¡Ay, Dios mío! Este martes amanecimos con un chaparrón de esos que te dejan boquiabierto aquí en San Ramón. Literalmente, calles enteras se fueron bajo el agua, y los vecinos andaban más preocupados que gallinas sin polluelos. La cosa estaba fea, changuiños.
Todo empezó pasadas las once y media de la mañana, cuando el cielo se vino abajo y el aguacero no daba tregua. Sectores como el Gimnasio Municipal, el CEN-CINAI y el Centro de Atención Semi-Institucional estaban entre los más afectados, acumulando agua rápidamente. Uno esperaría que el ayuntamiento estuviera más preparado para estas cosas, pero parece que la infraestructura nos está jugando una mala pasada otra vez, ey.
Las redes sociales explotaron con videos y fotos de la situación. Era impresionante ver cómo el agua se había salido de sus cauces y transformaba las calles en pequeños ríos. Algunos vecinos hasta tuvieron que sacar sus chinelas y andar zapateando por encima del agua para poder llegar a casa. ¡Una verdadera aventura!
Y ni hablar del susto que le pegó a la gente. Muchos se quedaron atrapados en sus carros porque el agua subió tan rápido que los dejó varados. Menos mal que los equipos de rescate llegaron prontito para ayudar a sacarlos de esa situación delicada. Ese brete siempre da que pensar, ¿no?
Pero bueno, no todo era drama. También hubo tiempo para reírse un poquito de la situación. Unos cuantos vecinos aprovecharon para hacerse unas selfies nadando en medio de la calle, mientras otros simplemente contemplaban el panorama con una sonrisa resignada. Al final, ¿qué podemos hacer? Así es la vida en Costa Rica, llena de sorpresas, diay.
Ahora, el Instituto Meteorológico Nacional (IMN) tampoco tardó en ponerle candela al asunto. Avisaron que este tipo de aguaceros podrían seguirándose durante toda la tarde y la noche, especialmente en el Pacífico Norte, la Zona Norte y el Valle Central. Parece que la Zona de Convergencia Intertropical decidió visitarnos y trae consigo un montón de nubes cargadas de agua. ¡Qué carga!
De hecho, el IMN ha emitido alertas especiales para algunas zonas, advirtiendo sobre la posibilidad de deslizamientos, inundaciones y problemas con el alcantarillado. Lo que significa que hay que estar muy atentos a las novedades y tomar precauciones si vives en una zona de riesgo. Mejor prevenir que lamentar, ¿verdad?
En fin, después de este chapuzón inesperado, queda la gran pregunta: ¿Estamos preparados como país para enfrentar estos fenómenos climáticos cada vez más frecuentes e intensos? ¿Es hora de invertir más en infraestructura y planes de prevención, o seguiremos esperando a que el agua llegue al cuello para actuar? ¡Déjanos tus comentarios y dime qué piensas tú!
Todo empezó pasadas las once y media de la mañana, cuando el cielo se vino abajo y el aguacero no daba tregua. Sectores como el Gimnasio Municipal, el CEN-CINAI y el Centro de Atención Semi-Institucional estaban entre los más afectados, acumulando agua rápidamente. Uno esperaría que el ayuntamiento estuviera más preparado para estas cosas, pero parece que la infraestructura nos está jugando una mala pasada otra vez, ey.
Las redes sociales explotaron con videos y fotos de la situación. Era impresionante ver cómo el agua se había salido de sus cauces y transformaba las calles en pequeños ríos. Algunos vecinos hasta tuvieron que sacar sus chinelas y andar zapateando por encima del agua para poder llegar a casa. ¡Una verdadera aventura!
Y ni hablar del susto que le pegó a la gente. Muchos se quedaron atrapados en sus carros porque el agua subió tan rápido que los dejó varados. Menos mal que los equipos de rescate llegaron prontito para ayudar a sacarlos de esa situación delicada. Ese brete siempre da que pensar, ¿no?
Pero bueno, no todo era drama. También hubo tiempo para reírse un poquito de la situación. Unos cuantos vecinos aprovecharon para hacerse unas selfies nadando en medio de la calle, mientras otros simplemente contemplaban el panorama con una sonrisa resignada. Al final, ¿qué podemos hacer? Así es la vida en Costa Rica, llena de sorpresas, diay.
Ahora, el Instituto Meteorológico Nacional (IMN) tampoco tardó en ponerle candela al asunto. Avisaron que este tipo de aguaceros podrían seguirándose durante toda la tarde y la noche, especialmente en el Pacífico Norte, la Zona Norte y el Valle Central. Parece que la Zona de Convergencia Intertropical decidió visitarnos y trae consigo un montón de nubes cargadas de agua. ¡Qué carga!
De hecho, el IMN ha emitido alertas especiales para algunas zonas, advirtiendo sobre la posibilidad de deslizamientos, inundaciones y problemas con el alcantarillado. Lo que significa que hay que estar muy atentos a las novedades y tomar precauciones si vives en una zona de riesgo. Mejor prevenir que lamentar, ¿verdad?
En fin, después de este chapuzón inesperado, queda la gran pregunta: ¿Estamos preparados como país para enfrentar estos fenómenos climáticos cada vez más frecuentes e intensos? ¿Es hora de invertir más en infraestructura y planes de prevención, o seguiremos esperando a que el agua llegue al cuello para actuar? ¡Déjanos tus comentarios y dime qué piensas tú!
