¡Ay, Dios mío! Qué bronca más grande se armó en la Imprenta Nacional. Resulta que Pamela Fabiola Solano Solano, una funcionaria de allá, le echó bomba a varios jeferos porque dice que le cambiaron la nota en un concurso pa' conseguir un puesto fijo. ¡Una torta!, vamos a ver qué sale de esto.
La cosa es que Solano participó en un concurso interno, el CI-01-IN2024, pa’ aspirar a una plaza en propiedad. Según parece, sacó 81,42 puntos, una nota bastante buena, ¿eh? Pero luego, ¡sorpresa!, la nota se desplomó a 73,14. Con esa diferencia, se quedó fuera de la terna final y otros compañeros con notas peores le quitaron la oportunidad. ¡Un lamete!, eso no se vale.
La denunciante, respaldada por su abogado Dennis Alvarado, acusa directamente al director general, Jorge Castro Fonseca, y a otras dos jefas de departamento: la de Servicios Generales y la de Recursos Humanos. Asegura que todo fue una jugada concertada pa’ favorecer a un candidato en particular. El abogado Alvarado me dijo que Castro, supuestamente, le pidió a la jefa de Solano que emitiera una recomendación a favor de otro concursante, ¡cuando eso no le tocaba! Como si él fuera el dueño de la tienda, diay.
Según el documento al que tuvo acceso Diario Extra, Solano basa su denuncia en artículos del Código Penal y de la Ley contra la Corrupción. Habla de falsedad ideológica, uso de documento falso y hasta enriquecimiento ilícito. ¡Se puso seria la vaina!, vamos a ver si la Fiscalía le da bola a esto. Están pidiendo que anulen todos los actos administrativos relacionados con el concurso y que se investigue a fondo a estos señores.
Y ojo, que el caso tiene detalles interesantes. Alvarado añadió que, curiosamente, la carta donde Castro le pide a la jefa de Solano que haga la recomendación, ¡no aparece en el expediente! ¿Será que quieren esconder algo?, uno nunca sabe. Lo raro es que si algo hay que ocultar, se acabaron las chances de que quede en el olvido, pues ahora están en la mira de toda la opinión publica, y eso no es facil de evadir.
Intentamos hablar con el director general de la Imprenta, pero nos pasó la pelota a un correo electrónico. Le mandamos algunas preguntas y nos llegó una respuesta cortita: “Le informo que esta Dirección General al día de hoy no ha sido notificada, de tal manera que se desconocen las acusaciones...”. Pues claro, ¡si todavía no les cayó encima la Fiscalía, cómo van a comentar! Parece que prefieren quedarse calladitos por ahora, pero la verdad es que esto promete dar mucho de qué hablar.
Ahora, no quiero dejar de lado que esta situación pone en tela de juicio la transparencia y la integridad de las instituciones públicas. Si esto es cierto, ¡qué triste panorama!, afecta la confianza de la gente en el gobierno y demuestra que aún tenemos mucho camino por recorrer para combatir la corrupción. Uno quisiera pensar que estas cosas no pasan, pero la realidad nos golpea con fuerza a veces, y esa es la cruda verdad.
En fin, qué barbaridad de movida. Este caso de la Imprenta Nacional nos deja pensando: ¿Hasta dónde llegan algunos para conseguir sus propios beneficios? ¿Creen que pueden meterse con la justicia y salirse con la suya? ¿Ustedes qué opinan, compas del foro? ¿Cómo deberían actuar las autoridades frente a estas denuncias de corrupción?
La cosa es que Solano participó en un concurso interno, el CI-01-IN2024, pa’ aspirar a una plaza en propiedad. Según parece, sacó 81,42 puntos, una nota bastante buena, ¿eh? Pero luego, ¡sorpresa!, la nota se desplomó a 73,14. Con esa diferencia, se quedó fuera de la terna final y otros compañeros con notas peores le quitaron la oportunidad. ¡Un lamete!, eso no se vale.
La denunciante, respaldada por su abogado Dennis Alvarado, acusa directamente al director general, Jorge Castro Fonseca, y a otras dos jefas de departamento: la de Servicios Generales y la de Recursos Humanos. Asegura que todo fue una jugada concertada pa’ favorecer a un candidato en particular. El abogado Alvarado me dijo que Castro, supuestamente, le pidió a la jefa de Solano que emitiera una recomendación a favor de otro concursante, ¡cuando eso no le tocaba! Como si él fuera el dueño de la tienda, diay.
Según el documento al que tuvo acceso Diario Extra, Solano basa su denuncia en artículos del Código Penal y de la Ley contra la Corrupción. Habla de falsedad ideológica, uso de documento falso y hasta enriquecimiento ilícito. ¡Se puso seria la vaina!, vamos a ver si la Fiscalía le da bola a esto. Están pidiendo que anulen todos los actos administrativos relacionados con el concurso y que se investigue a fondo a estos señores.
Y ojo, que el caso tiene detalles interesantes. Alvarado añadió que, curiosamente, la carta donde Castro le pide a la jefa de Solano que haga la recomendación, ¡no aparece en el expediente! ¿Será que quieren esconder algo?, uno nunca sabe. Lo raro es que si algo hay que ocultar, se acabaron las chances de que quede en el olvido, pues ahora están en la mira de toda la opinión publica, y eso no es facil de evadir.
Intentamos hablar con el director general de la Imprenta, pero nos pasó la pelota a un correo electrónico. Le mandamos algunas preguntas y nos llegó una respuesta cortita: “Le informo que esta Dirección General al día de hoy no ha sido notificada, de tal manera que se desconocen las acusaciones...”. Pues claro, ¡si todavía no les cayó encima la Fiscalía, cómo van a comentar! Parece que prefieren quedarse calladitos por ahora, pero la verdad es que esto promete dar mucho de qué hablar.
Ahora, no quiero dejar de lado que esta situación pone en tela de juicio la transparencia y la integridad de las instituciones públicas. Si esto es cierto, ¡qué triste panorama!, afecta la confianza de la gente en el gobierno y demuestra que aún tenemos mucho camino por recorrer para combatir la corrupción. Uno quisiera pensar que estas cosas no pasan, pero la realidad nos golpea con fuerza a veces, y esa es la cruda verdad.
En fin, qué barbaridad de movida. Este caso de la Imprenta Nacional nos deja pensando: ¿Hasta dónde llegan algunos para conseguir sus propios beneficios? ¿Creen que pueden meterse con la justicia y salirse con la suya? ¿Ustedes qué opinan, compas del foro? ¿Cómo deberían actuar las autoridades frente a estas denuncias de corrupción?