¡Aguántense!, este año la ciencia nacional está echándole huevos a toda máquina. Dos figuras clave, Max Chavarría Vargas de la UCR y Anthony Valverde Abarca del TEC, se llevaron los codiciados Premios Nacionales Clodomiro Picado Twight 2025. Parece mentira, pero entre nosotros, esto es una inyección gigante de orgullo pa’ nuestra gallinota.
Pa' ponerlos en onda, estos premios son lo máximo que el gobierno le da a alguien que se rifa en ciencia y tecnología acá en Costa Rica. Imagínate, es como el Nobel, pero… ¡tico! El MICITT, esos que siempre andan trabajando en silencio, anunciaron los ganadores la semana pasada y el ambiente se encendió con justa razón. Esto nos demuestra que sí hay talento de primera aquí mismo, sin necesidad de irnos a buscarlo afuera.
Empecemos con Don Max, el profe Chavarría de la UCR. Este mae ha hecho cosas increíbles, ¡de verdad! Descubrió unas bacterias superpoderosas en el pelaje de los perezosos, ¡sí señor, perezosos! Estas bacterias producen antibióticos naturales, imagínate eso, ¡medicina de la selva! Además, nos explicó por qué el Río Celeste es tan azulito precioso, y ahora las comunidades locales pueden conservarlo bien. Y encima, se puso a experimentar con el CRISPR, esa técnica de edición genética que anda dando vuelta por ahí. ¡Un crack!
Pero no se quedan atrás los muchachos del TEC, específicamente Anthony Valverde Abarca, quien trabaja allá en San Carlos. ¡Eso sí es descentralización científica, mi gente! Demostró que no solamente se hacen descubrimientos chéveres en el Valle Central, sino también en otras partes del país. Valverde es el fundador del laboratorio AndroTEC y trajo al país la tecnología CASA, que sirve para analizar semen con computadoras. ¡Suena raro, pero ayuda mucho a mejorar la genética del ganado vacuno y cerdo, y hasta investiga a los cocodrilos y caimanes!
Y hablando de animales, la investigación de Valverde es fundamental para conservar especies en peligro. Ya se imagina el impacto que puede tener en nuestros ecosistemas. ¡Es pura bendición! Él mismo comentó que esto es un esfuerzo de equipo, resaltando la importancia de llevar la ciencia a las zonas rurales. Lo que te digo, descentralización es la clave pa’ que todos tengamos acceso al progreso. Que no piensen que solamente en San José pasa algo bueno, brete.
Ahora, volviendo a Chavarría, este profe ya suma más de 77 artículos científicos publicados y tiene una patente registrada. ¡Eso es batir récords a lo grande! Su pasión por la ciencia es contagiosa, y cuando habló de haber recibido el premio, dijo que lo más satisfactorio es ver cómo sus estudiantes crecen profesionalmente. ¡Esa sí que es una meta noble, mi pana! No solamente se trata de hacer descubrimientos, sino de formar nuevas generaciones de científicos.
El proceso de selección fue riguroso, con un jurado compuesto por representantes de varios organismos importantes: el MICITT, la Promotora Costarricense de Innovación, los rectores de las universidades, la Academia Nacional de Ciencias y el Colegio Federado de Ingenieros. Todos ellos evaluaron a fondo los méritos de los candidatos y eligieron a los más destacados. La ceremonia de premiación será el 22 de enero de 2026 en el auditorio del MICITT. ¡Ya quiero ver quién va vestido más elegante!
En fin, este es un momento histórico para la ciencia costarricense. Nos demuestra que tenemos el potencial para competir a nivel mundial si seguimos invirtiendo en investigación y desarrollo. Pero dime tú, ¿crees que el gobierno debería aumentar aún más la inversión en ciencia y tecnología para impulsar aún más estos logros, o consideras que los recursos actuales son suficientes?
Pa' ponerlos en onda, estos premios son lo máximo que el gobierno le da a alguien que se rifa en ciencia y tecnología acá en Costa Rica. Imagínate, es como el Nobel, pero… ¡tico! El MICITT, esos que siempre andan trabajando en silencio, anunciaron los ganadores la semana pasada y el ambiente se encendió con justa razón. Esto nos demuestra que sí hay talento de primera aquí mismo, sin necesidad de irnos a buscarlo afuera.
Empecemos con Don Max, el profe Chavarría de la UCR. Este mae ha hecho cosas increíbles, ¡de verdad! Descubrió unas bacterias superpoderosas en el pelaje de los perezosos, ¡sí señor, perezosos! Estas bacterias producen antibióticos naturales, imagínate eso, ¡medicina de la selva! Además, nos explicó por qué el Río Celeste es tan azulito precioso, y ahora las comunidades locales pueden conservarlo bien. Y encima, se puso a experimentar con el CRISPR, esa técnica de edición genética que anda dando vuelta por ahí. ¡Un crack!
Pero no se quedan atrás los muchachos del TEC, específicamente Anthony Valverde Abarca, quien trabaja allá en San Carlos. ¡Eso sí es descentralización científica, mi gente! Demostró que no solamente se hacen descubrimientos chéveres en el Valle Central, sino también en otras partes del país. Valverde es el fundador del laboratorio AndroTEC y trajo al país la tecnología CASA, que sirve para analizar semen con computadoras. ¡Suena raro, pero ayuda mucho a mejorar la genética del ganado vacuno y cerdo, y hasta investiga a los cocodrilos y caimanes!
Y hablando de animales, la investigación de Valverde es fundamental para conservar especies en peligro. Ya se imagina el impacto que puede tener en nuestros ecosistemas. ¡Es pura bendición! Él mismo comentó que esto es un esfuerzo de equipo, resaltando la importancia de llevar la ciencia a las zonas rurales. Lo que te digo, descentralización es la clave pa’ que todos tengamos acceso al progreso. Que no piensen que solamente en San José pasa algo bueno, brete.
Ahora, volviendo a Chavarría, este profe ya suma más de 77 artículos científicos publicados y tiene una patente registrada. ¡Eso es batir récords a lo grande! Su pasión por la ciencia es contagiosa, y cuando habló de haber recibido el premio, dijo que lo más satisfactorio es ver cómo sus estudiantes crecen profesionalmente. ¡Esa sí que es una meta noble, mi pana! No solamente se trata de hacer descubrimientos, sino de formar nuevas generaciones de científicos.
El proceso de selección fue riguroso, con un jurado compuesto por representantes de varios organismos importantes: el MICITT, la Promotora Costarricense de Innovación, los rectores de las universidades, la Academia Nacional de Ciencias y el Colegio Federado de Ingenieros. Todos ellos evaluaron a fondo los méritos de los candidatos y eligieron a los más destacados. La ceremonia de premiación será el 22 de enero de 2026 en el auditorio del MICITT. ¡Ya quiero ver quién va vestido más elegante!
En fin, este es un momento histórico para la ciencia costarricense. Nos demuestra que tenemos el potencial para competir a nivel mundial si seguimos invirtiendo en investigación y desarrollo. Pero dime tú, ¿crees que el gobierno debería aumentar aún más la inversión en ciencia y tecnología para impulsar aún más estos logros, o consideras que los recursos actuales son suficientes?
