¡Oe, pura vida, compas del Foro! Resulta que todos andamos ahí, deslizando el dedo y cerrando apps como si fuera el secreto de la eterna juventud de la batería, ¿verdad? Pues prepárense porque tengo malas noticias: esa jugada ya no funciona. Sí, así como lo oyen. Parece mentira, pero los propios fabricantes nos están diciendo que estamos haciendo el ridículo tratando de controlar lo que el celular hace solito.
Durante años, hemos creído que tener mil pestañas abiertas y apps corriendo en segundo plano era el enemigo número uno de la autonomía del celular. Nos enseñaron a cerrar todo a mansalva, como si estuviéramos apagando luces en un apagón. Pero, según los gurús de Android y Apple, toda esa paranoia es innecesaria… y hasta perjudicial. Resulta que el sistema operativo está mucho más listo que nosotros para administrar estos recursos, y meterle nuestras manos solo causa problemas.
La BBC hizo un buen análisis y citó directamente a Hiroshi Lockheimer, el tipo que ayudó a crear Android. Él mismo dice que tratar de forzar el cierre de apps “puede empeorar las cosas”. Imagínense, estamos complicándole la vida al celular intentando optimizarlo y terminamos haciéndole una fiereza. ¡Qué torta! En Apple, el director ejecutivo Tim Cook también confirmó que las apps en segundo plano no consumen tanta batería como creemos. Según él, no hay necesidad de estar cerrando todo constantemente.
Y ojo, que la cosa va más allá de simplemente no ahorrar batería. Cuando cierras una app a la fuerza, el sistema tiene que volver a cargarla desde cero la próxima vez que la abras. Eso consume más energía que dejarla hibernando en segundo plano. Es como si tuvieras que releer un libro entero cada vez que quieres recordar algo importante, en lugar de simplemente hojear las páginas. Un brete, vamos.
Ahora bien, esto no quiere decir que debamos andar dejando apps abiertas indefinidamente. Claro que no. Si una app se congela, falla o empieza a comportarse raro, entonces sí, dale duro y ciérrala. Pero si todo está funcionando normal, déjala que haga su magia. El celular sabe lo que hace, mae. Confía en la máquina.
Pero, ¿qué podemos hacer entonces para alargar la duración de la batería? Bueno, aquí viene la buena. Primero, bájale al brillo de la pantalla. Segundo, apaga el Wi-Fi, el Bluetooth y el GPS cuando no los estés usando. Tercero, revoca los permisos de ubicación a las apps que no los necesitan. Y cuarto, activa el modo de ahorro de energía cuando estés en apuros. Cosas básicas, diay, pero que marcan la diferencia.
Además, tenemos que entender que las baterías tienen vida útil, igual que cualquier otra cosa. Con el tiempo se desgastan, así que no importa cuánto intentes optimizarlas, eventualmente van a perder su capacidad. Lo importante es cuidar nuestro celular, evitar exponerlo a temperaturas extremas y usar cargadores originales. Así, prolongaremos su vida útil y evitaremos sorpresas desagradables.
Así que ya saben, compas. Olvídense de la manía de cerrar apps y pónganse a disfrutar de sus celulares sin tanto estrés. ¿Ustedes qué opinan? ¿Han notado alguna diferencia al cerrar aplicaciones constantemente? ¿Cuáles son sus trucos favoritos para ahorrar batería?
Durante años, hemos creído que tener mil pestañas abiertas y apps corriendo en segundo plano era el enemigo número uno de la autonomía del celular. Nos enseñaron a cerrar todo a mansalva, como si estuviéramos apagando luces en un apagón. Pero, según los gurús de Android y Apple, toda esa paranoia es innecesaria… y hasta perjudicial. Resulta que el sistema operativo está mucho más listo que nosotros para administrar estos recursos, y meterle nuestras manos solo causa problemas.
La BBC hizo un buen análisis y citó directamente a Hiroshi Lockheimer, el tipo que ayudó a crear Android. Él mismo dice que tratar de forzar el cierre de apps “puede empeorar las cosas”. Imagínense, estamos complicándole la vida al celular intentando optimizarlo y terminamos haciéndole una fiereza. ¡Qué torta! En Apple, el director ejecutivo Tim Cook también confirmó que las apps en segundo plano no consumen tanta batería como creemos. Según él, no hay necesidad de estar cerrando todo constantemente.
Y ojo, que la cosa va más allá de simplemente no ahorrar batería. Cuando cierras una app a la fuerza, el sistema tiene que volver a cargarla desde cero la próxima vez que la abras. Eso consume más energía que dejarla hibernando en segundo plano. Es como si tuvieras que releer un libro entero cada vez que quieres recordar algo importante, en lugar de simplemente hojear las páginas. Un brete, vamos.
Ahora bien, esto no quiere decir que debamos andar dejando apps abiertas indefinidamente. Claro que no. Si una app se congela, falla o empieza a comportarse raro, entonces sí, dale duro y ciérrala. Pero si todo está funcionando normal, déjala que haga su magia. El celular sabe lo que hace, mae. Confía en la máquina.
Pero, ¿qué podemos hacer entonces para alargar la duración de la batería? Bueno, aquí viene la buena. Primero, bájale al brillo de la pantalla. Segundo, apaga el Wi-Fi, el Bluetooth y el GPS cuando no los estés usando. Tercero, revoca los permisos de ubicación a las apps que no los necesitan. Y cuarto, activa el modo de ahorro de energía cuando estés en apuros. Cosas básicas, diay, pero que marcan la diferencia.
Además, tenemos que entender que las baterías tienen vida útil, igual que cualquier otra cosa. Con el tiempo se desgastan, así que no importa cuánto intentes optimizarlas, eventualmente van a perder su capacidad. Lo importante es cuidar nuestro celular, evitar exponerlo a temperaturas extremas y usar cargadores originales. Así, prolongaremos su vida útil y evitaremos sorpresas desagradables.
Así que ya saben, compas. Olvídense de la manía de cerrar apps y pónganse a disfrutar de sus celulares sin tanto estrés. ¿Ustedes qué opinan? ¿Han notado alguna diferencia al cerrar aplicaciones constantemente? ¿Cuáles son sus trucos favoritos para ahorrar batería?
