El marido sale del baño desnudo y empieza a meterse a la cama, listo para echarse encima de su mujer, cuando ésta se queja diciéndole como siempre:
- “Tengo dolor de cabeza”.
“Perfecto”, responde el marido. “Casualmente estaba en el baño espolvoreándome el pene con aspirina. La puedes tomar oral o como supositorio, ¡tú eliges!. “
- “Tengo dolor de cabeza”.
“Perfecto”, responde el marido. “Casualmente estaba en el baño espolvoreándome el pene con aspirina. La puedes tomar oral o como supositorio, ¡tú eliges!. “