Mientras los políticos tratan explicar las causas del creciente desempleo en el mundo, es curioso que "ignoren" la principal e inevitable: El desempleo tecnológico.
Los niveles de desempleo crecen dramáticamente en muchas partes del mundo. ¿Por qué pasa esto? ¿Puede ser evitado? Los que permanentemente están desempleados no tienen ingreso alguno y muchos no encuentran otra alternativa que tener ingresos a través del crimen.
Todos sabemos que anualmente crece la eficiencia de todo tipo de máquinas. Cada vez necesitamos menos personas para producir la misma cantidad de bienes. En los últimos 200 años se ha reducido el tiempo de trabajo de aproximadamente 12 horas por día a menos de 8 horas diarias y la semana de trabajo se redujo de 7 a 5 días.
Todos sabemos que lo que abunda tiene poco valor.
¿Y esto que tiene que ver?
La causa principal del alto nivel de desempleo es el progreso tecnológico. Pero si cada año producimos la misma cantidad de bienes con menos personas -- en muy pocos años muchísimo menos horas de trabajo serán necesarias para producir todos los bienes que se podrían necesitar. La tendencia histórica ha sido la de utilizar cada vez menos horas de trabajo por semana. Y con esta tendencia, las horas de trabajo humano llegarán a ser cero.
Una sobreoferta de horas de trabajo significa que éstas valen menos y bajan los sueldos y salarios. Muchas personas se quedan sin trabajo; ya no se necesitan sus horas de trabajo. Los que están sin trabajo no tienen ingreso alguno y por eso disminuye la demanda en bienes. Al haber menos ventas, se produce menos y aún más personas quedan afuera. Es todo un círculo vicioso que acelera el desempleo e incita al crimen, porque algunos se dedicarán al crimen para tener ingresos.
¿Pero entonces por qué no está sucediendo esto hoy en día?
Los empleadores reemplazan a los trabajadores por la tecnología. Por ejemplo: En 1979, una planta de la Ford lograba hacer 960 carros Granada por día con 4.270 trabajadores; en 1990, con los avances tecnológicos, la misma planta hacia 1.200 carros Escort por día con apenas 1.880 trabajadores, los demás fueron despedidos.
En el sector agrícola, prácticamente todo el trabajo es actualmente realizado por máquinas. Por ejemplo en 1949, las máquinas hicieron el 6% de la cosecha de algodón en el sur. En 1972, 100% de la cosecha de algodón fue hecha por máquinas. En 1860, 60% de la población estadounidense trabajaba en la agricultura mientras que hoy el valor es menor al 3%.
Cuando la automatización llegó al sector manufacturero de EEUU en la década del 50, 1.6 millones de trabajos de obreros se perdieron en 9 años. En 1950, el 33% de todos los trabajadores estadounidenses trabajaban en fábricas mientras que en 2002, sólo era el 10%.
La industria metalúrgica de EEUU desde 1982 a 2002 incrementó la producción de 77 millones de toneladas a 120 millones de toneladas, mientras que los trabajadores metalúrgicos empleados fueron de 289 mil a sólo 74 mil.
En 2003, fue realizado un estudio sobre las 20 mayores economías del mundo en el período 1995-2002. Se descubrió que 31 millones de trabajos en fábricas fueron perdidos, mientras que la producción, de hecho, se incrementó en un 30%.
Este patrón de incremento de productividad y ganancia combinado con el decremento de empleo, es un fenómeno nuevo y poderoso, sin cambios a la vista. Entonces esto ruega la pregunta, ¿A dónde se han ido todos esos trabajos? Al sector de servicios.
Desde 1950 a 2002 el porcentaje de estadounidenses empleados en las industrias de servicios fue del 59% al 82%. En los últimos 50 años el sector de servicio ha estado absorbiendo las pérdidas de trabajo de la agricultura y la manufactura. Desafortunadamente este patrón esta alentándose rápidamente, mientras la automatización informática también se afianza allí.
Desde 1983 a 1993, los bancos recortaron el 37% de sus cajeros humanos y para el año 2000, 90% de todos los clientes bancarios utilizaban cajeros automáticos, o terminales bancarias.
Los operadores telefónicos han sido prácticamente todos reemplazados por sistemas informáticos de respuesta de voz.
Los cajeros de la oficina de correo están siendo reemplazados por máquinas de servicio automático, mientras que las cajas de cobranza están siendo reemplazadas por cabinas informáticas.
No existe ninguna área de la industria de servicios que no esté siendo afectada por la automatización informática.
El economista Stephen Roach advirtió: “El sector de servicios ha perdido su rol como el motor desenfrenado de creación de empleo.”
Dada esta realidad, ¿Dónde está el emergente nuevo sector para emplear a todos los trabajadores desplazados? No hay uno.
Obviamente, los desempleados se quedan con todo su tiempo libre, pero no para el ocio o la diversión. Cómo debería de serlo... Como todos necesitan de techo, alimento, vestuario, etc., los desempleados necesitan inventar formas de sobrevivencia; algunos no logran encontrar una opción honesta, entrando por primera vez en el mundo del crimen y de la violencia. Al inicio del siglo XXI, más de 1/3 de los 3.000 millones de trabajadores del mundo está en paro o subempleado.
¿Y qué consecuencia genera este desempleo tecnológico?
En los ‘90, un proyecto de investigación llamado Estudio ‘Merva-Fowles’ encontró fuertes conexiones entre el desempleo y el crimen. Basaron su investigación en 30 grandes áreas metropolitanas con una población total de 80 millones. Sus descubrimientos fueron que una subida de 1% en el desempleo luego resulta en: un 6,7% de incremento en Homicidios; un 3,4% de incremento en crímenes violentos; un 2,4% de incremento en crímenes sobre posesiones. Durante el período desde 1990 a 1992 esto se tradujo en: 1459 Homicidios adicionales, 62.607 crímenes violentos adicionales y 223.500 crímenes sobre posesiones adicionales.
En otras palabras, el ambiente está creando el comportamiento.
Cómo John Maynard Keynes despectivamente señaló: “Estamos siendo afligidos por una nueva enfermedad de la cual algunos lectores no han oído hablar, pero oirán de gran forma en los años por venir a saber ‘desempleo tecnológico’. Esto refiere al desempleo a causa de nuestro descubrimiento de medios de economizar el uso de labor, excediendo el ritmo al que podemos encontrar nuevos usos para el trabajo.”
Más dinero es invertido para crear máquinas inteligentes que para reducir la ignorancia de las masas.
Si el desempleo en nuestra sociedad actual está teniendo un crecimiento exponencial por lo tanto habrá también un incremento en la criminalidad, por consiguiente habrá un caos social próximamente.
¿Y usted desea eso?
Necesitamos un nuevo sistema social actualizado al conocimiento presente y a métodos modernos.
Los niveles de desempleo crecen dramáticamente en muchas partes del mundo. ¿Por qué pasa esto? ¿Puede ser evitado? Los que permanentemente están desempleados no tienen ingreso alguno y muchos no encuentran otra alternativa que tener ingresos a través del crimen.
Todos sabemos que anualmente crece la eficiencia de todo tipo de máquinas. Cada vez necesitamos menos personas para producir la misma cantidad de bienes. En los últimos 200 años se ha reducido el tiempo de trabajo de aproximadamente 12 horas por día a menos de 8 horas diarias y la semana de trabajo se redujo de 7 a 5 días.
Todos sabemos que lo que abunda tiene poco valor.
¿Y esto que tiene que ver?
La causa principal del alto nivel de desempleo es el progreso tecnológico. Pero si cada año producimos la misma cantidad de bienes con menos personas -- en muy pocos años muchísimo menos horas de trabajo serán necesarias para producir todos los bienes que se podrían necesitar. La tendencia histórica ha sido la de utilizar cada vez menos horas de trabajo por semana. Y con esta tendencia, las horas de trabajo humano llegarán a ser cero.
Una sobreoferta de horas de trabajo significa que éstas valen menos y bajan los sueldos y salarios. Muchas personas se quedan sin trabajo; ya no se necesitan sus horas de trabajo. Los que están sin trabajo no tienen ingreso alguno y por eso disminuye la demanda en bienes. Al haber menos ventas, se produce menos y aún más personas quedan afuera. Es todo un círculo vicioso que acelera el desempleo e incita al crimen, porque algunos se dedicarán al crimen para tener ingresos.
¿Pero entonces por qué no está sucediendo esto hoy en día?
Los empleadores reemplazan a los trabajadores por la tecnología. Por ejemplo: En 1979, una planta de la Ford lograba hacer 960 carros Granada por día con 4.270 trabajadores; en 1990, con los avances tecnológicos, la misma planta hacia 1.200 carros Escort por día con apenas 1.880 trabajadores, los demás fueron despedidos.
En el sector agrícola, prácticamente todo el trabajo es actualmente realizado por máquinas. Por ejemplo en 1949, las máquinas hicieron el 6% de la cosecha de algodón en el sur. En 1972, 100% de la cosecha de algodón fue hecha por máquinas. En 1860, 60% de la población estadounidense trabajaba en la agricultura mientras que hoy el valor es menor al 3%.
Cuando la automatización llegó al sector manufacturero de EEUU en la década del 50, 1.6 millones de trabajos de obreros se perdieron en 9 años. En 1950, el 33% de todos los trabajadores estadounidenses trabajaban en fábricas mientras que en 2002, sólo era el 10%.
La industria metalúrgica de EEUU desde 1982 a 2002 incrementó la producción de 77 millones de toneladas a 120 millones de toneladas, mientras que los trabajadores metalúrgicos empleados fueron de 289 mil a sólo 74 mil.
En 2003, fue realizado un estudio sobre las 20 mayores economías del mundo en el período 1995-2002. Se descubrió que 31 millones de trabajos en fábricas fueron perdidos, mientras que la producción, de hecho, se incrementó en un 30%.
Este patrón de incremento de productividad y ganancia combinado con el decremento de empleo, es un fenómeno nuevo y poderoso, sin cambios a la vista. Entonces esto ruega la pregunta, ¿A dónde se han ido todos esos trabajos? Al sector de servicios.
Desde 1950 a 2002 el porcentaje de estadounidenses empleados en las industrias de servicios fue del 59% al 82%. En los últimos 50 años el sector de servicio ha estado absorbiendo las pérdidas de trabajo de la agricultura y la manufactura. Desafortunadamente este patrón esta alentándose rápidamente, mientras la automatización informática también se afianza allí.
Desde 1983 a 1993, los bancos recortaron el 37% de sus cajeros humanos y para el año 2000, 90% de todos los clientes bancarios utilizaban cajeros automáticos, o terminales bancarias.
Los operadores telefónicos han sido prácticamente todos reemplazados por sistemas informáticos de respuesta de voz.
Los cajeros de la oficina de correo están siendo reemplazados por máquinas de servicio automático, mientras que las cajas de cobranza están siendo reemplazadas por cabinas informáticas.
No existe ninguna área de la industria de servicios que no esté siendo afectada por la automatización informática.
El economista Stephen Roach advirtió: “El sector de servicios ha perdido su rol como el motor desenfrenado de creación de empleo.”
Dada esta realidad, ¿Dónde está el emergente nuevo sector para emplear a todos los trabajadores desplazados? No hay uno.
Obviamente, los desempleados se quedan con todo su tiempo libre, pero no para el ocio o la diversión. Cómo debería de serlo... Como todos necesitan de techo, alimento, vestuario, etc., los desempleados necesitan inventar formas de sobrevivencia; algunos no logran encontrar una opción honesta, entrando por primera vez en el mundo del crimen y de la violencia. Al inicio del siglo XXI, más de 1/3 de los 3.000 millones de trabajadores del mundo está en paro o subempleado.
¿Y qué consecuencia genera este desempleo tecnológico?
En los ‘90, un proyecto de investigación llamado Estudio ‘Merva-Fowles’ encontró fuertes conexiones entre el desempleo y el crimen. Basaron su investigación en 30 grandes áreas metropolitanas con una población total de 80 millones. Sus descubrimientos fueron que una subida de 1% en el desempleo luego resulta en: un 6,7% de incremento en Homicidios; un 3,4% de incremento en crímenes violentos; un 2,4% de incremento en crímenes sobre posesiones. Durante el período desde 1990 a 1992 esto se tradujo en: 1459 Homicidios adicionales, 62.607 crímenes violentos adicionales y 223.500 crímenes sobre posesiones adicionales.
En otras palabras, el ambiente está creando el comportamiento.
Cómo John Maynard Keynes despectivamente señaló: “Estamos siendo afligidos por una nueva enfermedad de la cual algunos lectores no han oído hablar, pero oirán de gran forma en los años por venir a saber ‘desempleo tecnológico’. Esto refiere al desempleo a causa de nuestro descubrimiento de medios de economizar el uso de labor, excediendo el ritmo al que podemos encontrar nuevos usos para el trabajo.”
Más dinero es invertido para crear máquinas inteligentes que para reducir la ignorancia de las masas.
Si el desempleo en nuestra sociedad actual está teniendo un crecimiento exponencial por lo tanto habrá también un incremento en la criminalidad, por consiguiente habrá un caos social próximamente.
¿Y usted desea eso?
Necesitamos un nuevo sistema social actualizado al conocimiento presente y a métodos modernos.