¡Ay, Dios mío! Resulta que estamos tranquilos acá en Costa Rica, disfrutándonos del clima y del café, cuando sale la noticia de que nos quieren meter plagas desde afuera. Sí, así como lo escucharon, ¡compras online pueden traer mosquitos, hongos y otras cositas feas que le arruinan la vida a nuestros agricultores! El Servicio Fitosanitario del Estado (SFE), esos unos luchadores que siempre andan cuidando nuestras plantas, lanzó la alarma y nos pide que pensemos dos veces antes de pedirle a un chino un souvenir hecho de palo de guayabo.
La verdad, a muchos nos da flojera leer las letras pequeñas cuando hacemos compras en línea. Uno quiere su gadget nuevo rápido y no se pone a pensar que podría estar traiendo una bomba ecológica dentro de una caja. Pero parece que la cosa es seria. Según el SFE, el problema no es solo con cosas obvias como plantas vivas, sino también con artesanías hechas de coco, madera, bambú… ¡hasta con semillas! Imagínense, un paquetito de semillas de flores exóticas que terminan trayendo un hongo terrible que se come toda la cosecha de banano. ¡Eso sí que sería un despache!
Nelson Morera Paniagua, el jefe del SFE, me contó que casi diario les llegan decomisos en los aeropuertos. Artesanías de todo tipo, trozos de madera con insectos escondidos, ¡semillas de cosas que ni siquiera sabemos qué son! Y lo peor es que la gente cree que si es “hecho a mano”, entonces puede entrar al país tranquilamente. ¡Pero no señor! Cada vara de planta necesita permiso, porque si no, ¡nos vamos al traste!
Lo que realmente me preocupa es el daño económico que esto puede causar. El hongo Fusarium raza 4 tropical, que ya conocen, es una pesadilla para los productores de banano y plátano. No hay remedio químico para eso, así que la única forma de combatirlo es evitar que entre al país. Y ahí entramos nosotros, los compradores online, porque podríamos ser los encargados involuntarios de traer esa peste. ¡Imaginen el precio de las bananas si esa plaga se propaga!
Y no solamente es el tema del banano, chunches. El SFE también está preocupado por el caracol gigante africano, que ya le dio dolores de cabeza a Curubandé y a Heredia. Es un invasor que se come las plantas y causa daños enormes. Así que, si piensan comprar algún arbusto o plantita por internet, ¡mejor olvídenselo! Contacten al Registro de Importaciones del SFE antes de hacer cualquier movimiento, para no llevarse sorpresas desagradables y tener que explicarle al funcionario por qué trajeron un árbol entero en la maleta.
Por cierto, hablando de números, el SFE dice que este año ya han decomisado más de 27 mil piezas de material vegetal. Eso implica una gran cantidad de trabajo y dinero para deshacerse de esas cosas de manera segura. Cada decomiso cuesta alrededor de $10.000 al año, ¡y eso sin contar el tiempo que le dedican los técnicos! Un verdadero brete para el Ministerio de Agricultura y Ganadería (MAG).
Además, no olvidemos que todas estas medidas son para proteger nuestra agricultura, nuestro sustento. Costa Rica es famosa por sus frutas, verduras y flores frescas, y queremos mantener esa reputación. No queremos que nadie diga: “Ah, no compres fruta de Costa Rica, porque viene llena de plagas”. Tenemos que cuidar lo que tenemos, como decimos por acá, o nos vamos a quedar viendo las espaldas y lamentando haber sido tan descuidados. Dejemos de jalarse unas tortas y tomemos cartas en el asunto, ¡porfa!
Entonces, mi pregunta para ustedes, compañeros del Foro: ¿Creen que las autoridades deberían endurecer aún más las restricciones a las compras online de productos vegetales, aunque eso signifique incomodar un poco a los consumidores? ¿O creen que las campañas informativas actuales son suficientes para prevenir el ingreso de plagas peligrosas? ¡Déjenme saber sus opiniones!
La verdad, a muchos nos da flojera leer las letras pequeñas cuando hacemos compras en línea. Uno quiere su gadget nuevo rápido y no se pone a pensar que podría estar traiendo una bomba ecológica dentro de una caja. Pero parece que la cosa es seria. Según el SFE, el problema no es solo con cosas obvias como plantas vivas, sino también con artesanías hechas de coco, madera, bambú… ¡hasta con semillas! Imagínense, un paquetito de semillas de flores exóticas que terminan trayendo un hongo terrible que se come toda la cosecha de banano. ¡Eso sí que sería un despache!
Nelson Morera Paniagua, el jefe del SFE, me contó que casi diario les llegan decomisos en los aeropuertos. Artesanías de todo tipo, trozos de madera con insectos escondidos, ¡semillas de cosas que ni siquiera sabemos qué son! Y lo peor es que la gente cree que si es “hecho a mano”, entonces puede entrar al país tranquilamente. ¡Pero no señor! Cada vara de planta necesita permiso, porque si no, ¡nos vamos al traste!
Lo que realmente me preocupa es el daño económico que esto puede causar. El hongo Fusarium raza 4 tropical, que ya conocen, es una pesadilla para los productores de banano y plátano. No hay remedio químico para eso, así que la única forma de combatirlo es evitar que entre al país. Y ahí entramos nosotros, los compradores online, porque podríamos ser los encargados involuntarios de traer esa peste. ¡Imaginen el precio de las bananas si esa plaga se propaga!
Y no solamente es el tema del banano, chunches. El SFE también está preocupado por el caracol gigante africano, que ya le dio dolores de cabeza a Curubandé y a Heredia. Es un invasor que se come las plantas y causa daños enormes. Así que, si piensan comprar algún arbusto o plantita por internet, ¡mejor olvídenselo! Contacten al Registro de Importaciones del SFE antes de hacer cualquier movimiento, para no llevarse sorpresas desagradables y tener que explicarle al funcionario por qué trajeron un árbol entero en la maleta.
Por cierto, hablando de números, el SFE dice que este año ya han decomisado más de 27 mil piezas de material vegetal. Eso implica una gran cantidad de trabajo y dinero para deshacerse de esas cosas de manera segura. Cada decomiso cuesta alrededor de $10.000 al año, ¡y eso sin contar el tiempo que le dedican los técnicos! Un verdadero brete para el Ministerio de Agricultura y Ganadería (MAG).
Además, no olvidemos que todas estas medidas son para proteger nuestra agricultura, nuestro sustento. Costa Rica es famosa por sus frutas, verduras y flores frescas, y queremos mantener esa reputación. No queremos que nadie diga: “Ah, no compres fruta de Costa Rica, porque viene llena de plagas”. Tenemos que cuidar lo que tenemos, como decimos por acá, o nos vamos a quedar viendo las espaldas y lamentando haber sido tan descuidados. Dejemos de jalarse unas tortas y tomemos cartas en el asunto, ¡porfa!
Entonces, mi pregunta para ustedes, compañeros del Foro: ¿Creen que las autoridades deberían endurecer aún más las restricciones a las compras online de productos vegetales, aunque eso signifique incomodar un poco a los consumidores? ¿O creen que las campañas informativas actuales son suficientes para prevenir el ingreso de plagas peligrosas? ¡Déjenme saber sus opiniones!
