¡Ay, Dios mío, qué desastre! Resulta que el Ministerio de Salud nos ha tirado una bomba: retiraron del mercado los muslitos de pollo cocidos de Pollo Rey por estar contaminados con Listeria monocytogenes. Imagínate, justo cuando todos estábamos pensando en prepararnos unas buenas enchiladas dominicales con esos chunchos... ¡Esto sí que es un respingo!
Según el comunicado oficial, el problema está en el lote 2508250101, esos muslitos de pollo cocidos que tanto andamos comprando en los super. Tiene registro sanitario B-45301 (GT-B.45301) y caducan en mayo del próximo año, así que si tienes alguno guardadito en el congelador, ¡corre a tirarlo! No te arriesgues a llevarte una sorpresa desagradísima.
Lo que descubrieron los científicos del INCIENSA (Instituto Costarricense de Investigación y Enseñanza en Nutrición y Salud), quienes hicieron los análisis, es que estos pollitos estaban repletos de Listeria. Esto viola las normas centroamericanas de seguridad alimentaria, esas mismas que dicen que los productos cárnicos cocidos no pueden tener esa bacteria. Es decir, no cumplen con los requisitos básicos para vendérselos a nosotros, los consumidores.
El bicho resultó porque el Ministerio de Salud estaba haciendo sus controles rutinarios en varios súper del país –la verdad, es bueno saber que alguien está cuidando lo que compramos– y ahí encontraron los niveles de Listeria por las nubes. Ya están coordinando con los súper, con el importador y con SENASA (Servicio Nacional de Salud Animal) para retirar el lote contaminado del mercado lo más rápido posible. ¡Menos mal que se dieron cuenta!
Ahora, la pregunta que ronda por la cabeza de muchos es: ¿cómo pasó esto? ¿Cómo pudo llegar un lote contaminado hasta nuestras mesas? Pollo Rey, claro, ha dicho que está cooperando con las autoridades para investigar qué salió mal en el proceso de producción y evitar que esto vuelva a pasar. Esperemos que realmente le ponganle duro y encuentren la raíz del problema, porque esto afecta la confianza de la gente en la comida que compra.
Este escándalo nos recuerda, nuevamente, la importancia de prestar atención a las fechas de vencimiento y a cualquier alerta que emita el Ministerio de Salud. A veces, por apuro o por descuido, olvidamos revisar estas cosas, y luego terminamos pagando las consecuencias. ¡Mejor prevenir que lamentar, como dice mi abu!
Además, esto me hace pensar en todas esas otras marcas de pollo cocido que hay en el mercado. ¿Están también bajo la lupa del Ministerio de Salud? ¿Será que estamos comiendo productos contaminados sin siquiera darnos cuenta? Que se pongan las pilas, porque nosotros merecemos consumir alimentos seguros y de calidad. ¿Deberían intensificar los controles de salud en toda la industria avícola?
En fin, amigos, este asunto nos deja pensando mucho. Ahora, la gran pregunta es: ¿qué vamos a comer en lugar de esos muslitos de Pollo Rey? ¿Alguien sabe dónde podemos conseguir unos pollitos cocidos confiables y a buen precio? ¡Déjenme sus recomendaciones en los comentarios, porque yo estoy desesperado por cenar algo rico y seguro!
Según el comunicado oficial, el problema está en el lote 2508250101, esos muslitos de pollo cocidos que tanto andamos comprando en los super. Tiene registro sanitario B-45301 (GT-B.45301) y caducan en mayo del próximo año, así que si tienes alguno guardadito en el congelador, ¡corre a tirarlo! No te arriesgues a llevarte una sorpresa desagradísima.
Lo que descubrieron los científicos del INCIENSA (Instituto Costarricense de Investigación y Enseñanza en Nutrición y Salud), quienes hicieron los análisis, es que estos pollitos estaban repletos de Listeria. Esto viola las normas centroamericanas de seguridad alimentaria, esas mismas que dicen que los productos cárnicos cocidos no pueden tener esa bacteria. Es decir, no cumplen con los requisitos básicos para vendérselos a nosotros, los consumidores.
El bicho resultó porque el Ministerio de Salud estaba haciendo sus controles rutinarios en varios súper del país –la verdad, es bueno saber que alguien está cuidando lo que compramos– y ahí encontraron los niveles de Listeria por las nubes. Ya están coordinando con los súper, con el importador y con SENASA (Servicio Nacional de Salud Animal) para retirar el lote contaminado del mercado lo más rápido posible. ¡Menos mal que se dieron cuenta!
Ahora, la pregunta que ronda por la cabeza de muchos es: ¿cómo pasó esto? ¿Cómo pudo llegar un lote contaminado hasta nuestras mesas? Pollo Rey, claro, ha dicho que está cooperando con las autoridades para investigar qué salió mal en el proceso de producción y evitar que esto vuelva a pasar. Esperemos que realmente le ponganle duro y encuentren la raíz del problema, porque esto afecta la confianza de la gente en la comida que compra.
Este escándalo nos recuerda, nuevamente, la importancia de prestar atención a las fechas de vencimiento y a cualquier alerta que emita el Ministerio de Salud. A veces, por apuro o por descuido, olvidamos revisar estas cosas, y luego terminamos pagando las consecuencias. ¡Mejor prevenir que lamentar, como dice mi abu!
Además, esto me hace pensar en todas esas otras marcas de pollo cocido que hay en el mercado. ¿Están también bajo la lupa del Ministerio de Salud? ¿Será que estamos comiendo productos contaminados sin siquiera darnos cuenta? Que se pongan las pilas, porque nosotros merecemos consumir alimentos seguros y de calidad. ¿Deberían intensificar los controles de salud en toda la industria avícola?
En fin, amigos, este asunto nos deja pensando mucho. Ahora, la gran pregunta es: ¿qué vamos a comer en lugar de esos muslitos de Pollo Rey? ¿Alguien sabe dónde podemos conseguir unos pollitos cocidos confiables y a buen precio? ¡Déjenme sus recomendaciones en los comentarios, porque yo estoy desesperado por cenar algo rico y seguro!