¡Ay, Dios mío, qué tremenda nota! Parece sacada de película, pero resulta que Maldivas, sí, esas islas paradisíacas donde van los turistas a relajarse, acaba de hacer historia a nivel mundial. Resulta que lograron eliminar la transmisión de VIH, sífilis y hepatitis B de madres a hijos. ¡Un antes y un después pa’ la salud global, chunches!
Imagínate, amigos, esto significa que prácticamente ningún bebé en Maldivas va a nacer contagiado con estas enfermedades graveras. La Organización Mundial de la Salud (OMS) les dio el visto bueno oficial esta semana, y UNICEF ya le está echándole crema diciendo que es un ejemplo clarísimo de cómo el compromiso político serio, invertir plata bien y tener atención médica de calidad pueden cambiarle la vida a varias generaciones.
Y no es que se levantaron un día y pum, ¡listo! No, diay. Según la OMS, cumplieron todos los requisitos: detectaban a las mujeres embarazadas desde temprano, trataban a las mamás que tenían alguna de estas infecciones, y vacunaban a los bebés contra la hepatitis B. Todo en regla, vamos.
El ministro de salud de Maldivas, Abdulla Nazim Ibrahim, estaba más que contento, claro. Dijo que este logro refleja años de esfuerzo invertido en la salud de las mamitas y sus hijos, y que no iban a dejar a nadie atrás. Un mae con visión, vamos. Y así es como se hacen cosas grandes, mi gente.
Ahora, pa’ ponerlos en contexto, en el 2019 ya habían eliminado la transmisión de VIH y sífilis. Pero decidieron no quedarse ahí y echarle con todo a la hepatitis B, que es una fregada más difícil de controlar por lo rápido que se transmite y porque queda guardada en el cuerpo. Entonces, fortalecieron su sistema de salud con chequeos universales durante el embarazo, seguían a las mamás después del parto, y organizaban campañas pa’ educar a toda la población sobre estos temas delicados.
Edward Addai, el representante de UNICEF en Maldivas, nos recordó que cada nene y nena tienen derecho a nacer libres de infecciones. Dijo que todo este éxito es gracias a la visión a largo plazo, a trabajar juntos y a querer darle lo mejor a todos, sin importar quién seas.
Hoy en día, la cantidad de casos de transmisión de estas enfermedades de madre a hijo en Maldivas está por debajo del 2%. Eso, según los estándares de la OMS, es prácticamente cero. ¡Qué nivel, maes! Y justo ahora, la comunidad internacional, liderada por la OMS, UNICEF y ONUSIDA, está buscando que todos los países alcancen este mismo objetivo pa’ el año 2030. Quién sabe, tal vez algún día también podamos decirnos que eliminamos estas enfermedades de nuestras generaciones futuras.
Pero aquí viene la gran pregunta, mi gente. ¿Será posible que Costa Rica, con todo nuestro potencial y nuestra Pura Vida, pueda aprender de la experiencia de Maldivas y emular este éxito? Con nuestros desafíos en el sistema de salud y la necesidad de fortalecer la atención prenatal, ¿creemos que podemos lograr la triple eliminación maternoinfantil para 2030? ¡Den su opinión en el foro, quiero saber qué piensan ustedes!
Imagínate, amigos, esto significa que prácticamente ningún bebé en Maldivas va a nacer contagiado con estas enfermedades graveras. La Organización Mundial de la Salud (OMS) les dio el visto bueno oficial esta semana, y UNICEF ya le está echándole crema diciendo que es un ejemplo clarísimo de cómo el compromiso político serio, invertir plata bien y tener atención médica de calidad pueden cambiarle la vida a varias generaciones.
Y no es que se levantaron un día y pum, ¡listo! No, diay. Según la OMS, cumplieron todos los requisitos: detectaban a las mujeres embarazadas desde temprano, trataban a las mamás que tenían alguna de estas infecciones, y vacunaban a los bebés contra la hepatitis B. Todo en regla, vamos.
El ministro de salud de Maldivas, Abdulla Nazim Ibrahim, estaba más que contento, claro. Dijo que este logro refleja años de esfuerzo invertido en la salud de las mamitas y sus hijos, y que no iban a dejar a nadie atrás. Un mae con visión, vamos. Y así es como se hacen cosas grandes, mi gente.
Ahora, pa’ ponerlos en contexto, en el 2019 ya habían eliminado la transmisión de VIH y sífilis. Pero decidieron no quedarse ahí y echarle con todo a la hepatitis B, que es una fregada más difícil de controlar por lo rápido que se transmite y porque queda guardada en el cuerpo. Entonces, fortalecieron su sistema de salud con chequeos universales durante el embarazo, seguían a las mamás después del parto, y organizaban campañas pa’ educar a toda la población sobre estos temas delicados.
Edward Addai, el representante de UNICEF en Maldivas, nos recordó que cada nene y nena tienen derecho a nacer libres de infecciones. Dijo que todo este éxito es gracias a la visión a largo plazo, a trabajar juntos y a querer darle lo mejor a todos, sin importar quién seas.
Hoy en día, la cantidad de casos de transmisión de estas enfermedades de madre a hijo en Maldivas está por debajo del 2%. Eso, según los estándares de la OMS, es prácticamente cero. ¡Qué nivel, maes! Y justo ahora, la comunidad internacional, liderada por la OMS, UNICEF y ONUSIDA, está buscando que todos los países alcancen este mismo objetivo pa’ el año 2030. Quién sabe, tal vez algún día también podamos decirnos que eliminamos estas enfermedades de nuestras generaciones futuras.
Pero aquí viene la gran pregunta, mi gente. ¿Será posible que Costa Rica, con todo nuestro potencial y nuestra Pura Vida, pueda aprender de la experiencia de Maldivas y emular este éxito? Con nuestros desafíos en el sistema de salud y la necesidad de fortalecer la atención prenatal, ¿creemos que podemos lograr la triple eliminación maternoinfantil para 2030? ¡Den su opinión en el foro, quiero saber qué piensan ustedes!