¡Ay, Dios mío! La Comisión de Asuntos Hacendarios cerró las audiciones del presupuesto de 2026 este martes, y vaya que hubo movimiento. El Ministro interino, Luis Molina, andaba dando vueltas con ideas para rellenarle al erario, porque pa’ gastar siempre hay que buscar la plata, ¿no le parece?
La cosa es que ahora los diputados van a empezar a darle candela a las mociones de fondo, que arrancan este miércoles. Sesiones extra, debates acalorados… ya ven, el circo rolón anual. Parece que la presión está alta para sacar esto adelante antes de fin de año. Imagínate, quedarse sin presupuesto sería ¡una torta!
Y entre tanto parloteo, salió a relucir una idea que dejó a algunos diputados con la boca abierta: bajar el IVA al 10%. Pero ojo, que no es tan sencillo como eso. A cambio, tendrían que subir el impuesto a los bienes inmuebles en un 0,75%, ¿se imagina la movida? Un baile de números para intentar equilibrar la balanza, eh.
Molina fue bastante transparente al explicarlo. Dijo textualmente: “Estamos haciendo los números al proyecto que presentó la diputada Monserrat Ruiz... pero subir a 0,75% el impuesto a bienes inmuebles.” Pa'lante, dicen, se puede hacer, pero tienen que echarle ojo, revisar bien los cálculos para ver si realmente da el resultado esperado. Como dice el dicho, “medir dos veces cortar una vez”.
Pero espera, que hay más. La iniciativa de la diputada Ruiz –que se llama “Reforma para un IVA justo y un Catastro Moderno”– busca corregir lo que ella considera un “problema estructural” del sistema tributario. Según ella, hoy en día más del 70% de los ingresos fiscales provienen del IVA, que es un impuesto regresivo, es decir, pega más a los que menos tienen. ¡Qué carga!
La idea es mantener el 0,25% que actualmente reciben las municipalidades, pero crear una Agencia Catastral Nacional para actualizar los valores de los inmuebles y combatir la evasión. Así, los dueños de propiedades más lujosas aportarían más al Estado. Además, el aumento del impuesto a bienes inmuebles solo afectaría a las propiedades con un valor superior a 65 salarios base, para proteger a las viviendas de clase media y baja. ¡Eso sí que sería bueno!
Lo interesante de todo este brete es que involucra también a las municipalidades. Según Molina, existe una deuda importante en el pago del impuesto a bienes inmuebles a nivel local, y esta reforma podría ayudarles a recuperar esos fondos. Una colaboración entre el gobierno central y los ayuntamientos, ¿suena chiva, verdad?
Ahora, aquí va la pregunta para que nos digan qué piensan mis queridos foristas: ¿Ustedes creen que bajar el IVA al 10% y subir el impuesto a los bienes inmuebles es una medida justa y efectiva para mejorar la economía del país? ¿O prefieren seguir con el status quo, aunque siga pegando más a los bolsillos de la gente humilde? ¡Déjenme sus opiniones, estoy ansioso por leerlas!
La cosa es que ahora los diputados van a empezar a darle candela a las mociones de fondo, que arrancan este miércoles. Sesiones extra, debates acalorados… ya ven, el circo rolón anual. Parece que la presión está alta para sacar esto adelante antes de fin de año. Imagínate, quedarse sin presupuesto sería ¡una torta!
Y entre tanto parloteo, salió a relucir una idea que dejó a algunos diputados con la boca abierta: bajar el IVA al 10%. Pero ojo, que no es tan sencillo como eso. A cambio, tendrían que subir el impuesto a los bienes inmuebles en un 0,75%, ¿se imagina la movida? Un baile de números para intentar equilibrar la balanza, eh.
Molina fue bastante transparente al explicarlo. Dijo textualmente: “Estamos haciendo los números al proyecto que presentó la diputada Monserrat Ruiz... pero subir a 0,75% el impuesto a bienes inmuebles.” Pa'lante, dicen, se puede hacer, pero tienen que echarle ojo, revisar bien los cálculos para ver si realmente da el resultado esperado. Como dice el dicho, “medir dos veces cortar una vez”.
Pero espera, que hay más. La iniciativa de la diputada Ruiz –que se llama “Reforma para un IVA justo y un Catastro Moderno”– busca corregir lo que ella considera un “problema estructural” del sistema tributario. Según ella, hoy en día más del 70% de los ingresos fiscales provienen del IVA, que es un impuesto regresivo, es decir, pega más a los que menos tienen. ¡Qué carga!
La idea es mantener el 0,25% que actualmente reciben las municipalidades, pero crear una Agencia Catastral Nacional para actualizar los valores de los inmuebles y combatir la evasión. Así, los dueños de propiedades más lujosas aportarían más al Estado. Además, el aumento del impuesto a bienes inmuebles solo afectaría a las propiedades con un valor superior a 65 salarios base, para proteger a las viviendas de clase media y baja. ¡Eso sí que sería bueno!
Lo interesante de todo este brete es que involucra también a las municipalidades. Según Molina, existe una deuda importante en el pago del impuesto a bienes inmuebles a nivel local, y esta reforma podría ayudarles a recuperar esos fondos. Una colaboración entre el gobierno central y los ayuntamientos, ¿suena chiva, verdad?
Ahora, aquí va la pregunta para que nos digan qué piensan mis queridos foristas: ¿Ustedes creen que bajar el IVA al 10% y subir el impuesto a los bienes inmuebles es una medida justa y efectiva para mejorar la economía del país? ¿O prefieren seguir con el status quo, aunque siga pegando más a los bolsillos de la gente humilde? ¡Déjenme sus opiniones, estoy ansioso por leerlas!
