¡Ay, Dios mío, qué está pasando en este país! El Presidente Chaves, otra vez metiéndose en un brete que él mismo se fabricó. Resulta que le dio gana comentar sobre lo que pasó con la diputada Johana Obando en Cartago, donde una señora con sombrilla casi la hace volar, y en lugar de condenar la agresión, ¡le echó miel encima! De plano dijo: "La señora de la sombrilla, usted me representa". ¿En serio, don Rodolfo? ¿Así se maneja una situación así?
Para refrescarles la memoria, la vaina fue así: la diputada estaba saliendo de un acto oficial en Cartago cuando una señora, movida por quién sabe qué coraje, le lanzó una sombrilla encima, gritándole improperios. Todo quedó grabado, claro, porque en Costa Rica ya estamos acostumbrados a ver estas cosas. Por suerte, unos ciudadanos y la policía reaccionaron rápido y evitaron que la diputada terminara hecha puré. Pero ahí está el detalle: el Presidente decide meterse en la vaina dando una justificación indirecta a la agresora.
Y no es para menos la bronca que le han caído. Figuritas políticas de todos los colores, organizaciones sociales y hasta tu abuela que vive en el pueblo, le están diciendo que se ponga las pilas y condene la violencia, punto. Porque, dígame, ¿qué mensaje le estamos dando a la juventud si vemos a la máxima autoridad del país relativizando un acto tan cobarde como este? Parece mentira que todavía tengamos que estar debatiendo sobre esto en pleno siglo XXI.
Ahora, muchos analistas políticos dicen que esto es pura estrategia para mantener a su base electoral contenta, aunque eso signifique pisarle la moral a gente decente. Otros creen que simplemente el Presidente no tiene tacto ni filtro, y habla lo primero que se le venga a la cabeza. Lo cierto es que la imagen del país queda manchada cuando el Presidente hace comentarios tan desafortunados. Da la impresión de que, en vez de defender la democracia y el Estado de Derecho, anda alentando la violencia y la intolerancia.
Pero la cosa no termina ahí, mi clave. Christian Bulgarelli, ese abogado que siempre está en busca de pelea, también denunció al Presidente y a Erwen Masís por amenazas. Según Bulgarelli, ambos le estarían intimidando para silenciarlo. ¡Qué panorama! Un día la sombrilla, al siguiente las denuncias por amenazas… parece novela de Paulo Coelho, pero en Costa Rica. Al final, todos buscando sacar raja a su manera, mientras nosotros seguimos pagando la factura.
Por otro lado, la UCR reporta que hay un 57% de personas indecisas sobre las próximas elecciones. Esto, combinado con la crisis económica y la incertidumbre política, pinta feo para el futuro del país. Claudio Alpízar, ese político astuto, dice que el Presidente está interfiriendo en la política cambiaria para favorecer a su gobierno. Ya saben, haciendo travesuras detrás de las bambalinas para seguir en el poder. ¿Será cierto? Bueno, en Costa Rica ya hemos visto de todo, así que no nos extrañaría mucho.
Mientras tanto, en el ámbito deportivo, Saprissa anda buscando un bombazo para reforzar el ataque. Se rumorea que quieren contratar a un delantero histórico de la MLS que lleva varios meses sin jugar. Imaginen la escena: un jugador de esas características vistiendo la camiseta morada. ¡Sería un espectáculo! Aunque, siendo honesto, creo que ahora tenemos problemas más urgentes que resolver que el ataque de Saprissa. Que le echen atención a la política, mi clave, porque ahí sí que necesitamos un refuerzo urgente.
En fin, señoras y señores, ¿creen que el Presidente debería disculparse por sus declaraciones? ¿O simplemente es parte de su estilo comunicacional peculiar? ¿Y ustedes, qué opinan de la creciente polarización política en nuestro país? ¿Estamos encaminándonos hacia un precipicio o todavía hay tiempo para darle la vuelta al panorama? ¡Demos el ancho y compartamos nuestras ideas en el foro!
Para refrescarles la memoria, la vaina fue así: la diputada estaba saliendo de un acto oficial en Cartago cuando una señora, movida por quién sabe qué coraje, le lanzó una sombrilla encima, gritándole improperios. Todo quedó grabado, claro, porque en Costa Rica ya estamos acostumbrados a ver estas cosas. Por suerte, unos ciudadanos y la policía reaccionaron rápido y evitaron que la diputada terminara hecha puré. Pero ahí está el detalle: el Presidente decide meterse en la vaina dando una justificación indirecta a la agresora.
Y no es para menos la bronca que le han caído. Figuritas políticas de todos los colores, organizaciones sociales y hasta tu abuela que vive en el pueblo, le están diciendo que se ponga las pilas y condene la violencia, punto. Porque, dígame, ¿qué mensaje le estamos dando a la juventud si vemos a la máxima autoridad del país relativizando un acto tan cobarde como este? Parece mentira que todavía tengamos que estar debatiendo sobre esto en pleno siglo XXI.
Ahora, muchos analistas políticos dicen que esto es pura estrategia para mantener a su base electoral contenta, aunque eso signifique pisarle la moral a gente decente. Otros creen que simplemente el Presidente no tiene tacto ni filtro, y habla lo primero que se le venga a la cabeza. Lo cierto es que la imagen del país queda manchada cuando el Presidente hace comentarios tan desafortunados. Da la impresión de que, en vez de defender la democracia y el Estado de Derecho, anda alentando la violencia y la intolerancia.
Pero la cosa no termina ahí, mi clave. Christian Bulgarelli, ese abogado que siempre está en busca de pelea, también denunció al Presidente y a Erwen Masís por amenazas. Según Bulgarelli, ambos le estarían intimidando para silenciarlo. ¡Qué panorama! Un día la sombrilla, al siguiente las denuncias por amenazas… parece novela de Paulo Coelho, pero en Costa Rica. Al final, todos buscando sacar raja a su manera, mientras nosotros seguimos pagando la factura.
Por otro lado, la UCR reporta que hay un 57% de personas indecisas sobre las próximas elecciones. Esto, combinado con la crisis económica y la incertidumbre política, pinta feo para el futuro del país. Claudio Alpízar, ese político astuto, dice que el Presidente está interfiriendo en la política cambiaria para favorecer a su gobierno. Ya saben, haciendo travesuras detrás de las bambalinas para seguir en el poder. ¿Será cierto? Bueno, en Costa Rica ya hemos visto de todo, así que no nos extrañaría mucho.
Mientras tanto, en el ámbito deportivo, Saprissa anda buscando un bombazo para reforzar el ataque. Se rumorea que quieren contratar a un delantero histórico de la MLS que lleva varios meses sin jugar. Imaginen la escena: un jugador de esas características vistiendo la camiseta morada. ¡Sería un espectáculo! Aunque, siendo honesto, creo que ahora tenemos problemas más urgentes que resolver que el ataque de Saprissa. Que le echen atención a la política, mi clave, porque ahí sí que necesitamos un refuerzo urgente.
En fin, señoras y señores, ¿creen que el Presidente debería disculparse por sus declaraciones? ¿O simplemente es parte de su estilo comunicacional peculiar? ¿Y ustedes, qué opinan de la creciente polarización política en nuestro país? ¿Estamos encaminándonos hacia un precipicio o todavía hay tiempo para darle la vuelta al panorama? ¡Demos el ancho y compartamos nuestras ideas en el foro!
