¡Ay, Dios mío! Esto sí que cayó pesado para la comunidad de Pavas. Se armó un tremendo alboroto ayer cuando encontraron dos adultos mayores sin vida en una casa ubicada en el sector. Parece sacado de película, pero la realidad es que esto pasó acá, en nuestro país, entre nosotros. La bronca es que todo empezó porque los vecinos estaban preocupadísimos de no verlos por varios días.
Según fuentes cercanas al caso, todo comenzó el martes pasado cuando los vecinos empezaron a notar la ausencia de Don Alberto Gómez, de 98 años, y Don José Gómez, de 68. Estos señores eran bien queridos en el vecindario, siempre andaban revoloteando por ahí saludando, ayudándose mutuamente… gente tranquila, ¿me entienden? Cuando ya llevaba varios días sin verlos, algunos vecinos decidieron contactar a sus familiares para averiguar qué estaba pasando.
Los familiares, lógicamente, también estaban preocupados. No era común que los señores desaparecieran así sin avisar, especialmente considerando la edad de Don Alberto. Así que, sin perder tiempo, se dirigieron a la vivienda en Pavas para verificar si todo estaba bien. Al llegar, intentaron ingresar a la casa y, al confirmar que estaba cerrada con llave, solicitaron la asistencia de las autoridades. Lo que encontraron adentro fue, pues, bastante triste.
Cuando los equipos de emergencia llegaron al lugar, confirmaron lo que todos temían: ambos hombres se encontraban sin signos vitales. Era evidente que algo había salido muy mal. La escena era sombría, pero, según informó el Organismo de Investigación Judicial (OIJ), no se observaban señales de violencia ni heridas en los cuerpos. Esto complica un poco el panorama, porque ahora la investigación se centra en determinar la verdadera causa de la muerte.
Según fuentes cercanas al caso, todo comenzó el martes pasado cuando los vecinos empezaron a notar la ausencia de Don Alberto Gómez, de 98 años, y Don José Gómez, de 68. Estos señores eran bien queridos en el vecindario, siempre andaban revoloteando por ahí saludando, ayudándose mutuamente… gente tranquila, ¿me entienden? Cuando ya llevaba varios días sin verlos, algunos vecinos decidieron contactar a sus familiares para averiguar qué estaba pasando.
Los familiares, lógicamente, también estaban preocupados. No era común que los señores desaparecieran así sin avisar, especialmente considerando la edad de Don Alberto. Así que, sin perder tiempo, se dirigieron a la vivienda en Pavas para verificar si todo estaba bien. Al llegar, intentaron ingresar a la casa y, al confirmar que estaba cerrada con llave, solicitaron la asistencia de las autoridades. Lo que encontraron adentro fue, pues, bastante triste.
Cuando los equipos de emergencia llegaron al lugar, confirmaron lo que todos temían: ambos hombres se encontraban sin signos vitales. Era evidente que algo había salido muy mal. La escena era sombría, pero, según informó el Organismo de Investigación Judicial (OIJ), no se observaban señales de violencia ni heridas en los cuerpos. Esto complica un poco el panorama, porque ahora la investigación se centra en determinar la verdadera causa de la muerte.