Isla…
Que sola se ve la isla,
Dentro del inmenso mar,
No se mueve ni se queja,
Aunque olas no la dejen de azotar.
Pequeña y frágil en apariencia
Pero grande en voluntad
Soporta vientos y mareas
Hasta una que otra tempestad.
Su naturaleza es única y original,
Como no existe en otro lugar
Sorprendente sin decir nada,
Misteriosa a la mirada.
Ella esconde misterios y secretos
Que nadie puede desentrañar,
Siempre tranquila y callada,
Como si no le perturbara nada.
Su soledad no le molesta,
Cuando ella desea se viste de fiesta
Su espíritu alegra lo lleva dentro,
Y ella disfruta cada momento.
Ama la música de los gorriones
Que a sus jardines le cantan canciones,
Ella sonríe muy complacida
Y cada día agradece a Dios la vida.
Su relieve es como ella desea
Tratar de recorrerla es una odisea
Tal aventura, tal fantasía,
Cualquier planeta la desearía.
Asegurar conocerla es un error,
Sería como querer definir al amor,
Asumir tal cosa es imposible,
Es como pretender mirar lo invisible.
Misteriosa y bella, así mismo es ella.
Tan fría, tan caliente, tan oculta y sorprendente.
Isla solitaria y callada, encantadora y despreocupada.
Déjame decirte en esta noche fría, lo que quiere cantarte esta guitarra mía…
Kuro (M)