una muestra de la organización que podemos tener como país. Lograr imprimir y distribuir tantas papeletas en tiempo récord no es tarea fácil, y que el TSE esté encima vigilando todo es tranquilizador. Aunque claro, siempre queda el comentario de que se podría haber hecho más eficiente, más barato... ¡pero eso ya es otra historia! Lo importante es que estamos listos para participar activamente en la construcción de nuestro futuro.
Ahora dime, mi querido lector, ¿cree usted que este año veremos un balotaje para elegir al próximo Presidente? Y más allá del candidato individual, ¿qué considera que es lo más importante que debemos buscar en nuestros representantes?
