¡Ay, Dios mío, qué vaina! Se ha levantado un escándalo porque parece que algunos legisladores andan pensando en dejar que la gente retire el dinero del ROP. Pero ojo, que esto no es pa' jugar, amigos. Según la Superintendencia de Pensiones (SUPEN), si se le da luz verde a estas propuestas, nos vamos a llevar un sustazo que ni les imaginen.
Para ponerle contexto, el ROP – Régimen Obligatorio de Pensiones, pa’ los que no estén al día – es como un “plus” que nosotros los trabajadores hacemos aparte de la pensión del INSU. Piensen que con la natalidad bajando y más abuelitos jubilándose, necesitamos que la gente tenga una jubilación digna, y este ROP era la clave. Ahora, si todos empiezan a sacar el dinero, ¡diay!, ¿qué será de nuestro futuro?
Hermes Alvarado, el jefe de la SUPEN, lo dejó bien claro: inyectar ¢945 mil millones en la economía de golpe es una locura. Imaginen el efecto dominó. Primero, las operadoras de pensiones tendrían que vender activos rapidito para cubrir los retiros, y probablemente lo harían con pérdidas, afectando el rendimiento de todos los que se quedaron ahorrando. Segundo, subirían las tasas de interés, lo que significaría que todo nos costaría más caro, desde el pan hasta el chunche del carro.
Alvarado, sin pelos en la lengua, dijo que esto socavaría todo el sistema de pensiones. ¿Cómo van a esperar que funcione si la gente puede retirar su dinero cuando se les antoja? Es como querer construir una casa con arena, ¡se va a derrumbar! Él mismo comentó que ya están hablando con los diputados para explicarles la magnitud del problema y convencerlos de que no aprueben estas leyes tan peligrosas.
Además, no es solo el impacto económico inmediato. Piense en el largo plazo. Si la gente empieza a retirar el ROP, muchos terminarán gastándolo en cosas innecesarias y luego se encontrarán sin ahorros para la vejez. ¡Será un lío, diay! Mejor tener disciplina y dejar que el dinero siga creciendo, ¿no creen?
Ahora bien, entiendo que la gente esté necesitada, que hay muchas dificultades económicas y que a veces uno piensa que sacarle unos billetes del ROP puede ser una solución rápida. Pero es como tomar analgésicos para un dolor crónico: alivia temporalmente, pero no cura la raíz del problema. En cambio, se arriesgan a crear otro problema aún mayor en el futuro.
Y no piensen que esto es solo cosa de ricos. Todos estamos involucrados. El sistema de pensiones es responsabilidad de todos los costarricenses, y si permitimos que se destruya, todos vamos a pagar las consecuencias. Tenemos que exigir a nuestros representantes que tomen decisiones responsables y que protejan nuestro futuro, aunque eso signifique no poder acceder a ese dinerito ahora. ¡Esto es por nuestras nietas y nietos!
En fin, la cosa está que arde. ¿Ustedes qué piensan? ¿Consideran que permitir el retiro del ROP es una medida necesaria para ayudar a la población, o prefieren apostar por proteger el sistema de pensiones a largo plazo, incluso si eso significa renunciar a una ayuda inmediata? ¡Déjenme sus opiniones en los comentarios!
Para ponerle contexto, el ROP – Régimen Obligatorio de Pensiones, pa’ los que no estén al día – es como un “plus” que nosotros los trabajadores hacemos aparte de la pensión del INSU. Piensen que con la natalidad bajando y más abuelitos jubilándose, necesitamos que la gente tenga una jubilación digna, y este ROP era la clave. Ahora, si todos empiezan a sacar el dinero, ¡diay!, ¿qué será de nuestro futuro?
Hermes Alvarado, el jefe de la SUPEN, lo dejó bien claro: inyectar ¢945 mil millones en la economía de golpe es una locura. Imaginen el efecto dominó. Primero, las operadoras de pensiones tendrían que vender activos rapidito para cubrir los retiros, y probablemente lo harían con pérdidas, afectando el rendimiento de todos los que se quedaron ahorrando. Segundo, subirían las tasas de interés, lo que significaría que todo nos costaría más caro, desde el pan hasta el chunche del carro.
Alvarado, sin pelos en la lengua, dijo que esto socavaría todo el sistema de pensiones. ¿Cómo van a esperar que funcione si la gente puede retirar su dinero cuando se les antoja? Es como querer construir una casa con arena, ¡se va a derrumbar! Él mismo comentó que ya están hablando con los diputados para explicarles la magnitud del problema y convencerlos de que no aprueben estas leyes tan peligrosas.
Además, no es solo el impacto económico inmediato. Piense en el largo plazo. Si la gente empieza a retirar el ROP, muchos terminarán gastándolo en cosas innecesarias y luego se encontrarán sin ahorros para la vejez. ¡Será un lío, diay! Mejor tener disciplina y dejar que el dinero siga creciendo, ¿no creen?
Ahora bien, entiendo que la gente esté necesitada, que hay muchas dificultades económicas y que a veces uno piensa que sacarle unos billetes del ROP puede ser una solución rápida. Pero es como tomar analgésicos para un dolor crónico: alivia temporalmente, pero no cura la raíz del problema. En cambio, se arriesgan a crear otro problema aún mayor en el futuro.
Y no piensen que esto es solo cosa de ricos. Todos estamos involucrados. El sistema de pensiones es responsabilidad de todos los costarricenses, y si permitimos que se destruya, todos vamos a pagar las consecuencias. Tenemos que exigir a nuestros representantes que tomen decisiones responsables y que protejan nuestro futuro, aunque eso signifique no poder acceder a ese dinerito ahora. ¡Esto es por nuestras nietas y nietos!
En fin, la cosa está que arde. ¿Ustedes qué piensan? ¿Consideran que permitir el retiro del ROP es una medida necesaria para ayudar a la población, o prefieren apostar por proteger el sistema de pensiones a largo plazo, incluso si eso significa renunciar a una ayuda inmediata? ¡Déjenme sus opiniones en los comentarios!