¡Aguántense, compas! La pura verdá es que nos estamos viendo bien, muy bien. Un reporte de Mastercard acaba de confirmar que somos los reyes del gasto turístico en Centroamérica. Sí, así como lo escuchan, nosotros, los ticos, hacemos que el billete hable más fuerte que en cualquier otro lado de la región. Según el estudio, un turista acá deja promedia unos $2.062 en 2024. ¡Una pachanga pa’ la banca!
Pero vamos por partes, parce. Esto no cayó del cielo. El panorama es claro: durante el 2024, el turismo le inyectó unos $5.400 millones a nuestra economía, un crecimiento del 14% respecto al año anterior. Eso sí es trabajarla, diay. Ahora, aunque entraron un poquito más de un millón cuatrocientos mil gringos, colombianos, españoles y otros por avión en el primer semestre de este año, el impacto económico por cabeza sigue subiendo como espuma hirviendo.
Lo interesante es cómo hemos mantenido este ritmo, incluso después del pandémico. Desde 2019, el gasto medio por persona ha ido escalando al 7,26% anual, mientras que el número de visitantes ha aumentado, aunque más lentamente, un 1,9%. Esto significa que no solo estamos atrayendo más gente, sino que también estamos captando a turistas que están dispuestos a desembolsar más plata. Nos estamos moviendo hacia un turismo de mayor calidad, ¿me entienden?
Y hablando de dónde viene la bronca, ¡Estados Unidos es nuestro socio comercial número uno en esto del turismo! Representa casi la mitad (56%) de los ingresos que recibimos. La mayoría busca relajarse, disfrutar de nuestras playas y naturaleza – un 73% – pero cada vez vemos más visitas de familiares y amigos (8%). Incluso, el negocio del turismo empieza a moverse otra vez, llegando al 8%, ¡lo cual es una señal positiva para recuperar lo perdido!
Kattia Montero, la encargada de Mastercard acá en Costa Rica y Nicaragua, comentó que “la evolución del turismo en Costa Rica abre el camino para seguir innovando en soluciones de pago que acompañen su desarrollo sostenible”. Suena lindo, ¿verdad? Lo importante es que esto signifique mejores facilidades para el turista y más oportunidades para los negocios locales, y no solamente más comisiones para los bancos.
Ahora, señoras y señores, hay que ponerle pausa un momento. ¿Por qué los turistas están gastando tanto en Costa Rica? ¿Es porque les gusta realmente nuestra cultura, nuestra comida, nuestros paisajes…? ¿O simplemente estamos vendiendo un paquete caro y llamándolo ‘destino premium’? Aquí hay que reflexionar, porque mantener este ritmo a largo plazo requiere mucho más que simples números. Requiere ofrecer una experiencia auténtica y memorable.
Analizando la situación, parece que el cambio climático va a ser nuestro peor enemigo en esto del turismo. Las sequías, las inundaciones, los huracanes... todo eso afecta la imagen de nuestro país y puede hacer que los turistas busquen otros destinos más seguros. Tenemos que invertir en sostenibilidad, en proteger nuestros recursos naturales y en adaptarnos a estos nuevos desafíos si queremos seguir siendo líderes en la región. Por eso, el tema de los impuestos verdes y otras medidas de protección ambiental se vuelve crucial.
Así que, ¡vamos a celebrar este reconocimiento, pero sin dormirlas! ¿Creen ustedes que Costa Rica podrá mantener este liderazgo en gasto turístico a pesar de los retos ambientales y económicos que tenemos por delante? ¿Deberíamos enfocarnos más en atraer turistas de mercados emergentes o seguir apostando por el mercado estadounidense? Dejen sus opiniones abajo, ¡quiero escuchar qué piensan mis panas del foro!
Pero vamos por partes, parce. Esto no cayó del cielo. El panorama es claro: durante el 2024, el turismo le inyectó unos $5.400 millones a nuestra economía, un crecimiento del 14% respecto al año anterior. Eso sí es trabajarla, diay. Ahora, aunque entraron un poquito más de un millón cuatrocientos mil gringos, colombianos, españoles y otros por avión en el primer semestre de este año, el impacto económico por cabeza sigue subiendo como espuma hirviendo.
Lo interesante es cómo hemos mantenido este ritmo, incluso después del pandémico. Desde 2019, el gasto medio por persona ha ido escalando al 7,26% anual, mientras que el número de visitantes ha aumentado, aunque más lentamente, un 1,9%. Esto significa que no solo estamos atrayendo más gente, sino que también estamos captando a turistas que están dispuestos a desembolsar más plata. Nos estamos moviendo hacia un turismo de mayor calidad, ¿me entienden?
Y hablando de dónde viene la bronca, ¡Estados Unidos es nuestro socio comercial número uno en esto del turismo! Representa casi la mitad (56%) de los ingresos que recibimos. La mayoría busca relajarse, disfrutar de nuestras playas y naturaleza – un 73% – pero cada vez vemos más visitas de familiares y amigos (8%). Incluso, el negocio del turismo empieza a moverse otra vez, llegando al 8%, ¡lo cual es una señal positiva para recuperar lo perdido!
Kattia Montero, la encargada de Mastercard acá en Costa Rica y Nicaragua, comentó que “la evolución del turismo en Costa Rica abre el camino para seguir innovando en soluciones de pago que acompañen su desarrollo sostenible”. Suena lindo, ¿verdad? Lo importante es que esto signifique mejores facilidades para el turista y más oportunidades para los negocios locales, y no solamente más comisiones para los bancos.
Ahora, señoras y señores, hay que ponerle pausa un momento. ¿Por qué los turistas están gastando tanto en Costa Rica? ¿Es porque les gusta realmente nuestra cultura, nuestra comida, nuestros paisajes…? ¿O simplemente estamos vendiendo un paquete caro y llamándolo ‘destino premium’? Aquí hay que reflexionar, porque mantener este ritmo a largo plazo requiere mucho más que simples números. Requiere ofrecer una experiencia auténtica y memorable.
Analizando la situación, parece que el cambio climático va a ser nuestro peor enemigo en esto del turismo. Las sequías, las inundaciones, los huracanes... todo eso afecta la imagen de nuestro país y puede hacer que los turistas busquen otros destinos más seguros. Tenemos que invertir en sostenibilidad, en proteger nuestros recursos naturales y en adaptarnos a estos nuevos desafíos si queremos seguir siendo líderes en la región. Por eso, el tema de los impuestos verdes y otras medidas de protección ambiental se vuelve crucial.
Así que, ¡vamos a celebrar este reconocimiento, pero sin dormirlas! ¿Creen ustedes que Costa Rica podrá mantener este liderazgo en gasto turístico a pesar de los retos ambientales y económicos que tenemos por delante? ¿Deberíamos enfocarnos más en atraer turistas de mercados emergentes o seguir apostando por el mercado estadounidense? Dejen sus opiniones abajo, ¡quiero escuchar qué piensan mis panas del foro!