¡Ay, Dios mío, qué bronca! Aquí seguimos con el temblor político. Álvaro Ramos, el candidato liberacionista, anda apremiando pa' que los diputados le pongan empeño al tema de la inmunidad de Don Rodrigo. Claro, porque según él, nadie está por encima de la ley, ni siquiera el Presidente, ¡y eso que parece que algunos se le han olvidado esas cosas!
La cosa va así: Ramos, con toda la energía que le caracteriza, salió a decir que los diputados tienen que actuar ya mismo, sin dilatarlo más. Le pone mucho énfasis a que esto no es un juicio, sino simplemente darle al Presidente el trato que le darían a cualquier otro ciudadano, pa' que pueda responder ante la justicia si hay algo que aclarar. ¡Y vaya que hay cositas en el aire!
Como bien saben, la Fiscalía lo tiene echao la lupa encima por un asunto de contratitos turbios, unos $400 mil destinados a una productora llamada RMC La Productora S.A., alias Nocaut. Se dice que a cambio de ese jugosito contrato, el señor Christian Bulgarelli, un jefe de empresaaaa, le metióle unas pachangas a Federico Cruz, amigo personal y consejero de Chaves. ¡Un brete! Y ahora resulta que Chaves y el exministro de Comunicación, Jorge Rodríguez, estaban metidos hasta el cuello.
Ramos, con la labia que tiene, confiesa que tiene fe en el trabajo del Poder Judicial y en el fiscal general. Dice que estos señores sí han estado haciendo las cosas bien y siguiendo el debido proceso. Pero bueno, aunque tenga confianza, no deja de exhortar a los diputados a hacer lo correcto y votar a favor de levantar la inmunidad. ¡Que no se anden con rodeos, pa’ todos es igual frente a la ley!
Pa' que se hagan una idea, pa' quitarle la inmunidad al Presidente, se necesitan 38 votos en el plenario. ¡No es broma! Hasta el momento, la cuenta preliminar refleja unos 33 votos a favor, repartidos entre varios partidos y diputadas independientes, incluyendo a Gloria Navas, Johanna Obando y Kattia Cambronero. ¡Un buen paquetazo de gente apoyando el tema!
Pero la balanza aún puede cambiar. Quedan seis votos indecisos, seis que pueden inclinar la parada. Tres de esos pertenecen al PUSC, el diputado independiente Luis Diego Vargas, y dos liberacionistas, Carolina Delgado y José Joaquín Hernández. ¡Estos seis son clave, mae! Si se mueven, la cosa cambia totalmente.
El ambiente está tenso, pues. Los rumores corren como reguero de pólvora. Algunos dicen que los diputados del PUSC están divididos, otros que Delgado y Hernández están esperando ver cómo se mueve la opinión pública. ¡Una torta de nervios! A Don Rodrigo seguro que no le cae muy bien todo este rollo, pero tendrá que enfrentarlo como adulto responsable, si es que quiere seguir en el palco presidencial. Y que no venga a echarles la culpa a los demás, ¿eh?
En fin, todo este circo político nos deja pensando: ¿Es justo que un Presidente, electo democráticamente, tenga que pasar por estas instancias? ¿O es necesario para garantizar la transparencia y la rendición de cuentas? ¿Creen ustedes que los diputados harán lo correcto y votarán a favor de levantar la inmunidad, o cederán a presiones políticas y mantendrán al Presidente abrigadito? ¡Déjenme sus opiniones en los comentarios, quiero saber qué piensa el pueblo!
La cosa va así: Ramos, con toda la energía que le caracteriza, salió a decir que los diputados tienen que actuar ya mismo, sin dilatarlo más. Le pone mucho énfasis a que esto no es un juicio, sino simplemente darle al Presidente el trato que le darían a cualquier otro ciudadano, pa' que pueda responder ante la justicia si hay algo que aclarar. ¡Y vaya que hay cositas en el aire!
Como bien saben, la Fiscalía lo tiene echao la lupa encima por un asunto de contratitos turbios, unos $400 mil destinados a una productora llamada RMC La Productora S.A., alias Nocaut. Se dice que a cambio de ese jugosito contrato, el señor Christian Bulgarelli, un jefe de empresaaaa, le metióle unas pachangas a Federico Cruz, amigo personal y consejero de Chaves. ¡Un brete! Y ahora resulta que Chaves y el exministro de Comunicación, Jorge Rodríguez, estaban metidos hasta el cuello.
Ramos, con la labia que tiene, confiesa que tiene fe en el trabajo del Poder Judicial y en el fiscal general. Dice que estos señores sí han estado haciendo las cosas bien y siguiendo el debido proceso. Pero bueno, aunque tenga confianza, no deja de exhortar a los diputados a hacer lo correcto y votar a favor de levantar la inmunidad. ¡Que no se anden con rodeos, pa’ todos es igual frente a la ley!
Pa' que se hagan una idea, pa' quitarle la inmunidad al Presidente, se necesitan 38 votos en el plenario. ¡No es broma! Hasta el momento, la cuenta preliminar refleja unos 33 votos a favor, repartidos entre varios partidos y diputadas independientes, incluyendo a Gloria Navas, Johanna Obando y Kattia Cambronero. ¡Un buen paquetazo de gente apoyando el tema!
Pero la balanza aún puede cambiar. Quedan seis votos indecisos, seis que pueden inclinar la parada. Tres de esos pertenecen al PUSC, el diputado independiente Luis Diego Vargas, y dos liberacionistas, Carolina Delgado y José Joaquín Hernández. ¡Estos seis son clave, mae! Si se mueven, la cosa cambia totalmente.
El ambiente está tenso, pues. Los rumores corren como reguero de pólvora. Algunos dicen que los diputados del PUSC están divididos, otros que Delgado y Hernández están esperando ver cómo se mueve la opinión pública. ¡Una torta de nervios! A Don Rodrigo seguro que no le cae muy bien todo este rollo, pero tendrá que enfrentarlo como adulto responsable, si es que quiere seguir en el palco presidencial. Y que no venga a echarles la culpa a los demás, ¿eh?
En fin, todo este circo político nos deja pensando: ¿Es justo que un Presidente, electo democráticamente, tenga que pasar por estas instancias? ¿O es necesario para garantizar la transparencia y la rendición de cuentas? ¿Creen ustedes que los diputados harán lo correcto y votarán a favor de levantar la inmunidad, o cederán a presiones políticas y mantendrán al Presidente abrigadito? ¡Déjenme sus opiniones en los comentarios, quiero saber qué piensa el pueblo!